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En declaraciones realizadas el pasado domingo, el ministro interino de Medio Ambiente, Jaime Igorra, dijo que sería "una tontería mayúscula" modificar las técnicas de blanqueo de Botnia y Ence, con lo que desterró cualquier acuerdo con Argentina en ese aspecto. El gobierno rechazó la posibilidad de modificar a pedido de Argentina el sistema de blanqueo que utilizarán las empresas Botnia y Ence en el proceso de blanqueo del papel. En las últimas horas trascendió que Argentina estaría dispuesta a retroceder unos pasos en el conflicto generado con Uruguay por las papeleras y limitaría sus pretensiones a exigir un cambio en la tecnología utilizada en el proceso de blanqueo.
La tecnología de producción de pulpa de papel prevista en el diseño de las plantas de celulosa que se instalarán en Fray Bentos será la denominada ECF (Elementary Chlorine Free), que en sus siglas en inglés significa "Libre de Cloro Elemental". Este sistema utiliza compuestos clorados para hacer blanco el papel. El ECF utiliza como reactivo el dióxido de cloro. Este, aunque tiene cloro, genera compuestos con una sola sustitución de cloro en la molécula de lignina ("cemento" que une las fibras de la madera) y no tiene la toxicidad de los derivados del cloro elemental.
El otro sistema utilizado mundialmente en el blanqueo de la pasta de celulosa es el denominado TCF (Totally Chlorine Free), "totalmente libre de cloro". Este método utiliza alternativas como el oxígeno o el peróxido de hidrógeno y se elimina por completo el uso del cloro, aunque a un costo de producción mayor. Desde su irrupción en el conflicto, Greenpeace ha dicho que respaldará la instalación de las plantas si utilizan una técnica totalmente libre de cloro (TCF) y con un sistema de oxígeno. A tal alternativa parece sumarse ahora Argentina como forma de encontrar un punto de equilibrio para el conflicto. El gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti, dijo al diario La Nación que llevará al presidente argentino, Néstor Kirchner, la propuesta de que se reclame un cambio tecnológico. "El cloro produce dioxina, furano y azufre, que son los elementos contaminantes", dijo.
Sin embargo, ni siquiera esta alternativa que reduce la postura radical que hasta el momento ha expuesto tanto Busti como el gobierno nacional, podría abrir una brecha en la férrea defensa de las papeleras que realiza el gobierno de Tabaré Vázquez. El ministro interino de Medio Ambiente, Jaime Igorra, dijo a Ultimas Noticias que es una "tontería mayúscula" el reclamo de Greenpeace. "Greenpeace le está reclamando a Uruguay lo que no le reclama a Argentina ni a Brasil", apuntó ayer Igorra, al tiempo que señaló que la modificación del proceso de producción de papel resulta "una imposición económica".
Igorra dijo que "si Greenpeace consigue una legislación internacional para que todos los países produzcan papel en iguales condiciones, se podría modificar el proceso", pero en caso contrario las papeleras uruguayas podrían producir sólo papel de embalaje y papel higiénico, porque no tendrían entrada en otros mercados. Asimismo, Igorra defendió el hecho de que se concentre una alta producción en dos plantas en el entendido de que ello aumenta las posibilidades de control ambiental, en contraste con lo que sucede en Argentina, que tienen varias plantas de celulosa de pequeño porte diseminadas en varios puntos del país.
Greenpeace reclama un Plan de Producción Limpia a partir de la eliminación del cloro en el blanqueo. Su informe al respecto sostiene que "el blanqueo con cloro es una de las partes más perjudiciales del proceso de producción de papel. Es imprescindible eliminar los daños ambientales generados en esta etapa. La pasta puede ser blanqueada con métodos que no emplean cloro -Totalmente Libres de Cloro o TCF. Esta tecnología ha demostrado ser eficiente, posible y económicamente conveniente".         

Fuente: lafogata.org