VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Latinoamérica

Cuentas alegres

FARC - EP

Cuentas alegres son las que hace el nuevo gobierno y sus funcionarios sobre diversos temas, situación que demuestra que o viven pensando con el deseo o no conocen la realidad nacional o no les interesa resolver los problemas del país, en todos los casos el resultado es el mismo: Los problemas económicos, políticos, sociales y culturales que se agudizan cada día más, producto de las equivocadas políticas del Estado y sus diferentes gobiernos, se incrementaran con las desastrosas consecuencias para la mayoría de colombianos y colombianas.
Veamos algunos casos:
A la sombra de la conmoción interior, para seguir la orientación gringa y claro hablando de paz, se aprobó el impuesto para la guerra, los que todo lo tienen se mueven, para encontrar, como siempre, exenciones y prebendas. Pensando con el deseo, creen que existe la posibilidad de arrasar a sangre y fuego a la insurgencia y luego obligarla a capitular, en algún remedo de diálogo.
Hablan de incrementar el pie de fuerza, de mejorar la dotación y optimizar sus servicios de inteligencia. A la luz de los resultados militares, todo indica que la promocionada "reingeniería de las Fuerzas Armadas" parte del Plan Colombia y la parafernalia tecno-militar entregada por los gringos fracasó. Ahora, redimensionan el conflicto a niveles insospechados y planean invertir en sólo un año más de 7 billones de pesos, más o menos 3500 millones de dólares, en la llamada seguridad, que es la defensa de sus intereses de clase.
Además del impuesto sobre el patrimonio, los recortes en otros rubros del presupuesto, las limosnas de los pulpos económicos, como fuentes para financiar el escalamiento de la violencia contra el pueblo colombiano, ya el ministro de Hacienda, Roberto Junguito, aseguró que el nuevo Gobierno "está firmemente comprometido con el plan de ajuste estructural" del FMI y sabemos eso que significa, más entrega de la soberanía, más desempleo, en síntesis incremento de la crisis. Podemos preguntar a los argentinos.
Creen que avanzan al involucrar directamente población civil en el conflicto, como es el caso de los 15 mil campesinos que planean reclutar en una copia de las rondas campesinas peruanas, experiencia fascista en la que insisten, hay que recordar que fue una de las inspiradoras de las fracasadas CONVIVIR, tan impulsadas por Alvaro Uribe Vélez en el pasado, sin embargo se persiste en viabilizar y legalizar el paramilitarismo con este tipo de medidas.
Insisten en la delación como política, anuncian grandes recompensas por los dirigentes de las FARC-EP y por toda información que les permita golpear militarmente a la organización, eso se ha convertido en una obsesión, como si el problema fuera de personas y no de una organización con amplio respaldo popular, que sigue creciendo y avanzando en sus objetivos de paz con justicia social, soberanía y dignidad.
Y en sus cuentas alegres, están los desertores, los prisioneros de guerra y los muertos, si nos atenemos a las informaciones oficiales están acabando con las organizaciones insurgentes y ahora este proceso se acelerará con los 8millones que prometen a quien se entregue con su arma, sin embargo la verdad es otra y no es necesario ser un estudioso del tema para concluir que son puros cantos de sirena mediáticos en su intento de ganar la guerra a punta de cuento.
Sus cuentas alegres cuentan con su primer fracaso, crear una fuerza multinacional para la intervención, debidamente silenciado. Con la orientación gringa, insisten en involucrar a los países vecinos en el conflicto colombiano, con el pretexto de la supuesta lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, sin embargo las diferentes realidades nacionales de los vecinos les impide su participación en esta aventura y diplomáticamente todos declinaron la invitación. La ampliación del Plan Colombia y la Iniciativa regional Andina no logran arrancar.
Un pesito aquí un pesito allá, de lo que se logre recuperar de la corrupción, una reformita aquí otra por allá recortando derechos y posibilidades de vida digna, una arrodilladita por un lado y una venia antigua, hasta el suelo para que el amo gringo entienda que se hace lo que se puede, unos sapos de más en campos y ciudades, en fin nada sustancial en cuanto a la solución de las causas de la grave crisis del país. Donde están las propuestas de solución? Para ganar tiempo, dicen que el tema esta en manos de la ONU.
Piensan acaso que sin hacer los cambios necesarios para resolver las causas de la guerra, lograrán la paz?
El pueblo y sus organizaciones sabrán encontrar la respuesta, contundente y clara, para defender sus derechos y avanzar en los caminos de la construcción de la nueva Colombia. La realidad desbaratará las cuentas alegres del gobierno servil a los intereses de los gringos y las transnacionales.