Lázaro Vivero Paniza.
Especial para Colprensa, Bogotá
Entrevista a Raúl Reyes                                 

"Son 45 días porque el área y la periferia están llena de tropa y desde el mes de agosto ha sido mayor el incremento.
Por ello calculamos que se requiere más tiempo para verificar y para que las condiciones estén dadas". "Sabemos de las mentiras que se dicen desde el Gobierno permanentemente", dice Raúl Reyes en entrevista a Colprensa.                                

¿Que significado tienen las pruebas de supervivencia de los diputados del Valle del Cauca entregadas en días pasados?              

Esas pruebas se entregaron inicialmente pensando en los familiares, en los amigos y en todos quienes tenemos interés de que se realice el intercambio humanitario. Nos interesa que los camaradas que están en las cárceles, incluidos los que se encuentran en los Estados Unidos, puedan llegar nuevamente como colombianos a su tierra. Las pruebas de supervivencia ayudan muchísimo para que esto se logre.
¿Por qué sólo estas pruebas y no las de todas las personas que están en poder de ustedes?

Lástima que sólo sean estas y no todas, incluyendo las de Eladio (Pérez), las de Alan Jara, las de los militares y policías, las de los estadounidenses (Keith Stansell, Marc Gonsalves y Tom Howes), las de Lizcano (Óscar Tulio), pero la situación de orden público no permite sacarlas permanentemente. Es lo mismo que pasa con los guerrilleros presos, ya que ni siquiera los familiares pueden visitarlos. Por ello queremos el intercambio humanitario. Eso indica a la vez que el Gobierno no tiene el mismo interés. Los familiares se encuentran con posiciones del Gobierno que no permiten que estos temas se traten de otra manera; por ello, la reciente respuesta del Ministro de Defensa. No les interesa.
¿Qué opinan de lo que viene aconteciendo en los municipios de Florida y Pradera?                                

Los bombardeos y el incremento de la Fuerza Pública, precisamente cuando se habla de la posibilidad del intercambio, no son nuevos. Todos en Colombia recordamos, y parte de la comunidad internacional también, cómo inicialmente las Farc pidieron la desmilitarización de San Vicente del Caguán y Cartagena del Chairá. El Gobierno inmediatamente dijo que era una estrategia para quitarnos el peso del fracasado Plan Patriota, que era para oxigenarnos, para evitar que el Plan Patriota tuviera los efectos que querían con la asesoría gringa.
Luego propusimos Florida y Pradera, teniendo como resultado ese incremento de tropas y acciones como los bombardeos y demás hechos que se conocen. Eso es ausencia de voluntad por parte del Gobierno.
¿Y por qué ahora piden pasar de 30 a 45 días de desmilitarización?                                

Son 45 días porque el área y la periferia están llena de tropa y desde el mes de agosto ha sido mayor el incremento.
Por ello calculamos que se requiere más tiempo para verificar y para que las condiciones estén dadas.
¿Cree que es tiempo suficiente?                                

Si nos ponemos de acuerdo, es suficiente. No se requiere de más, a lo sumo unos quince días, si acaso. Pero nada más.
La comunidad de esos municipios está inquieta por la experiencia del Caguán. ¿Esos territorios se llenarán de guerrilleros?                                

La inteligencia del Estado es la que se encarga de difundir estos temores como estrategia. El proceso de diálogo en el Caguán no fue un fracaso como ellos mismos divulgan. En el fondo, lo que quieren es no facilitar las cosas para el acuerdo y que se piense que la guerrilla tiene que hacer lo que el Gobierno quiere. Obviamente, eso nunca se va a aceptar por parte nuestra.
¿Cómo se haría para la llegada de los negociadores? ¿Qué seguridad tendrían?                                 Lógicamente, la seguridad de nuestros delegados es importante y por ello se tendrán que desmilitarizar los municipios, para que lleguen escoltados por miembros igualmente guerrilleros, porque no van a ir solos. El Gobierno quiere algo diferente, pero no podemos confiar la seguridad a integrantes del Ejecutivo, cuando no existen las garantías ni siquiera para ellos mismos.
La Comunidad Internacional ha mostrado interés en este proceso.

¿Existen contactos con algunos paísesContactos con los países existen, pero no hay hasta ahora la definición de quiénes van a participar, porque se está a la espera de que se haga realidad la desmilitarización para hacer la respectiva verificación. Eso se debe hacer luego de la expedición del respectivo decreto.
Ahí sí vendría la escogencia del acompañamiento...
Sí. No solamente Francia, España y Suiza, sino que también podrían estar Cuba y Venezuela, y personalidades de Colombia que han propendido porque este acuerdo se dé. Lo cierto es que cualquier acercamiento se hará de cara al país, sin secretos.
Pero ustedes siempre han puesto en duda la expedición que ese decreto. ¿Lo creen ahora sí posible

Hace pocos días el Gobierno frustró a las personas que creyeron que el decreto iba a salir y que sólo faltaban unas comas y puntos para darlo a conocer, cosa que nosotros nunca creímos, porque sabemos de las mentiras que se dicen desde el Gobierno permanentemente.
¿Y entonces?                                

Pues para nosotros creer, necesitamos el decreto, además de ver si realmente éste se cumple. Eso se logra con la verificación, porque los hechos son los que cuentan.
El Gobierno dijo que había nombrado sus delegados. ¿Los conoce?                                

No. Hay algunos comentarios de prensa que hablan de que sería el Alto Comisionado (Luis Carlos Restrepo).
¿Y de parte de las Farc?                              

  Se hizo público cuando eran Simón Trinidad, Fabián Ramírez y Antonio Losada. Con la extradición de Simón ahora son Ramírez, Losada y Felipe Rincón.
¿La posibilidad de llevar a cabo el intercambio humanitario permitiría abrir las puertas para iniciar unos diálogos de paz?                                

De darse el acuerdo y lograr la liberación de los prisioneros de lado y lado, sería una muestra de que podríamos hacer muchas cosas en una mesa de negociación, que se pueden conseguir por la vía del diálogo y la concertación.
¿Qué opinión tiene de las mesas que se llevan a cabo con las AUC y posiblemente con el ELN?

Son cosas distintas. Las llamadas negociaciones con los paramilitares nos dicen muy poco. No es cierto que se desmovilizaron, ni que entregaron las armas. Si el Gobierno no les cumple a los paramilitares, que son parte del engranaje estatal y que han aportado para hacer a (Álvaro) Uribe presidente, mucho menos le van a cumplir a los guerrilleros: Por eso no creemos que le cumpla al ELN, aunque no estamos diciendo que tengan acuerdos. Son ellos los que pueden decir en qué estado están las conversaciones.  

Es distinto. Producto del conflicto, ellos tienen unos prisioneros nuestros y nosotros tenemos de ellos. Salen los nuestros, salen los de ellos.
Ustedes entregaron pruebas de supervivencia de algunas de las personas que tienen en su poder. ¿Qué saben de los guerrilleros que están en las cárceles?                                

El país conoce que el sistema carcelario es deplorable. Hay mucha gente con cantidad de años allí y ni siquiera tiene sentencia porque no han reunido las pruebas o porque no existen esas pruebas. Hay incluso civiles que no son guerrilleros, sino que viven en áreas donde hay guerrilla, los capturan haciéndolos ver como tales. Las condiciones para nuestros presos en Colombia son muy difíciles.
¿Y las familias?                                

Campañas como las de Caracol Radio son buenas porque mandan mensajes, los escuchan, y son voces de aliento para los prisioneros en la selva. Pero nada se dice sobre los familiares de los guerrilleros presos. Como si no existieran. Este gobierno polarizó el país.
Además, los familiares de guerrilleros se tienen que cuidar. Por ejemplo, a la mamá de Simón Trinidad, que fue a visitarlo a Cómbita, la amenazaron. Eso no lo mencionan.
Mucha gente teme que un eventual intercambio incentive a las Farc a seguir secuestrando...
Eso es lo que dice la inteligencia militar o la gente del mismo Gobierno. La gente lo que reconoce es que hay un conflicto armado y producto de él es que hay colombianos retenidos, o muertos como los del Ejército, la Policía, el DAS, la guerrilla, colombianos todos hijos del pueblo. Las Farc buscan la paz pero con justicia social, con respeto, jamás producto de la claudicación. Si aquí no se cambian las estructuraras y se construye un estado que beneficie a todos, seguiremos siendo víctimas de la politiquería, del engaño y del enriquecimiento de unos pocos.
¿Las Farc quieren el intercambio humanitario?                                

Mantenemos la posición política de persistir en el acuerdo. Quisiéramos que se diera cuanto antes porque se ha perdido mucho tiempo. Se habría podido evitar tantos muertos, tanto sufrimiento de los familiares y de ellos mismos si desde el cuatrienio pasado se hubiera tomado la decisión que hoy se anuncia, pero que no tiene decreto para poder verificar. Por eso decimos: estamos listos.