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Argentina, la lucha continua....

Carta a mi compa�era
Maria Dolores

Por: John Argerich

Querida Mariquita,

Desde aquel d�a en que te arrancaron de mi lado, nunca dej� de recordarte. Est�s en todas mis ma�anas, con tu sonrisa dulce, vestida de blanco. Con un pa�uelo al cuello, tan rojo como el sue�o que vivimos. Llena de ilusiones, con el pelo suelto echado hacia atr�s. Siempre con la palabra justa para expresar tu amor por los que carec�an de todo, hasta de algo tan elemental como es el amor.

Recuerdo c�mo me impresionaste cuando te conoc�. Eras un ideal, y por eso al perderte me mord� los labios, pero no te he llorado. Por los ideales se lucha, no se llora. Y dejaste un vac�o que, a pesar del tiempo transcurrido, nada logr� llenar. Pero dejaste tambi�n un grito de rabia, pidiendo justicia contra los culpables de tu martirio.

Hoy peino canas, y la vida me ha llevado muy lejos de la tierra que tanto amamos, pero a�n te busco entre mis sue�os. Ese fue el mundo que compartimos. Un mundo de ilusi�n, donde triunfaba el hombre nuevo, sin miseria ni desamparo. La patria socialista, que so��bamos.

Pagamos un alto precio por esa ilusi�n, pero no me arrepiento, porque hacerlo fue un privilegio, cuyo m�rito no es m�o. Ese era el �nico camino posible, con vos a mi lado.

�Vaya contradicci�n! Se que tu vida acab� en el mar, de donde proviene la vida. Arrojada desde lo alto por las manos de alg�n canalla. Quiz�s atada, drogada, o amordazada, no lo quiero imaginar. Pero en mis fantas�as siempre te ver� volando como un p�jaro dorado, contra el marco de un cielo azul. De algo estoy seguro: Que al recibir tu cuerpo entre las olas, el mar lo acogi� con el murmullo de unos viejos versos:

"�El que cay� peleando, vive en cada compa�ero!"

�Hasta la victoria siempre, Mar�a Dolores! No te vamos a olvidar.

Malm�, Suecia.

24 de marzo de 2010

Fuente: lafogata.org

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