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No a la Guerra

13 de marzo del 2003

El Sr. Bush sale a matar
Hay un "juicio moral" para sacar a Saddam. Pero ¿qué hay de los demás?

Terry Jones
The Observer
Traducido para Rebelión por Mariví Martínez M.

El Sr. Bush tiene razón, Saddam Hussein es un hombre malo y nadie que yo conozca tiene la más mínima objeción a que el Sr. Bush lo mate. Es solo el modo en que propone hacerlo lo que me preocupa. Soltar 3000 bombas en 48 horas sobre Bagdad va a matar a un montón más de gente que, según sé, no son en absoluto malos.

Esa es la parte de la discusión "moral" que no comprendo. Es un poco como si la policía dijera que saben que un asesino viene del sur de Inglaterra, así que van a ejecutar a todos en Epsom.

Me pregunto una vez más ¿por qué necesita el Sr. Bush soltar 3000 bombas sobre Saddam Hussein? Yo hubiera creído que una era suficiente para sacarlo, si es que sabe dónde está Saddam. Y si no sabe dónde está ¿cómo diablos justifica moralmente tirar ninguna bomba? ¿No se da cuenta el Sr. Bush de que son cosas peligrosas y que tienden a matar gente cuando llegan a tierra?

¿O es que el Sr. Bush sencillamente disfruta la idea de eliminar a un montón de iraquíes? Comprendo el argumento del Sr. Bush que dice que porque Saddam Hussein ha rehusado prestar atención alguna a las Naciones Unidas, entonces el Sr. Bush deberá enseñarle la lección tirándole muchas bombas encima. Pero ahora que nos dice que Naciones Unidas no le va a dar permiso para hacerlo, de todos modos va a tirarle encantado un montón de bombas a Saddam. En tal caso ¿no sería el Sr. Bush culpable de los mismos cargos de los que él acusa a Saddam Hussein? Aparentemente no, porque --de acuerdo a los consejeros del Presidente-- si Naciones Unidas no le diera permiso para tirarle muchas bombas a Saddam Hussein, dejaría de ser una Organización Mundial Responsable y por tanto no tiene porqué hacerle ningún caso.

¿Pero eso mismo no es válido para Saddam Hussein? Si Naciones Unidas deja de ser una Organización Mundial Responsable, ¿cómo puede el hecho de que Saddam Hussein haya rehusado hacerle caso ser algo tan diabólico que justifique soltar bombas sobre la pobre gente que vive bajo su bota?

Y hay otra cosa más. Todo el mundo parece estar muy seguro de que tirar muchas bombas sobre Bagdad nos va a librar de Saddam Hussein. Pero ¿será cierto decir eso? ¿Será más cierto que decir que el haber devastado Afganistán (y matado probablemente a 20.000 personas) nos libró de Al-Qaeda? Un reciente informe de Naciones Unidas estima que cuando eventualmente EE.UU. comience el bombardeo, morirán 100.000 iraquíes.

Verdaderamente no puedo creer que el Presidente de los Estados Unidos alivie sus testículos matando gente. Eso más bien parece el estilo de Saddam Hussein.

Me preocupa más aun que el Sr. Bush diga que una de las razones por las que quiere matar a un montón de iraquíes es porque Saddam Hussein también los ha estado matando. ¿Es esto algún tipo de competencia?

Allá por 1988, Saddam mató a varios miles de un solo saque, en la ciudad de Halabjah. Desde entonces, continúa con ese buen trabajo aunque de manera poco sistemática. De hecho, según yo sé, desde su última parranda en 1988 probablemente no haya matado más conciudadanos suyos que los que mató George W. Bush como gobernador de Texas. Cuando el Sr. Bush se convirtió en Gobernador, en 1995, el promedio anual de ejecuciones era de 7,6. El Sr. Bush tuvo éxito en cuadruplicar esta cifra y elevarla a un magnífico 31,6 por año. Debe haber tenido la tremenda rutina de firmar más de 150 sentencias de muerte mientras fue Gobernador. Supongo que la ventaja de matar iraquíes es que no tienes que firmar un papel para cada uno. Tan solo una firmita rápida y ¡bingo! Puedes matar a cien mil y no hay más preguntas al respecto. Mejor aun: nadie va detenerse en detalles como si algunos tenían un retardo mental o si eran menores, que es lo que le pasó a George W. Bush cuando fue Gobernador de Texas.

No estoy diciendo que no deba permitírsele a George W. Bush matar a tantos como le plazca. Después de todo, él es el líder no elegido de la nación más poderosa del planeta, así que si él no puede hacer todo lo que quiere ¿quién podría?

Y en los años por venir, podemos esperar con confianza muchas más matanzas en todo el mundo. Definitivamente muchas más de las que Saddam Hussein pudo hacer jamás en su propio país.

Observer Comment Extra - 9 de marzo de 2003