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Tecnología

14 de octubre de 2003

Los ataques contra el software libre – más cuentos neoliberales

Toni Solo
Traducido para
Rebelión por Germán Leyens
"En un mundo sin barreras, ¿quién necesita puertas?" ("Gates=puertas en inglés", NdT.) La pregunta sobre la camiseta apunta a la creciente lucha entre Microsoft, dirigida por Bill Gates, y sus rivales en rápido crecimiento que ofrecen software libre. Las discusiones sobre patentes, copyright y marcas de software denotan otro decisivo fracaso de los hipócritas defensores del "libre comercio". Tal vez sólo en la política agrícola se hacen aún más obvios los argumentos neoliberales como una desvergonzada propaganda del capitalismo monopolista.
El término de software libre –lo contrario del software patentado – se aplica a las aplicaciones informáticas que están libremente disponibles bajo un acuerdo de licencia pública de manera que cualquiera puede adaptarlos y mejorarlos. Las quejas más comunes sobre los programas de software patentados de Microsoft son sus costes relativamente elevados y que, cuando fallan, sólo Microsoft puede repararlos. Cada vez más, grandes organizaciones de toda clase optan por soluciones libres para sus necesidades informáticas porque los productos libres son generalmente más baratos, más fiables y más fáciles de reparar cuando fallan. El mercado de las computadoras personales no se está quedando muy atrás.
Algunos de los mayores compradores son los organismos gubernamentales nacionales o locales. En mayo de este año, la autoridad municipal de Munich decidió convertir sus 14.000 computadoras a un sistema operativo de libre acceso (el mejor conocido, llamado Linux). Microsoft hizo todo lo posible por hacer que se decidiera a su favor, pero fracasó. En Brasil, el gobierno tiene la intención de utilizar software libre en hasta un 80% de sus computadoras. En España y Australia, las autoridades municipales han decidido que sus políticas de compras deben priorizar a los programas de libre acceso. En septiembre de este año, los gobiernos de Japón, China y Corea del Sur acordaron iniciar un proyecto común de software libre para una amplia gama de aplicaciones.
El interminable lamento del "libre" mercado No puede sorprender que, con miles de millones de dólares de negocios en juego, la resistencia a las iniciativas regionales, nacionales y locales a favor del software libre sea feroz. En típico estilo neoliberal, Microsoft y sus defensores comerciales argumentan a favor de mercados desregulados. Los propagandistas neoliberales producen declaraciones como: "Las decisiones sobre la compra de software deben ser dejadas en manos del mercado, permitiendo que todos los productores – libres y patentados – compitan por los clientes. Los productos deben ser evaluados sobre la base del valor que significan para los utilizadores". (1)
Lo que los neoliberales no pueden aceptar es que ciudades como Munich y países como China y Brasil estén preparando legislación después de los hechos. Consideraron sus opciones y se decidieron claramente contra Microsoft. Las cuentas son simples. Como jefe del Instituto de Tecnología de la Información de Brasil, Sergio Amadeu explica: "Si lo hacemos bien, más de 17 millones de personas tendrán acceso a computadoras. Si cada uno de ellos tuviera que pagar 100 reales por su software de escritorio, significaría que enviaríamos 1.700 millones de reales (600 millones de dólares) para pagar por las licencias. Sin software libre es imposible tener una política significativa de inclusión digital. (2)
Sin embargo, la regulación es también necesaria para impedir que grandes empresas como Microsoft deformen el mercado subvencionando productos a corto plazo para barrer con todo a largo plazo después que hayan excluido a sus competidores libres menos acaudalados. En la práctica, los partidarios del software libre miran la legislación con ambivalencia. Por ejemplo, Richard Stallman, fundador y presidente de la Free Software Foundation señala: "Esas leyes no constituyen el tipo de ayuda que la mayoría pide a los gobiernos… Lo que pedimos es que no interfieran con nosotros con cosas como la Digital Millennium Copyright Act, con patentes de software, con prohibiciones de ingeniería inversa que posibilitan que compañías como Microsoft hagan formatos patentados de datos y prohíban nuestro trabajo. Estos son los principales obstáculos para satisfacer las necesidades de software de la humanidad". (3)
No sólo los organismos gubernamentales que tratan de obtener el mejor acuerdo están escogiendo el software libre. A principios de este año, Reuters Market Data System (RMDS) cambió a Linux bajo la presión de clientes. Un gerente de sistemas de Reuters declaró: "La demanda a RMDS a favor de Linux ha sido sorprendente… Consideraron mejoras en el rendimiento y ahorros en los costes. Se trata de banqueros, saben que casi nunca se consigue más por menos – pero esta vez fue así". (4) Monstruos de Wall Street como Merrill Lynch, Morgan Stanley, Credit Suisse First Boston y Goldman Sachs Group han preferido software libre.
¿Gran negocio libre? ¿Así que cuál es el gran atractivo del software libre? Uno es su bajo costo. Pero tal vez no sea lo más importante. La fiabilidad es otro. El programa de libre acceso Apache, para servidores de la red en Internet, está a la cabeza del mercado precisamente porque combina un bajo precio con la alta fiabilidad.
La seguridad es también una preocupación importante. Los persistentes problemas con virus informáticos que afectan a Windows son, para mucha gente, sólo un prolegómeno de problemas futuros. Como lo describiera recientemente un analista de tecnología de la información: "Todos en la industria saben que la dependencia crónica del mundo de los productos de Microsoft va a causar un día una catástrofe, pero muchos que saben de seguridad son probablemente reacios a expresarse al respecto". (5)
La seguridad está estrechamente vinculada con la independencia. Phil Hughes, editor de Linux Journal, dice: "Las compañías comerciales de software patentado han tratado de debilitar la aceptación de Linux poniendo en duda la legalidad y factibilidad de la Licencia Pública General. Pero una vez que hubo una discusión abierta de los términos y condiciones ha habido poco cuestionamiento de la licencia. Además, la ventaja del código fuente abierto, de saber que no se depende del proveedor de software para el apoyo técnico ha tendido a allanar toda duda sobre la validez del procedimiento de licencia". (6) Respaldando ese análisis, grandes compañías de computación como Hewlett Packard, Sun Microsystems e IBM han pasado a utilizar software libre. También desean bajos costes combinados con fiabilidad, seguridad e independencia.
Sin embargo, el optimismo de Phil Hughes sobre los aspectos legales podría ser prematuro. Microsoft y sus apoyos comerciales están más que preparados para defender su parte en el mercado. Ya en noviembre de 1998, se hizo evidente la ansiedad sentida por Microsoft ante el éxito en el mercado del software libre, cuando documentos internos, los así llamados documentos Halloween, llegaron a conocimiento del público. Ahora Microsoft y otros aliados comerciales están apoyando a organizaciones lobbyistas como Initiative for Software Choice (ISC), un proyecto de la Computing Technology Industry Association. Microsoft dice: "Microsoft es un miembro fundador y mantiene un sólido compromiso con ISC. Este compromiso se basa en el apoyo de Microsoft a la convicción de ISC de que es importante que se permita el desarrollo múltiple de software, que los modelos de negocios y de licencias compitan sobre la base de sus méritos y sin regulaciones gubernamentales que tratarían de preferir a un modelo por sobre otro". (7)
¿Suena conocido? Así es. Es el mismo argumento que EE.UU. y la UE utilizan en la agricultura por cuenta de sus multinacionales contra los países en desarrollo. En ese conflicto de "libre comercio" en particular, un coloso masivamente subvencionado, genéticamente modificado, enarbolando su maquinaria y la guerra química, entra a la arena contra un pequeño jornalero agrícola desnutrido, armado, si tiene suerte, de un azadón.
La propiedad intelectual y el bien público En el caso del software, con dos lados algo más equilibrados, las quejas poco convincentes por comercio injusto del gigantesco infractor condenado por violación de la legislación antitrust, Microsoft y sus aliados, son complementados con esfuerzos por crear temor e inseguridad en el mercado. Pero, después de perder el histórico juicio antitrust en abril de 2000, Microsoft tiene más cuidado en cuanto a su conducta hacia sus competidores. Como señala el defensor del libre acceso Bruce Pernees: "Considero que Microsoft tratará de encontrar a otros testaferros para que se ocupen del trabajo sucio por su cuenta". (8)
En marzo de este año una compañía de software patentado llamada SCO presentó una querella por mil millones de dólares contra IBM basada en la violación de confidencialidad por publicar presuntos secretos comerciales; SCO e IBM habían colaborado en el desarrollo de software en el pasado. Pero cuando IBM trasfirió un considerable segmento de su desarrollo de programas para aprovechar las ventajas del software libre, gran parte de su trabajo con SCO resultó obsoleto. Aunque es esencialmente una disputa financiera entre dos gigantescas compañías, el juicio tiene poco que ver con el negocio del software libre, pero ha causado inseguridad entre los potenciales clientes.
El aspecto subyacente es el de los derechos de propiedad intelectual – patentes y copyright – y cómo afectan el comercio y el desarrollo económico. Vuelvo a citar a Phil Hughes: "Es muy fácil saltar de la base abierta, libre, cooperativa, no-jerárquica del éxito comercial de Linux a temas sobre la necesidad de o incluso de la viabilidad fundamental de los derechos de propiedad intelectual tal como son practicados y entendidos actualmente. Esto afecta el bien público en general en una inmensa variedad de modos. Por ejemplo, las implicaciones para la salud pública de las patentes de las medicinas genéricas, o del software electoral de código fuente cerrado susceptible de manipulación o de otra corrupción, o la seguridad de alimentos en países en desarrollo empobrecidos – tal vez la posibilidad misma del desarrollo tecnológico sostenible en el mundo en desarrollo. Los temas básicos parecen ser el acceso a la información y la capacidad de innovar".
Cuando Estados Unidos y el resto de Europa estaban esforzándose por alcanzar y sobrepasar a Gran Bretaña como poderes industriales en el siglo XIX, dependían de la copia de tecnología. En aquellos días era imposible imponer patentes y copyright. Ahora las principales potencias económicas, a través de su inherente poderío financiero y de la Organización Mundial de Comercio, su sheriff global juez y jurado todo-en-uno, pueden intimidar a los países en desarrollo más débiles para mantenerlas en su sitio neocolonial.
Para los partidarios del "libre comercio", ésa es la cuestión. Todo lo que ha sido patentado o posee copyright nunca puede ser comercializado libremente. Los propagandistas neoliberales guardan silencio cuando su toque de trompeta por la desregulación se vuelve contra los derechos multinacionales de patentes. Richard Stallman dice: "Existe una similitud parcial entre el software libre y la globalización, pero también una importante diferencia. Los partidarios del comercio "libre", y del neoliberalismo en general, argumentan que crean riqueza. Es verdad – pero también concentran la riqueza. El resultado es que sólo se benefician los ricos. Los pobres ganan poco, incluso pueden salir perdiendo, como sucedió en EE.UU. El software libre es diferente, porque actúa en contra de la concentración de la riqueza. (El copyright es un importante factor en la concentración.) De manera que cuando el software libre crea más riqueza, los beneficios son generales". (9)
El factor humano – libertad y creatividad Parece que los entusiastas del software libre están realmente argumentando a favor de un retorno a la práctica de los años 50 y 60 cuando el software era compartido libremente, impulsando el rápido desarrollo de las aplicaciones informáticas. Dicen que es esencial poder utilizar libremente programas, estudiar como funcionan, adaptarlos, hacer copias para ayudar a otros y poner las mejoras a disposición del público, parea que todos se beneficien. El acceso al programa de código fuente, el núcleo de toda aplicación informática, es una condición previa para estas libertades – un aspecto que es anatema para las compañías de software patentado como Microsoft, cuyo futuro se basa en que la gente siga dependiendo del pago por su software.
Otro factor desconcertante para los neoliberales es que no comprenden por qué alguien iba a contribuir su trabajo en forma gratuita. Ese desconcierto es comprensible. La solidaridad creativa llevó a decenas de miles de programadores de software en todo el mundo a cooperar para crear el sistema operativo Linux porque su logro y los beneficios que produjo para tantos valieron la pena de por sí. El fenómeno es incomprensible para cualquiera que esté a la busca de dólares como resultado. El software libre tiene poco que ver con un almuerzo libre o un paseo gratuito, pero mucho con libertad y creatividad, libertad de pensamiento, palabra y expresión. Los ideólogos neoliberales que dominan actualmente la política económica no llegarán jamás a comprenderlo.
La Cumbre Mundial de Naciones Unidas sobre la Sociedad de la Información (WSIS, por su sigla en inglés) en diciembre de este año es probablemente el evento de más envergadura realizado hasta ahora en la consideración de estos temas. Es la primera de dos cumbres mundiales sobre comunicaciones y tecnología de la información planificados para ser realizados en Ginebra. Probablemente será otro foro para la disputa entre EE.UU. y la UE. (10). A pesar de que grandes departamentos del gobierno de EE.UU., como el Departamento de Defensa, han optado por el software libre, la posición del gobierno de EE.UU. es oficialmente neutral. Un portavoz del Departamento de Comercio declaró: "Nuestro punto de vista sobre el software libre es que los gobiernos de EE.UU. y de otros países tienen que mantener neutralidad respecto a la tecnología en su adquisición y en las inversiones en investigación y desarrollo". (11) Mientras tanto, en Europa, el 24 de septiembre, el Parlamento Europeo aprobó enmiendas a una directiva de la Comisión Europea sobre los derechos de propiedad intelectual en la tecnología de la información, que insisten efectivamente en que en Europa el software no debería estar sometido a patentes. Este voto podría afectar a más de 20.000 patentes de software aceptadas por la oficina europea de patentes. Queda por ver si la voluntad democrática de la gente en Europa, expresada a través de su parlamento, sobrevivirá a la presión de los lobbys de la industria sobre los ministros de los gobiernos en el Consejo de Europa.
Pobreza patentada – receta para el subdesarrollo Hace un año la Comisión sobre Derechos de Propiedad Intelectual, organismo independiente financiado por el Reino Unido, informó sobre el impacto de los derechos de propiedad intelectual sobre los países en desarrollo. Dirigido por el profesor John Barton de la Universidad Stanford, el informe confirmó que los países pobres sufren fuertemente como resultado de las patentes y los copyright que afectan a la salud, la agricultura, la educación y la tecnología de la información. En conformidad con el estilo de esas comisiones, el profesor Barton minimizó considerablemente el caso: "la tentación de imponer una protección muy estricta por la facilidad con la cual se puede copiar el software y otros medios digitales puede disminuir los verdaderos beneficios que podrían recibir los países en desarrollo, particularmente en el acceso a bajo costo a documentos educativos y científicos". (12)
Este tipo de declaración por parte de académicos de confortables carreras (a los que jamás se pediría que dirigieran semejantes comisiones si existiera la probabilidad de que sus conclusiones fueran polémicas) oculta la realidad. Los burócratas neoliberales que conducen la política internacional de desarrollo tienen una visión destructiva y empobrecida derivada de siglos de colonialismo y patriarcado. La creatividad humana y la diversidad natural tienen poco espacio en su pequeño mundo, obsesionado por los beneficios. Para ellos da lo mismo si promueven patentes para arroz basmati o para algún oscuro parche de software.
Las voces de los sectores oprimidos del mundo en desarrollo usan un lenguaje más directo que el profesor Barton. Como dice la escritora india Vandana Shiva: "El basmati, el nim, la pimienta, melón amargo, la cúrcuma… todos los aspectos de la innovación incorporada en nuestra alimentación indígena y en nuestros sistemas medicinales están siendo pirateados y patentados actualmente. El conocimiento de los pobres está siendo convertido en la propiedad de corporaciones globales, creando una situación en la que los pobres tendrán que pagar por las semillas y las medicinas que ellos han desarrollado y han utilizado para satisfacer sus necesidades de nutrición y cuidado sanitario". (13) La imposición generalizada de los derechos de propiedad intelectual conduce a la miseria y a la muerte prematura de muchos millones de personas en todo el mundo.
El escritor conservador estadounidense Robert Frost escribió: "Buenas cercas hacen buenos vecinos". En el caso del software, como en todo lo demás, las multinacionales globales han pisoteado a su gusto a todos los vecinos a su alrededor, desde Brasil a Corea. Ahora, esos países luchan por corregir la situación en la medida de lo posible. Un paso que pueden realizar es adoptar software libre como Linux. Pero el poderoso lobby del software patentado está determinado a detenerlos. Podemos ser mejores vecinos defendiendo el software libre y adoptando Linux nosotros mismos. Recuerden esa camiseta.



(Toni Solo es un activista radicado en América Central. Su correo es:
tonisolo52@yahoo.com)
1'New Protectionism: Mandates for Open Source Software', Citizens for a Sound Economy 27 de agosto de 2003
2"El otro pingüino - Avance del software libre en la administración argentina" Andrea Ferrari, Página 12, 29 de septiembre de 2003, www.rebelion.org
3'Governments push open-source software', August 29, 2001, by Paul Festa, CNET News.com
4"Banks Want to Swim With Penguin", Wired News, 3 de febrero de 2003
5John Naughton, Observer (periódico dominical inglés). Domingo 5 de octubre..
6Entrevista para este artículo.
7"The politics of open-source software", by Declan McCullagh, 14 de julio de 2003, CNET News.com
8'Open source confronts IP issues - Building on grass-roots heritage, open source facing commercial IP practices' by Robert McMillan, Ed Scannell. InfoWorld 15 de agosto de 2003
9Quoted in (In "Is Free Software Inevitable?" Linas Vepstas , febrero-julio de 2001
10El grupo activista Geneva-03 pide a todos los interesados que se involucren con su iniciativa respecto al evento WSIS. www.geneva03.org
11'Open source' software trend faces barriers', by William New, National Journal's Technology Daily, 25 de agosto de 2003, www.govexec.com
12'Intellectual property rights "harm poor" ', by Alex Kirby, 12 de septiembre de 2002, BBC Online
13'GLOBALIZATION AND POVERTY - Economic globalization has become a war against nature and the poor.' por Vandana Shiva, de la revista Resurgence edición 202