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Tecnología

21 de enero de 2003

El sistema echelon de espionaje global o la ley del todo vale *

Silvio Costa **
Rebelión

Los EEUU y otros países anglosajoes utilizan el espionaje industrial y económico como arma en la competencia en el libre mercado, al mismo tiempo, bajo el argumento de lucha contra el terrorismo, intercepta comunicaciones via satelite y por internet o el triunfo del big brother mediático y delante de la invasión de su privacidad, sonría que usted está siendo filmado,o mejor, espiado

.Actualmente y principalmente después del 11 de septiembre[1] estamos sometidos la más violenta agresión a los más elementales derechos. El EE.UU., no satisfecho con el control de la economía mundial, llega a la osadía de autonombrarse como el protector del mundo, y como se fuera el país más democrático del planeta, intitulase defensor de la democracia y de la civilización occidental cristiana. Su Presidente, electo a través de un proceso electoral muy sospechoso, quiere imponerse como el único a decidir sobre el destino de la humanidad, no le importando el respeto a los más elementales principios éticos y humanitarios. Argumentando el enemigo invisible del terrorismo, la Casa Blanca pasa a agredir los propios ciudadanos norteamericanos al crear el Departamento de Seguridad Interna e instituye la censura telefónica, las prisiones sin autorización judicial, estimula las denuncias livianas y la generalización de la persecución a cualquier sospecho. Crea el millonario programa de investigación, denominado "USA-PATRIOT", que rastrea las comunicaciones por Internet. En su lucha neurótica contra el terrorismo, incluye también ONGs que desarrollan actividades de denuncia y contra el FMI.

El presidente George W. Bush, con un año y medio de gobierno, está realizando ese maravilloso emprendimiento, o sea, incompatibilizar los EE.UU. con todo el mundo, lo que ni toda la propaganda comunista, centrada en el ''imperialismo yanqui'', consiguió, a lo largo de más de 40 años de Guerra Fría. La exigencia de Washington de que las tropas norteamericanas y el resto de las fuerzas de paz no sean sometidos a la jurisdicción de la Corte Penal Internacional, entrando en atrito con los demás miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, está a agravar cada vez más las divergencias con la Unión Europea, cuyas relaciones con los EE.UU. ya fueron abaladas por la denuncia del Tratado ABM, la repulsa al Acuerdo de Kyoto y al aumento de las tarifas do acero.

El clima de solidariedad creado después de los atentados terroristas de 11 de septiembre de 2001 ya se desvaneció. La guerra contra el terrorismo, concentrada en macizos bombardeos al Afganistán, matando civiles y destruyendo el medio ambiente, no alcanzó el objetivo de liquidar a Osama Bin Laden y la Al Qaeda. (MONIZ BANDERA, 2002)

Estos hechos demuestran el intento derechista - un nuevo tipo de fundamentalismo de derechas - de someter todos a los intereses del capital internacional, principalmente de los señores del petróleo y de la industria de armas y al mismo tiempo, contribuyen para explicitar las contradicciones existentes entre las grandes potencias imperiales y de ellas con los países y pueblos dominados y explotados y con sus propios ciudadanos, que son agredidos sistemáticamente en nombre de la seguridad ciudadana y de la lucha contra el terrorismo internacional. Pregonan que todo se justifica en la defensa del ideario civilizatorio occidental y cristiano, que en realidad se resume en la defensa del capital y del libre mercado.

En un mercado internacionalizado, tanto comercial cuanto financieramente, la competencia entre empresas, países y bloques económicos asume proporciones dantescas e inimaginables para el hombre actual, y incluso para algunos científicos. Las condiciones y "normas", las legales y las "morales", para el funcionamiento del libre mercado, que aparentemente son respetadas por todos los competidores, fueron puestas en duda a través de un hecho no público (y del conocimiento de muy pocos): la utilización de un rede de espionaje, cuyo objetivo era alterar los resultados de la "libre" competencia; para espiar parlamentares, organizaciones ante o críticas a los rumbos del desarrollo capitalista en los días actuales, como por ejemplo Greenpeace y Amnistía Internacional y a personalidades, incluso el Papa Juan Pablo II.

En septiembre de 1998, la Comisión Europea compareció ante el Parlamento Europeo, que nombró una Comisión de Libertades y Derechos del Parlamento Europeo, en 23 de febrero de 2000, que en posesión de una serie de documentos, empezó a reunirse bajo el título La UE y la protección de datos, para tratar de un tema insólito: la existencia de una gigantesca red de espionaje político y económico mundial, que envolvía cinco países (Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda), que en la competencia mundial, recibían informaciones privilegiadas (y secretas) que les permiten mantener y conquistar mercados. En lo fundamental, el gran beneficiario de esta red son los Estados Unidos, que utilizan las informaciones con el objetivo de mantener el control de los flujos económicos - comercial y financieros - para seguir manteniéndose como potencia mundial hegemónica. Sin duda, el Reino Unido, que es un Estado miembro de la Unión Europea, por sus relaciones "privilegiadas" con los EE.UU., es beneficiario de esta red de espionaje en prejuicio de los demás miembros de la UE.

EL SISTEMA ECHELON DE ESPIONAJE GLOBAL

Esta red, controlada por el sistema Echelon[2], a través de 120 satélites Vortex, intercepta todo tipo de comunicaciones que utilizan instrumentos electrónicos y digitales (las comunicaciones telefónicas, los fax y el correo electrónico) en todo el mundo. La capacidad de interceptación de comunicaciones privadas y de obtener informaciones políticas, económicas, tecnológicas y comerciales es de 2.000 millones de informaciones por día. Sus objetivos no son solamente políticos, para la seguridad del Estado y contra posibles actividades terroristas y subversivas, sino también económicos en la competencia en el "libre" mercado internacional. Cuando el hecho salió a la luz pública, los principales gobernantes de algunos de los países apuntados, evitaban cualquier comentario al respecto, argumentando razones de "Seguridad de Estado".

Dado el carácter delicado del asunto, los diputados europeos no se inclinan por denunciar nominalmente al Reino Unido. Mientras, los demás Gobiernos no han querido, hasta ahora, explotar un asunto que podría poner en entredicho sus relaciones comerciales transatlánticas. Graham Watson, británico, presidente de la comisión de libertades del Parlamento Europeo, reconoce que, en cambio, la actitud que pueden adoptar los diferentes grupos políticos es imprevisible. El mismo admite que los hechos "son graves si son ciertos". Sus palabras recuerdan a las pronunciadas en 1988 por el antiguo comisario europeo para asuntos industriales Martín Bangeman, para quien "si se ese sistema (Echelon) existe, constituye un ataque intolerable contra las libertades individuales y la seguridad de los Estados. ((ZECCHINI, 2000: 3).

El fin de la Guerra Fría promovió el entendimiento de que el mundo entraría en una época de paz y que como consecuencia, no tenía sentido mantener la carrera armamentística ni los sofisticados sistemas de espionaje. Esto, inicialmente, condujo a pensar que los servicios de espionajes sufrirían recortes presupuestarios y pérdida de influencia; al contrario, estos servicios pasaron a utilizarse en la "guerra" comercial globalizada. Incluso, en el caso de los Estados Unidos, esta red se mantuvo intacta y tuvo su área de actuación: la NSA, uno de los servicios secretos menos conocidos, emplea 20.000 personas y tiene un presupuesto de diez mil millones de dólares.

El Parlamento Europeo posee información detallada sobre esta red de espionaje y de la utilización de sus informaciones para favorecer de empresas norteamericanas en la "guerra comercial". La situación se vuelve más delicada al envolver a un país miembro de la Unión Europea, el Reino Unido, que tiene un protagonismo clave en esa red de espionaje.

El Centro de Comunicaciones del Gobierno (GCHQ) británico emplea a cerca de 15.000 personas en misiones ofensivas (captación y análisis de informaciones extranjeras) y defensivas (codificación y protección de las comunicaciones británicas). Además de contar con una docena de centros en el Reino Unido, el GCHQ ha desplegado estaciones de escucha en Gibraltar, Belice, Chipre, Omán, Turquía y Australia. La llamada División Z es la específicamente encargada de relacionarse con la agencia norteamericana.

La participación del Reino Unido en la red Echelon sitúa a la mayoría de sus socios europeos en una situación particularmente incómoda. Londres se situaría en una posición "ambigua" si, como denuncian sus adversarios, la red Echelon se ha convertido en una herramienta de "espionaje económico". Para el especialista en Internet François-Emile Truchet, el Reino Unido practica la ambivalencia de ser un país europeo que espía a sus aliados.

La complicidad de Londres con Washington puede abrir un nuevo conflicto en el diálogo europeo, sobre todo si, como pretenden los expertos, las escuchas se dirigen especialmente contra Francia e Italia. Incluso se ha llegado a hablar de la existencia de una cláusula especial en el acuerdo UK-USA, según la cual el sistema de escuchas británico sustituiría automáticamente al estadounidense en el caso de que la justicia norteamericana llegara a prohibir la intercepción de comunicaciones privadas por parte de la NSA.

El sistema de escuchas francés, por ejemplo, no tiene la misma capacidad del británico, que resulta muy superior dentro de la red Echelon con el apoyo de EE UU. (EL PAÍS, 23-feb.-2000: 3).

EJEMPLOS DEL ESPIONAJE GLOBAL

Apuntaremos abajo algunas noticias que son más conocidas por él publico en general:

En 1993, José Ignacio López de Arriortúa, director de nivel superior de la General Motors de Detroit, dejó la empresa y se colocó al servicio de la Volkswagen, en Alemania, llevaba consigo documentos confidenciales y disquetes repletos de informaciones y secretos industriales. Este cambio de "empleo" provocó una verdadera batalla jurídica entre la Opel, filial alemana de General Motors, y la empresa Volkswagen, que fue acusada de robo de secretos industriales que la beneficiaban en la competencia comercial. La querella judicial se extendió por cuatro años. La policía obtuvo pruebas que incriminaban a la empresa alemana y pronto la prensa internacional anunció "el juicio del siglo". Pero sorprendentemente, en enero de 1997, se alcanzó un milagro: la Volkswagen aceptó un acuerdo en que pagaría diez mil millones de pesetas a General Motors.

Un antiguo oficial superior de la Bundeswehr, el ejército alemán, Erich Schmidt-Eenboom, hoy directivo del instituto alemán de estudios estratégicos, facilitó a la prensa alemana su propia versión de lo sucedido: la Administración Clinton habría presionado a General Motors para que llegara a un acuerdo amistoso, con el fin de no desvelar el papel de "Hortensia III", la base norteamericana de Bad Aibling, situada en Baviera. Durante la guerra fría, la NSA había instalado en Baviera dos centros de escucha ultra sofisticados, en Bad Aibling (alias "Hortensia III") y en Gablingen: antenas parabólicas de trescientos metros de diámetro y de cien metros de altura; instalaciones de doce pisos bajo tierra; baterías de ordenadores con logiciales selectivos que permiten gravar conversaciones que incluyen palabras determinadas o secuencias de frase concretas.

Dos formidables instrumentos de espionajes electrónico dirigidos hacia el este y capaces de interceptar, analizar y memorizar cualquier comunicación. Terminada la guerra fría, "Hortensia III" fue orientada hacia Servia y, en su tiempo libre, fue encargada de vigilar el conjunto de tráfico telefónico alemán, y de una parte de los países limítrofes. Según Erich Schmidt-Eenboom, fueron gracias a "Hortensia III" que la NSA descubrió que el tránsfuga de General Motors escondía los documentos sustraídos y, a través de la CIA, comunicó esta información al cuartel general de GM en Detroit. Algo difícil de explicar por Estados Unidos a sus "aliados" europeos. (FERNÁNDEZ, 1999: 13).

En 1994, los Estados Unidos y la Unión Europea tenían algunos intereses divergentes en las negociaciones de los acuerdos comerciales del GATT; los representantes norteamericanos, reunión, tras reunión, manifestaban a través de sus actitudes, conocer las opiniones de los representantes europeos y presentaban argumentos bien fundamentados para contrarrestar las posiciones de los europeos. El motivo de esta "premonición" de los norteamericanos es muy simple: la CIA, a través de la red informática, había penetrado en los ordenadores de la Comisión Europea y obtenido las informaciones que iban a parar a manos de los representantes norteamericanos. Otros hechos semejantes denunciados son: en 1990 los Estados Unidos tuvieron acceso a negociaciones secretas y lograron "persuadir" a Indonesia de que incluyera una gran empresa norteamericana de telecomunicaciones en un negocio que se destinaba a una empresa japonesa; la empresa norteamericana Raytheon ganó una concurrencia de la francesa Thomson-CSF, para la instalación de un sistema de radar de vigilancia de la Amazonia (Brasil); la Airbus Industries perdió un contrato para la Boeing y McDonnell Douglas, también gracias a la obtención de informaciones privilegiadas obtenidas a través del espionaje.

LAS ACTITUDES DE LA UE Y DEL PARLAMENTO EUROPEO

Las evidencias incuestionables de esas actividades de espionaje llevó a la Eurocámara a crear, en junio de 2000, una comisión parlamentaria con el objetivo de investigar y verificar la existencia y las acciones del sistema de interceptación de las telecomunicaciones denominado "Echelon". La gravedad de la existencia del Sistema asume significativas proporciones, no solamente por permitir a los países participantes sacar grandes beneficios en detrimento de los miembros de la Unión Europea, pero fundamentalmente por la participación del Reino Unido, que como miembro de la UE, es responsable por la profundización de las divergencias en su seño y para acentuar el clima de desconfianza en sus miembros.

El 18 de mayo de 2001, fue dado al conocimiento publico el informe provisional, elaborado por la Comisión Provisional, nombrada por el Parlamento Europeo, para investigar esa rede de espionaje, en que confirma

La existencia de un sistema global de interceptación de las comunicaciones en el que cooperan los Estados Unidos, el Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, ya no puede ponerse en duda.(...) Lo que resulta importante es que su propósito es interceptar comunicaciones privadas y comerciales, y no comunicaciones militares." (NAVARRO, 2001: 50)

Delante de la evidencia de estos hechos, la actuación de la Unión Europea y de los países más perjudicados fue de cautela - para no decir sumisión - y no adoptaron, por lo menos públicamente, ninguna actitud o decisión más incisiva al respecto, a no ser recomendar el desarrollo de protección para las comunicaciones oficiales y particulares, pero la cuestión continua en abierto y es un motivo, por más formal que sea o por menor que sea, de atritos entre países de la Unión Europea y de esta con los EE.UU. y el Reino Unido, pero en actitud conciliatoria, dice que:

Considerando que por lo que respecta a la compatibilidad de un sistema de las características del sistema ECHELON con el Derecho de la UE hay que hacer dos precisiones: si el sistema se utilizase exclusivamente para fines de información, no habría ningún tipo de contradicción con el Derecho de la UE, ya que el Tratado CE no aborda las cuestiones relacionadas con las actividades en el ámbito de la seguridad nacional, sino que éstas recaen en el ámbito de aplicación del Título V del Tratado UE (PESC), que en la actualidad no incluye ningún tipo de disposiciones en la materia, por lo que no cabría hablar de infracción; por el contrario, si el sistema se utilizase de manera abusiva para espiar a la competencia, sería incompatible con el principio de cooperación leal que deben respetar los Estados miembros y con el concepto de un mercado común en el que la competencia es libre, por lo que la participación de un Estado miembro en un sistema de estas características sería incompatible con el Derecho comunitario.(ACTA DEL 05/09/2001 - Edición Provisional)

Incluso, cuando de la reciente visita del Presidente norteamericano George Bush a España, en junio de 2001, el gobierno español con el intento de sacar ventajas de esa situación y del potencial de espionaje norteamericano y como una demostración de las buenas relaciones entre los dos gobiernos, presentó la reivindicación de establecimiento de una cooperación industrial y tecnológica y acceso por parte de España, a las "tecnologías sensibles en el campo del espionaje y vender aviones a la Guardia Costera de EE.UU." (El País, 11-06-01).

El Pleno del Parlamento Europeo, considerando, que según las informaciones disponibles y las numerosas declaraciones concordantes procedentes de diversas personas y organizaciones, incluso de fuentes norteamericanas, concluye que no hay dudas de que el objetivo y la finalidad del Sistema es la interceptación, como mínimo, de comunicaciones privadas y comerciales, y que delante de los resultados de las investigaciones realizadas, de la evidencia de la utilización de instrumentos y informaciones, de origen dudosa, en la competencia mundial, aprobó, en septiembre de 2001, el informe definitivo que comprueba la existencia de esa red de espionaje de las comunicaciones a servicio principalmente de los EE.UU. y atestigua que no hay ninguna razón para seguir dudando de su existencia.

Hablando en nombre del Consejo, la ministra belga de Asuntos Europeos Annemie Neyts, instó al Parlamento Europeo a

"Hacer todo lo posible para que el respeto a la vida privada sea garantizada en el ámbito europeo y mundial". En relación con el Respeto a la vida privada, el informe de la Comisión Echelon del Parlamento Europeo subraya que interceptar las comunicaciones supone una injerencia en la vida privada de las personas, y sólo debe estar permitido cuando se trata de garantizar la seguridad nacional. En relación con el espionaje económico, el documento recuerda que muchas veces se utiliza para conocer la evolución de las distintas empresas en el extranjero. Pero es "intolerable", sostiene, espiar a las empresas extranjeras "para conseguir ventajas competitivas". El informe concluía recomendando a las empresas europeas que protejan "todo el entorno de trabajo así como todos los medios de comunicación por los que se transfieren informaciones sensibles". Asimismo, insta a los ciudadanos particulares a que "codifiquen urgentemente el correo electrónico, ya que un mensaje sin codificar es como una carta sin sobre". (MORALES, 2002)

En relación un posicionamiento definitivo del Parlamento Europeo, esto fue adiado y transferido como un primer paso para los países miembros de la UE, que deben se pronunciar contra de esta red de espionaje global que violenta a los derechos de la ciudadanía y de las empresas que actúan en el libre mercado europeo y en el mercado mundial. Pero, las actitudes de los países comunitarios, excepto Bélgica, son diferenciadas y no indican una disposición de critica y confronto con el imperio norteamericano y sus secuaces. Algunos, se calan; otros intentan sacar ventajas particulares.

Hasta el año de 2002, solamente el Parlamento Belga debatió y adoptó una posición enérgica con relación al tema y pidieron al primer ministro que exija al Reino Unido que abandone este sistema de espionaje. El objetivo del informe presentado por las Comisiones de Inteligencia del Senado y del Congreso que cuestione políticamente ante la Unión Europea y a la OTAN el espionaje a los países europeos por aquellos que se suponen que son sus aliados, pues los senadores y diputados cuestionan la actitud del Reino Unido, que al participar y se beneficiar del Sistema Echelon, particularmente en temas de la competencia económica, está contra las reglas y los derechos colectivos existentes en la seño de la Unión Europea.

Herman De Croo, presidente del Senado belga, afirmó durante el debate del informe que Bruselas es "la ciudad más escuchada en el mundo", ya que es la sede de las instituciones de la Unión Europea, la OTAN, de 59 organizaciones internacionales y de 1300 asociaciones multilaterales. Así pues, la ciudad belga sería uno de los terrenos más interesantes para cosechar informaciones políticas, militares y diplomáticas. El informe de los senadores belgas es contundente con Gran Bretaña. Afirma escandalizado que este país, como miembro de la Unión Europea, está llevando a cabo una operativa de espionaje contraria a la lealtad indispensable estipulada en varios tratados, así como a los derechos garantizados de los ciudadanos europeos y a la libertad de intercambios comerciales, también garantizados en el seno de la UE. (MORALES, 2002).

Así preguntamos: los países comunitarios, ¿no están siendo agredidos en sus derechos económicos? Las clases dominantes en la Unión Europea, ¿no están dispuestas a defender sus intereses? Los ciudadanos comunitarios, ¿aceptan pasivamente la violación de sus derechos más elementales? ¿Hasta cuando la Europa y en particular la UE se mantendrá sumisa a los EE.UU.? ¿Y Usted que hace la lectura de este artículo? ¿Qué hacer? O conforme los carteles existentes en las tiendas, estaciones de metro, aeropuertos, etc., ¿Debe contentarse, pues sonría que Usted está siendo filmado?

Las cuestiones relacionadas al Sistema Echelon de espionaje no es un asunto pertinente solamente a la Unión Europea, a su burguesía y a sus ciudadanos, o a los países espionados, pues es incuestionable que cada uno de nosotros que, enguanto ciudadanos que vive en cualquier país del planeta tierra, vivimos sometidos y asistimos a la más amplia agresión a los derechos más elementales de privacidad y de libre comunicación, que se añaden a las ya seglares agresiones a los derechos económicos, sociales, políticos de los pueblos. A cada día, por mayor que sea la adversidad y por más fuerte sea el imperio norteamericano, la única y última alternativa que resta a aquellos que osan soñar con un mundo mejor es el de la lucha por la superación de la actual sociedad, basada en la explotación y en la opresión de la mayoría de la población, y la lucha por la construcción de una nueva sociedad solidaria y fraterna.

BIBLIOGRAFÍA

ACTA DE 05/09/2001, Edición provisional, ECHELON: Resolución del Parlamento Europeo sobre la existencia de un sistema mundial de interceptación de comunicaciones privadas y comerciales - Sistema de Interceptación Echelon. Serpaj Europa, Información - 01 de febrero de 2002.

FERNÁNDEZ, José Manuel (1999): "Espionaje para la guerra económica". En El Viejo Topo, enero de 1999, número 125. Barcelona. p. 13-20.

LENINE, V. I. (1979): "Imperialismo, fase superior do capitalismo". En Obras escolhidas, vol. 1. São Paulo, Editora Alfa-Omega. pp. 575-671.

MONIZ BANDERA, L. A. (2002): "Os Estados Unidos e a política exterior de Rambo". En Espaço Acadêmico, Revista electrónica mensual, Año II, número 14, julio de 2002.

MORALES, Aldo (2002): "Para el Parlamento Europeo ´no existen dudas´ de la existencia de ´Echelon¨. En Libertad Digital, de 8 de marzo de 2002. España.
"El parlamento belga estudia tomar medidas políticas contra el sistema "Echelon" de espionaje global". En Libertad Digital, de 8 de marzo de 2002. España.

ZECCHINI, Laurent (2000): "El Parlamento Europeo investiga una red de espionaje Mundial en Washington y Londres". En El País, 23 de febrero de 2000. Madrid. p. 3.

PERIODICOS:
El País. Madrid, España.

El Mundo. Madrid, España.

REVISTAS:
Tiempo. Madrid, España.

EPs, El País. Madrid, España.

La Clave. Madrid, España.

(*) . Autorizada la reproducción (impresión y publicación) integral o de cualquier ensayo. En caso de publicación, se solicita la gentileza de comunicárselo al autor y de enviarle copia. Contactos por E-mail: silviocostabrasil@hotmail.com

(**). Profesor de Sociología y Ciencias Políticas en la Universidad Católica de Goiás (Brasil). Doctorando en la Universidad Complutense de Madrid. Es autor de Tendências e Centrais Sindicais: o movimento sindical brasileiro de 1978 a 1994 (1995); Comuna de París: o proletariado toma o céu de assalto (1998), y Revolução e Contra-Revolução na França (1999), publicados en Brasil, por las Editoriales de la Universidad Católica de Goiás (Goiânia) y Anita Garibaldi (São Paulo). Es organizador de: Estado e poder político: do realismo político à radicalidade da soberania popular (1998. Editorial de la Universidad Católica de Goiás) y Concepções e formação do Estado brasileiro (1999. Editorial Anita Garibaldi).

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[1] Esto no quiere decir que en los años y décadas anteriores no hubiese las agresiones a los más elementales derechos de la ciudadanía, pero es necesario destacar que en los días actuales, estamos sometidos a cada día a un mayor y más violento control de nuestras acciones, por más privada o simple que sea, y todo esto, en beneficio de los intereses de los actuales imperios, notadamente del norteamericano y de sus burguesías.

[2] "La red ha sido organizada a partir de un acuerdo ultra secreto, llamado Usuka, que agrupa a cinco países: Estados Unidos, Reino Unido, Nueva Zelanda, Canadá y Australia. Firmado en 1948, un año después de la fundación de la CIA, el acuerdo Usuka (síntesis del nombre de sus dos principales fundadores: el Reino Unido y los Estados Unidos) coordina los servicios de espionaje encargados de las telecomunicaciones de Canadá (el CSE), Reino Unido (GQHQ), Australia (DSD), Nueva Zelanda (CSSB) y Estados Unidos (NSA). El acuerdo es tan secreto desde su formación que la mayoría de los primeros ministros y ministros de Defensa de los países firmantes nunca han podido tener acceso al texto del tratado. Destinada inicialmente a la vigilancia de los países comunistas, la red Echelon ha sido reorientada para ampliar su espectro y dar cobertura al globo terrestre. Para conseguirlo dispone de un gran número de estaciones de escucha, como las de Sugar Grove, Yakima, Waihopai, Gerarldton, Menwith Hill y Morwenstow, así como de una constelación de satélites espías. Todas las informaciones interceptadas son enviadas por satélite hacia la sede de la NSA, donde una batería de ordenadores - probablemente los más potentes del mundo - las clasifican y las descifran antes de ser analizadas por los expertos. Nadie en el mundo puede considerarse libre de vigilancia, aunque utilice sofisticados códigos de protección." (FERNÁNDEZ, 1999: 14). Incluso, hay informes que apuntan para el envolvimiento de las empresas de informática IBM y Microsoft en este sistema de espionaje. Esa participación ocurriría a través de la inclusión en los programas-espías de un sistema de códigos informáticos que facilitarían el trabajo del sistema de espionaje.