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4 de junio del 2002
La dudosa privatización del agua aumenta la deuda de Tanzania
afrol News 
  La privatización de la Autoridad de Agua y Saneamiento de Dar 
  es Salaam (DAWASA) fue una de las condiciones para que Tanzania recibiese el 
  perdón de la deuda del programa HIPC. Ahora, el gobierno ha tenido que 
  prestar 145 millones de dólares para pagar la modernización de 
  DAWASA, necesaria para poder vender la empresa a un precio más bajo. 
  Hay preocupaciones ante la posibilidad de que conlleve precios más altos 
  de agua o, aún peor, de que sea otra trampa de corrupción. 
  El Banco de Desarrollo Africano (ADB) publicó ayer un comunicado en el 
  que explica que había firmado un acuerdo con el Viceministro de Finanzas 
  de Tanzania, Alhaj Adbisalaam Issa Khatibu, sobre un préstamo de aproximadamente 
  47 millones de dólares. El crédito financiará, parcialmente, 
  un "proyecto de suministro de agua y saneamiento de Dar es Salaam". Los adicionales 
  98 millones de dólares serán prestados por el Banco Mundial - 
  y, lo que es más sorprendente - por el Banco Europeo de Inversiones y 
  la Agencia Francesa de Desarrollo. 
  Según el ADB, el "proyecto" se compone de una mejora del servicio de 
  agua para la población "en términos de acceso, calidad, seguridad 
  y dentro de las posibilidades de los compradores". Además, el proyecto 
  va a "contribuir a reducir la pobreza y a mejorar el bienestar económico 
  y social del pueblo de Tanzania al proveerles un mejor acceso a un agua limpia 
  y reducir así las incidencias de las enfermedades que conlleva el agua 
  entre los grupos vulnerables". 
  El concepto suena maravilloso, pero los más críticos no están 
  de acuerdo en que la verdadera meta del proyecto del banco sea la de "reducir 
  la pobreza" en Dar es Salaam. La meta de proyecto, mantienen, es solamente hacer 
  posible el hecho de encontrar un comprador para DAWASA. La empresa - propiedad 
  del Ministerio de Agua de Tanzania - aumentará significantemente su valor 
  mediante esta nueva inversión en su infraestructura y sistemas de facturación. 
  Los más escépticos temen aún que el proyecto solamente 
  enriquecerá a la familia del Presidente, basando sus preocupaciones en 
  un reciente escándalo de privatización. 
  El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha instado a la privatización 
  durante los últimos cinco años como condición para incluir 
  a Tanzania en su Iniciativa de Países Pobres Altamente Endeudados (HIPC). 
  La inclusión en la iniciativa HIPC provee una significante reducción 
  de los servicios de deuda para Tanzania; una reducción que puede alcanzar, 
  en teoría, varios miles de millones de dólares. Sin embargo, las 
  condicionales reformas estructurales - incluso la privatización del suministro 
  de agua - conllevan muchas veces un precio muy alto. 
  La demanda del FMI no es única para Tanzania. El Fondo promueve la privatización 
  de proveedores de agua por todo el continente, frecuentemente causando protestas 
  tanto de organizaciones e iniciativas locales como de grupos internacionales 
  antiglobalización. Aunque los proveedores estatales de agua africanos, 
  en general, son ineficaces y descuidados, por lo menos han suministrado el agua 
  barata o gratuita a muchos de los pobres ciudadanos urbanos y ha quedado claro 
  que ésto era una responsabilidad del gobierno. Las protestas denuncian 
  que la adquisición de las agencias de agua por parte de compañías 
  internacionales excluirá a los pobres del acceso al agua limpia, ya que 
  aumentarán los precios. 
  El servicio de agua y saneamiento de Dar es Salaam, en efecto, no tiene la mejor 
  reputación. Según explica Festus Libu, "dueño" de DAWASA 
  y Ministro tanzaniano de Agua, "la infraestructura que se construyó en 
  los años 70 se está deteriorando rápidamente". Se estima 
  que un 50 por ciento del agua se pierde mediante escapes y conexiones ilegales 
  al sistema. Libu mantiene que DAWASA está sufriendo "de mala facturación 
  y recogida de ingresos y de fuentes de agua inadecuadas en términos de 
  calidad y cantidad". 
  El gobierno está de acuerdo con la solución del FMI de privatizar 
  DAWASA, como ya se ha hecho con más de 300 empresas estatales durante 
  los últimos años. Sin embargo, el proceso de elegir un operador 
  privado para DAWASA ha sido extraordinariamente complicado. Se ha organizado 
  un fracasado proceso de licitación y ahora se organiza un proceso de 
  una nueva licitación. En la primera ronda (en enero de 2000), solamente 
  se recibieron propuestas de dos compañías francesas; Saur Internacional 
  y Vivendi. Al final, se rechazaron las dos propuestas. 
  Antes de iniciar el proceso de una nueva licitación, hacía falta 
  crear las condiciones más favorables. Según el Ministerio, se 
  hará la privatización de DAWASA "en dos etapas". Durante la primera 
  etapa se arrendará la empresa a un operador privado 10 años. "Durante 
  esta etapa, DAWASA tendrá su infraestructura rehabilitada y mejorada 
  mientras sus operaciones y gestión serán mejoradas mediante el 
  compromiso del operador privado". 
  Préstamos al estado tanzaniano por un total de 145 millones de dólares 
  financiarán "la mejora y rehabilitación de la infraestructura" 
  durante la primera etapa. El postor ganador tan solo tendrá que contribuir 
  con 6,5 millones de dólares "para cubrir los contadores y tubos verticales", 
  es decir, las inversiones para asegurarse de que pueda facturar en el futuro. 
  No sorprende que la agencia gubernamental estadounidense de Servicios Comerciales 
  lo ha descrito como una de las más "significantes oportunidades de invertir" 
  en Tanzania en su último informe sobre el país. 
  En el proceso de una nueva licitación en marcha, sin embargo, Europa 
  es líder. Ocho compañías han hecho su propuesta y tres 
  compañías - de Francia, Alemania y el Reino Unido - fueron nombradas 
  postores precalificados. Este último "detalle" puede explicar la co-financiación 
  del Banco Europeo de Inversiones y la Agencia Francesa de Desarrollo, instituciones 
  que normalmente no están envueltas en Tanzania. Se identificará 
  al postor ganador en septiembre de este año, según la agenda de 
  la agencia de privatización de Tanzania. 
  Una vez que el postor ganador ha encabezado la etapa de diez años de 
  mejorar la "infraestructura y gestión" de DAWASA - gracias a los contribuyentes 
  tanzanianos - empezará la segunda etapa. Según R. Swere, del Ministerio 
  de Agua, "el estado de privatización de DAWASA pasará entonces 
  de un arrendamiento a una concesión". No se sabe si esto conllevaría 
  algún tipo de pago al estado tanzaniano. 
  Mientras el ADB mantiene que la principal tarea de "su proyecto" es mejorar 
  la calidad del suministro de agua y el saneamiento para asegurar que la población 
  urbana pueda permitirse el acceso al agua limpia, el Ministerio claramente ha 
  identificado metas opuestas. La estrategia actual de DAWASA es la de "reducir 
  los escapes y el uso no registrado de agua de un 50 a un 25 por ciento", según 
  la campaña de marketing del gobierno para atraer postores. 
  Mientras que una reducción del escape aumentará el suministro 
  de agua, una reducción del "uso no registrado" probablemente conllevará 
  el corte del suministro de agua a los muchos pobres que ocupan las tierras públicas 
  en la ciudad, los "grupos vulnerables", como los denomina el ADB. El énfasis 
  en una mejora de la facturación - comprensivamente un interés 
  para un operador privado - también aumenta la preocupación de 
  que DAWASA podrá empezar a cobrar por los servicios que actualmente son 
  gratuitos. Estos servicios incluyen el suministro de agua de varios tubos verticales 
  por toda la ciudad a individuos y vendedores de agua, que proveen zonas donde 
  DAWASA no llega. 
  Si los tanzanianos no tuviesen ya suficiente motivos para temer por la privatización 
  de DAWASA, la escandalizada privatización de la Compañía 
  de Suministro de Electricidad de Tanzania (Tanesco) asombró el pasado 
  mes a la nación. La pequeña empresa sudafricana de ingeniería 
  NET Group Solutions derrotó el pasado 2 de abril a varias grandes empresas 
  internacionales para firmar el lucrativo contrato de operar Tanesco. 
  Durante abril se descubrió que NET Group Solutions era una "empresa muy 
  pequeña" con una capacidad inadecuada para mantener la red nacional de 
  electricidad de Tanzania. Entonces se hizo conocido que la empresa colaboradora 
  en Tanzania es propiedad del cuñado del Presidente Benjamin Mkapa. "Lo 
  más asombroso es el hecho de que la junta ejecutiva de la empresa [tanzaniana] 
  incluye a niños de la escuela primaria", escribió en un editorial 
  el diario 'East African', basado en Nairobi. Cuando se publicó el escándalo, 
  el gobierno rechazó una demanda parlamentaria de publicar los detalles 
  del contrato de la gestión de Tanesco. Ahora, el proceso de privatización 
  continua en secreto. 
  El dudoso acuerdo de Tanesco se interpreta generalmente como resultado del deseo 
  del Presidente Mkapa de enriquecerse mientras ocupa su último mandato 
  como Presidente. Los siguientes grandes paraestatales en privatizarse serán 
  DAWASA y la Corporación Ferroviaria de Tanzania; los dos procesos conllevan 
  la condición de incluir a un inversor nacional con un porcentaje de participación 
  de, al menos, un 20 por ciento. Muchos tanzanianos, mientras tanto, esperan 
  que esto significará que tendrán que pagar el mantenimiento de 
  la familia Mkapa durante varias generaciones mediante sus facturas de electricidad, 
  agua y billetes de tren. 
  01.06.2002