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Reportajes

8 de marzo del 2003

Conversando con Luca Casarini
Ciclos de movimiento en Italia


Nuevo Proyecto Histórico
Luca Casarini, portavoz del Movimiento de las y los desobedientes de Italia: finalmente conseguimos liarle para que viniera a Madrid y cerrara el 16 de diciembre las jornadas "La izquierda social ante la globalización neoliberal"en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense. Venía de pasarse cuatro días de comisaría y cárcel en Copenague. Junto a otr@s compañer@s de Italia y Europa, le detuvieron poco después de pisar la capital danesa. Trataban de evitar "incidentes", pero a pesar de las detenciones, el movimiento de movimientos volvió a recorrer las calles, coincidiendo con la cumbre europea. Le recogimos en Barajas el 16, le acompañaba Momo, otro compañero de Padua, ambos traían cara de cansancio.

Sin mediar café, les llevamos a la facultad. El acto estuvo bien. A la mañana siguiente, ya con café y tabaco, más en forma de plática que de entrevista, pude preguntarle por diferentes cuestiones relativas al recorrido histórico del movimiento (o una parte del mismo) conocido hoy como Disobbedienti. Lo que aquí se presenta son extractos de las reflexiones de Luca durante la conversación. He querido organizarlo por temas en forma cronológica, desde los años 70 hasta nuestros días, pues pienso que, tal vez, sea esta la mejor forma de comprender la naturaleza y las dinámicas de un movimiento, el de l@s disobbedienti, que esta asombrando a la izquierda europea.

Pablo Iglesias, pablo@sindominio.net




A.D.N. DEL MOVIMIENTO, AÑOS 70

Yo puedo contarlo desde aquello que he leído, desde aquello que se, desde aquello que he vivido, y sobre todo desde aquello que me han transmitido mis hermanos y hermanas que han participado de los años 70, y que, todavía hoy, están dentro del movimiento de movimientos, en el movimiento de los y las desobedientes, dentro de todo el recorrido. Esto es una gran particularidad del nordeste de Italia, porque en otros lugares aquellos que han participado en los años 70, no son protagonistas ahora de los nuevos movimientos. Este aspecto de la comunidad ha sido siempre, también durante el recorrido de la Autonomía, algo muy fuerte que ha permitido una continuidad generacional, que ha implicado la posibilidad de acumular fuerzas, experiencias y de poderlas utilizar en los nuevos movimientos. Cuando hablamos de los años 70 hablamos de memoria como identidad, no hablamos de memoria como memoria histórica, esto nos ha ayudado mucho a no ser prisioneros de los años 70, y a no ser prisioneros de nuestra historia pasada, para utilizarla como recurso, como fuerza, bien para ver los limites del pasado o bien las cosas positivas para reutilizarlas o relanzarlas en un futuro.

Autonomía

Erróneamente se piensa que la Autonomía ha sido solo una experiencia de gran organización, pero es un espíritu. Nace y se desarrolla en Italia como espíritu herético respecto a la izquierda ortodoxa clásica, nace como superación de la idea de los grupos que asumían la forma partido como forma estable, también en la dimensión extraparlamentria, revolucionaria, etc. Nace también como interpretación del enfrentamiento armado de aquellos años, como interpretación social de este enfrentamiento, de un conflicto social muy duro que ha tenido en Italia su máxima expresión con respecto al 68 europeo que en Italia se extiende del 68 hasta el 77. En fin, un gran movimiento, que tiene una continuidad histórica increíble, de mas de 10 años de historia vivida por una generación de compañeros y compañeras. La Autonomía representa esto para nosotros que hemos llegado después. Para mi resulta importantísima la interpretación que nuestra comunidad ha hecho de la Autonomía, que ha conjugado una gran pasión política, con la gran determinación, valor y voluntad de arriesgarse, que la ha unido con el rechazo a un esquematismo dogmático, que hizo prisioneras a generaciones de compañeros y compañeras en el siglo pasado. La Autonomía es en encuentro entre la dimensión del comunismo como capacidad de crear un movimiento que cambia el estado de cosas presentes, el comunismo herético, con el aspecto libertario, en su dimensión mas ligada a la tradición anarquista europea.

Autonomía y crítica armada

Creo que la Autonomía ha sido la experiencia de movimiento de mayor intensidad y continuidad temporal, que se haya visto jamas en Europa. No cayó en la corrupción del oportunismo, porque en el momento en el cual se desarrollaba en Italia la critica armada, la Autonomía no interpretó esto como una deriva simplemente "pro lucha armada" de grupos como las Brigadas Rojas, sino que respondió interviniendo directamente con el concepto de "ilegalidad de masas" y de iniciativa armada, siempre difusa dentro de una dinámica social. Obviamente esto no nos sirve ahora para construir un modelo, pero si para entender como se afrontan en los diferentes momentos las dimensiones del enfrentamiento y del conflicto que tienen como tema la liberación. En esto la Autonomía ha pagado duramente porque no ha sido oportunista, porque aceptó el desafío desde una dinámica diferente a la de la lucha armada de las Brigadas Rojas, en el marco de una gran contradicción social. Este es un aspecto tremendamente positivo e increíble que nosotros conservamos en nuestro ADN político. Aceptar los desafíos, precisamente, significa no ser oportunistas construyendo sobre los limites de los otros la propia tranquilidad, significa no hacer una competición con los otros como si el problema fuera solo de comportamiento que define la radicalidad. La Autonomía no ha sido radical solamente por los comportamientos sociales que proponía, lo ha sido por el proyecto y por la visión de la sociedad que tenia.

AÑOS 80, TIEMPO DE DERROTA

En los años 80 mi generación conoce el tiempo de la represión, el tiempo de la derrota. esto también nos ha servido mucho, porque siempre hay tiempos de victoria y de derrota. El ciclo de los movimientos habla el lenguaje de la victoria en momentos de exaltación social, de ruptura social y cultural, de critica respecto a lo existente, pero hay momentos en los que también se pierde, y aprender a asumir la derrota nos ha ayudado a no caer en el "dogmatismo científico" del marxismo ortodoxo en los movimientos, del marxismo-leninismo ortodoxo, o en la dinámica de comportamiento estético anarco-insurreccionalista. Nos ha hecho aprender la autocrítica, ver nuestros propios errores para ser capaces de madurar, de tirar para adelante, nos ha hecho aprender también la función de la comunidad como resistencia, como necesidad de construir la resistencia en los momentos de dificultad. Esto es fundamental para nosotros porque solo los locos pueden pensar que todo esto sea un proceso lineal, y que todo es científico, o que todo se acumula, o, por el contrario, que ya no hay esperanza. Nosotros tenemos esperanza pero sabemos muy bien que hay momentos y tiempos distintos, donde a veces es necesario soportar fuertes presiones de una represión muy grande, pues lo que estamos haciendo no es un juego, sino que es incluso una elección de vida. En los años 80 hemos atravesado esto. Teníamos grandes dificultades, pero también grandes esperanzas, que nos daba precisamente este sentimiento de comunidad, que no de ejercito, ni de soldados, ni de partido, etc.

Centros Sociales Okupados

Naturalmente los 80 han sido, también, el momento en el cual hemos tenido que enfrentarnos a la necesidad de cambiar, de ser el movimiento que transforma el estado de cosas presentes, pero también dentro de nosotros mismos. La necesidad de percibirnos como la identidad herética también respecto a los movimientos, y esto ha sido vivido en el Nordeste, en mi experiencia, trazando una nueva dimensión que venia mas del Norte de Europa, más de Inglaterra, esta de los Centros Sociales Okupados, una tendencia que venía de otros mundos, de otras experiencias culturales, políticas, sociales, como el tema de los "scuoters", la contracultura, el underground... Hemos tratado de coger esta onda y combinarla con la resistencia, con la elaboración de la derrota hacia el futuro, con la memoria como identidad, tomando nuestra experiencia histórica, no cristalizandola como dato histórico, ideologico o dogmático, sino tratando de atrapar el espíritu. Los Centros Sociales italianos, pero en particular nuestra experiencia, son esto, un nuevo inicio que parte de la resistencia, pero sin quedarse en ella. Encontramos la oportunidad de no ser prisioneros de nuestra historia. Por otra parte esta el análisis del proceso político como un proceso no lineal. También la historia esta hecha de interrupciones, de relanzamientos, de preguntas, respuestas distintas para tiempos distintos. La suma de esto nos ayudó a no ser el simulacro de aquello que hubo en los años 70.

Viendo que en los movimientos actuales hay tantos simulacros de aquello que hubo en el pasado, que se convierten en el simulacro de la tragedia, es decir, en farsa, pienso que es muy importante liberarse de ellos. Hay que utilizar la acumulación de experiencias, el "caminar preguntando" como algo central en nuestro quehacer político, asumir el hecho de que el proceso político, social, no es lineal, no es el sumatorio de tantas historias, sino la multiplicación de diversas contradicciones, de diversas experiencias, y esto nos posibilita ser los motores de nuestro hacer y no simplemente unos ejecutores de una historia ya escrita, que cuando esta escrita esta hecha de victorias y derrotas, pero cuando esta repetida como un simulacro, es una farsa, además de no representar nada. Los Centros Sociales han sido la tentativa de conjugar una nueva tendencia juvenil, cultural y política con la identidad y el espíritu de una batalla política que han conocido otras generaciones, y que ha sido, en cualquier caso, fundamental en Italia para construir un momento de ruptura histórico-política con el dogmatismo de la izquierda, y naturalmente con el estatalismo del estado-nación, con la socialdemocracia a la italiana, que ha acompañado desde los años 60 en adelante el panorama italiano, con el compromiso histórico con la Democracia Cristiana, con el estado de bienestar impuesto como una dinámica clientelar de pacificacion en Europa respecto al Socialismo real.

SEÑALES DE UNA NUEVA ETAPA

Chernobil 1987


En el 87 Chernobil abre la posibilidad de pasar a otra dimensión, la de la construcción social, la de la autoorganización como hipótesis verdadera.

Fue todo un movimiento antinuclear, superando la fase de las pequeñas concentraciones para convertirse en una practica de masas, de miles de personas, en la que nosotros jugamos un papel importante. Aquella resistencia autónoma que se llamaba Coordinadora antinuclear y antiimperialista comenzaba a plantearse el problema de como caminar en el futuro pasando de una practica social ligada al medio ambiente, al rechazo de la devastación ambiental, de la subordinación al mercado de la energía, a una reflexión sobre la sociedad que nosotros queríamos. No era solo un "contra", era también un "por" que se explicitaba en la practica de la acción directa. La otra vía señalaba que la política se podía hacer solo como testimonio o como delegación.

Desalojo Centro Social Leoncavallo, 1989

En la resistencia al desalojo del Centro Social Okupado "Leoncavallo" (Milán) en 1989, se introduce de nuevo la practica del conflicto en términos de resistencia para responder a una violación de derechos. Pero la resistencia en el Leoncavallo fue más allá del uso que se hizo de los cócteles molotov para detener a las escuadras de carabinieri y de policía que querían demoler un Centro Social que albergaba en su interior una comunidad. Fue una gestión inteligente, no una una gestión de violencia, digamos, militar, sino de resistencia legitima, hasta el punto de que el proceso judicial a los compañeros y compañeras del Leoncavallo termino con una condena muy atenuada sobre estos porque el Tribunal reconocía el alto valor moral y social de aquello que habían hecho. Por tanto, quienes estaban en dificultad eran las fuerzas del orden, a pesar de que se había planteado una resistencia activa, desconocida en Italia desde hacía muchos años. Es el año en el cual se rompe el encierro, cuando se vuelve a discutir, a hacer manifestaciones de 15.000 personas de nuevo con este elemento de radicalidad pero discutiendo poco de Centros Sociales y mucho de ciudad: ¿Como es la ciudad que tenemos?, ¿ Quien la ha hecho?, ¿Quien decide sobre esto? etc. Era el periodo del saqueo de la ciudad por parte de los grandes potentados económicos del capital, ligados al poder socialista de entonces. El alcalde que derriba el Leoncavallo es un alcalde del PSI (Partido Socialista Italiano). Se empieza a discutir de estas cosas y se abre una nueva fase, justo después llegara la pantera.

Movimiento de la Pantera

Con la caída del muro de Berlín llega, también, lógicamente, entre nosotros, una reflexión grande sobre el mundo que cambiaba, el mundo bipolar que se convertía en un mundo global. La caída del muro es un momento muy simbólico para nosotros, naturalmente de reflexión política interna, pero también de cambio en el modo de actuación política en un mundo que cambia totalmente su perspectiva, su dimensión, su equilibrio. El años siguiente aparece un primer gran movimiento, el "Movimiento de la Pantera". Nosotros siempre hemos hablado de movimiento, porque este es uno de los términos que heredamos de los 70, pero nunca lo habíamos vivido, autodefiníamos nosotros que eramos un movimiento, pero en realidad, eramos subjetividad política y el movimiento de la multitudes, de las personas, el movimiento como dimensión social, nunca lo habíamos vivido, sino en las historias de los años 70. En el 90 nos encontramos con este gran movimiento radical pero innovador que se da en las Universidades italianas con la ocupación durante tres meses de todas las universidades. Introduce una practica radical como las ocupaciones, el movimiento constituyente de una nueva dimensión democrática, de nuevos lugares de la decisión, de momentos de conflicto colectivo vividos de forma diferente a la habitual. Es el año en el que en Italia nace el "Posse", el hip-hop como practica política de comunicación, el año en el que el movimiento de la Pantera viene definido como el "movimiento de los faxes", porque empieza a utilizar los instrumentos de comunicación, que razona sobre la comunicación como herramienta de construcción política, de conexión, de organización nueva. Es el año de las primeras manifestaciones con música; es el año en el cual el movimiento estudiantil toma como símbolo un logo nuevo, el de la pantera, porque realmente había una pantera que se había fugado de un circo y era perseguida por la policía, pero pantera quiere decir también Black Panther. En una época que produce mitos, se razona sobre la necesidad de construir mito propios, imaginario, y no solamente práctica. Es cuando introducimos la utilización del logo, del símbolo interviniendo en la sociedad de los símbolos directamente con instrumentos de este tiempo y no de un tiempo pasado.

1994: LEVANTAMIENTO ZAPATISTA Y RUPTURA DE PARADIGMAS

El 94 es el año fundamental en el que alcanzamos el espíritu de lo que ya eramos, conseguimos ver un sueño nuevamente. Hasta entonces había habido un gran trabajo de automotivacion, de construcción de resistencia, de pequeñas hipótesis de perspectiva, pero faltaba algo, faltaba un sueño común, un empujón de imaginario, alguien que nos dijera que tenemos hermanos y hermanas en otras partes del mundo, que nos indicara algo. El 94 ha sido para nosotros la salvación: el levantamiento zapatista. Empezamos a aprender de los hermanos zapatistas todo aquello que nos servía para poder movernos en este nuevo mundo, aprender a producir experiencias innovadoras, nuevos lenguajes, nuevos lugares, nueva política. El levantamiento zapatista rompe todos los paradigmas, y nos da también una extraordinaria fuerza de imaginario y de sueño, y rompe también los paradigmas de toda la izquierda, incluso la extraparlamentaria; el paradigma de la toma del poder, del enfrentamiento militar, de la dictadura del proletariado, de la configuración unívoca de la clase. El zapatismo se dirige a los gays, a las lesbianas, a los jóvenes, precarios y parados, no usa el termino proletariado que podía convertirse en un fetiche que no explicara las modificaciones de la sociedad postfordista en la que la figura social productiva se da como atomización y multiplicación de las figuras sociales productivas, que ya no tenían como centro la gran fabrica, sino la transmigración de la gran fabrica a la fabrica social. Hablamos de una dimensión biopolítica, que llevaba al capital neoliberal a traspasar la frontera de la vida, y a ocuparse de adn, a producir logos y comportamientos sociales, no solo como dinámicas de control y disciplina, sino como dinámica de producción. Era necesario aprender lo que significaba construir movimiento, estar dentro de los movimientos, el significado de la acción política de parte pero no autosuficiente.

Todo esto los zapatistas empiezan a introducirlo y para nosotros es algo extraordinario, es un respiro increíble de alivio. Nos ayuda también a no tener miedo de equivocarnos, nos ayuda a tener un gran estimulo para decir que lo único que podemos perder son las cadenas, que nadie tiene la verdad en el bolsillo, que los "templarios" y los que custodian la memoria son nuestros peores enemigos, porque la historia esta todavía por construir, que no hay una linea política, sino experimentaciones, experiencias, ejemplos. Nos ayuda a decir que la comunicación es un terreno no solo de producción, no solo de control y disciplina, sino un terreno de lucha política y también un terreno de organización. Se consigue una alternativa, que tiene una perspectiva diversa de las clásicas formas de organización, como la forma partido, la forma sindicato, a las cuales no sabíamos dar respuesta. Nos habla de comunidad, que no es una comunidad biológica, sino una comunidad de destino. Nos habla de ciudadanía, de derechos de ciudadanía. El zapatismo nos ayuda a decir que local y global son dos esferas que se deben cruzar, que deben vivir en la actividad política que hacemos sin determinar la superioridad de ninguna de ellas. El conflicto y el consenso, todo lo referido, en las sociedades modernas, a la producción de opinión, a la fuerza de convencer, cosas que hasta entonces estaban en nuestra cabeza, en nuestro estomago, pero sin organizarse. Se comienza a escribir una nueva historia, una nueva palabra de la liberación. Desde aquí damos un salto, y comienzan las experiencias mas innovativas; el inicio el el nordeste de los trabajos sobre federalismo, la reapropiacion de los medios administrativos como dinámica de radicalidad, de un nuevo mecanismo de la practica del conflicto, etc.

LOS MONOS BLANCOS 1994

Primer tentativo


La manifestación contra el desalojo del segundo Leoncavallo es una de las primeras señales del comienzo de la comunicación de los cuerpos, porque todo este elemento del enfrentamiento de calle se libera de las ataduras de la historia pasada, de una incapacidad de producir nueva historia incluso sobre el problema del conflicto. La manifestación que decide romper la prohibición de manifestarse, enfrentándose a los policías de Formentini (alcalde de Milán en el 94), se convierte en la manifestación en la que, entre otras cosas, se utiliza el símbolo que el poder daba como negativo, los fantasmas del pasado, y se convierte en la manifestación de los monos blancos, que por primera vez se transforman en fantasmas activos de la ciudad. Habla de ciudad y rompe el cerco en un momento en el cual si te están atacando, te lanzas al ataque, como mejor defensa, como razonamiento. Esta fue una gran experiencia, uno de los primeros tentativos.

Los monos blancos nacen para disolverse

Pero es en el 98 cuando llega el uso de los monos blancos como razonamiento político efectivo sobre la utilización del símbolo, sobre la producción de mitos, de experimentación de la subjetividad que va hacia la multitud, que se plantea el problema de construir etapas con el objetivo de disolverse. Los monos blancos nacen con el objetivo de desaparecer. Como el pasamontañas, se usan los monos blancos para hacernos ver, para decir que somos todos y todas iguales, pero todos y todas diferentes. Declaran nacer para disolverse, como el EZLN, ¿ por que?, porque buscan el momento de desaparecer y se disuelven solo en la multitud de Génova.

L@s portavoces

Los monos blancos experimentan el lenguaje, también a través de la figura de los y las portavoces, esto es muy importante. No se abandona la comunicación a la figura clásica del líder no declarado, del líder de hecho, que ha acompañado siempre a los movimientos extraparlamentarios, no solo a aquellos parlamentarios, que tienen la organización partidista como elemento, con el secretario general, etc. Los movimientos que critican esta organización partido, tienen siempre, sin embargo, líderes de hecho. El portavoz es la intuición de que estamos en un mundo donde la comunicación es central, donde la atribución de la palabra es central. Por eso debíamos producir un mecanismo que lleva a que los portavoces sean un elemento que la comunidad utiliza, respondiendo a esta exigencia de la información y de la comunicación política, que la figura del Sub, por ejemplo, representa en el EZLN. Esto es algo formidable como experimentación.

Nueva desobediencia civil

Hemos vivido un proceso que nos ha traído grandes y pequeñas experimentaciones, el 98 ha sido la primera vez que hemos utilizado escudos, protecciones, etc., que recalcaban, de una parte, la necesidad de construir un mecanismo vencedor en las calles mediante la practica de la acción directa, del conflicto. Por otra parte, recalcaban la idea de hacerlo de una manera que el resto aceptara, que las otras diversidades y que la sociedad aceptara, poniendo en dificultad al adversario, haciendo visible su violencia, un poco como en el judo, utilizando su fuerza para derrotarlo, mas que utilizar la propia fuerza. Hablábamos del hecho de representar el conflicto con el imperio (aunque todavía no hablábamos de imperio) como un conflicto medieval, donde estaban los señores feudales, los injustos, que se encerraban en sus propios fuertes, las cumbres blindadas (en el caso del 98 era un centro de detención para inmigrantes en Trieste que fue el único cerrado por una manifestación en Italia).

Ante este elemento de la fortaleza, de los soldados, nosotros teníamos que representar un enfrentamiento medieval, jugando con esta categoría de los guerreros medievales, con el escudo, el casco, la armadura, este elemento romántico, si se quiere, de los pobres que se lanzan hacia el ejercito de los poderosos, retomando aquello que esta contenido en la declaración de guerra del EZLN al ejercito federal, "nosotros somos un ejercito de soñadores", un ejercito de pobres, pero nos enfrentamos a vosotros -poderosos- porque tenemos la dignidad, las ideas, porque tenemos razón. Todo este elemento se conjuga en la practica simbólica y concreta de la acción de desobediencia que tu defines, una interpretación nueva del concepto de desobediencia civil, que toma un poco de la experiencia americana de la lucha por los derechos civiles, de Gandhi, de Marcos y los zapatistas etc. Propone un elemento nuevo de construcción de imaginario de un mundo global gobernado por señores feudales, en el cual súbditos pobres se organizan para combatir las injusticias. Aquí ha residido la potencia de los monos blancos, porque si la practica de los monos blancos no hubiera sido simbólica, vistiendo una determinada divisa, no habrían tenido este tipo de difusión y este tipo de idea-fuerza que después ha circulado por todo el mundo, de la que no hemos hecho propaganda, sino que se ha propagado por si misma.

De Seattle a Praga

El espíritu y la idea-fuerza de los monos blancos se ha encontrado después con el movimiento de Seattle, y allí se ha convertido en algo que implicaba una ruptura. Estoy hablando de sinergias, de sinapsis, no estoy hablando de una organización que decide. En Seattle aparece la práctica del conflicto-consenso y de la desobediencia sin que nadie les haya dicho nada.

En Seattle aparece un movimiento que se define como plural, con el obrero y el defensor del medio ambiente, reaparece la práctica de la acción directa pero en una forma aceptada también por parte de quien no la practica, aparece la práctica de la comunicación porque irrumpe en el escenario de la OMC utilizándolo como un nuevo y enorme escenario para los movimientos. Se inicia el periodo las cumbres, se introduce este elemento que pasa del simple testimonio al conflicto directo con el poder en aquellos lugares de la decisión. Todo esto que empezó de una manera fuerte en Italia, pero no tanto en el resto de Europa o en el Mundo, en Seattle impacta con algo global, e inmediatamente, los monos blancos se plantean la cuestión de un recorrido global. El termino desobediencia, hasta antes de Seattle, no era utilizado, aun a pesar de que existía la practica de la desobediencia, pero no se la nombraba así. Después de Seattle empezamos a hablar de desobediencia, y esto supone otro elemento de innovación para nosotros porque nos liberamos de un lenguaje que había dejado de ser apropiado, ya no se usa mas el concepto enfrentamientos o choques, aparece la desobediencia, que determina el recorrido del conflicto y el consenso y que nos hace razonar sobre cuestiones nuevas. Este es un recorrido complejo, donde pueden existir momentos de consenso, pero también momentos donde no tienes nada de consenso, pero donde estimulas la discusión, esto es necesario, porque si no se cae en una especie de mecanismo, de técnica de calle, que no resulta apropiado y existe el riesgo de que se convierta en una forma de corrupción, de oportunismo. Por ejemplo, las manos alzadas son un elemento especifico de un recorrido que puede conocer también las piedras, la intifada. Depende del recorrido que estes diseñando. Tras Seattle empieza un nuevo recorrido que para nosotros significa ir a Praga.

Monos blancos fuera de Italia

Vivimos esto con un gran desconcierto, por una parte estábamos felices de descubrir que era posible pensar que teníamos tantos hermanos y hermanas que habían entendido aquello que queríamos, pero sabíamos que nosotros no podíamos organizar esto, y había mucha gente que nos pedía organizarlo. Nosotros queríamos decir aquello que después, en la caravana zapatista, nos enseñaron a decir los zapatistas: que nosotros no somos todos, no representamos a todos y a todas, somos una parte, y en este caso somos el movimiento italiano de los monos blancos, que esta dentro de un espíritu europeo o mundial de los monos blancos, pero que no puede organizar a, diferentes sujetos que viven experimentaciones diferentes. Nosotros no podemos responder a todas las preguntas. Así que teníamos una gran felicidad, pero un gran embarazo, porque nosotros tenemos nuestros límites, y porque siempre nos hemos reído un poco de nosotros mismos, diciendo que somos unos locos globales, porque es necesario estar locos para desafiar al poder. No se puede pensar que de nosotros dependa el futuro del movimiento europeo o global, no depende de nosotros, depende de cada uno. En Praga maduró la idea de que era un error construir los monos blancos internacionales como una especie partido, pero estaba bien que hubiese monos blancos en Madrid, en Roma, Berlin o Inglaterra. Cada práctica distinta de las demás pero organizándose en torno a objetivos comunes mediante la comunicación, esta era la idea que nos ha superado, porque no eramos capaces de seguir todas estas practicas. Tampoco queríamos hacerlo, porque también nosotros teníamos que vivir, no queríamos caer en la trampa del partido de los monos blancos que podía aparecer. Esto se ha materializado después en Génova.

La Caravana zapatista, primavera del 2001

¿Cuando la comandancia nos pidió ser su servicio de orden durante la Marcha?

Están son las bromas que hacen esos locos de los zapatistas y esta vez nos tocó a nosotros. Fue algo que nos dio la posibilidad de pensar en nuestros límites, de reflexionar sobre la organización. Marcos nos ha hecho ver estos límites a través de aquella broma. Aunque para nosotros fue un gran placer el sentirnos útiles en algún modo, más sentirnos útiles que serlo creo. La caravana era la primera de las tres etapas que llevaban hasta Génova en Julio, por lo que para nosotros la caravana tenia algo de constituyente, y esto lo han entendido nuestros hermanos y hermanas del EZLN, que nos han ayudado, nos han gastado una broma para ayudarnos, pero también para abrir contradicciones en México. Nosotros hemos vuelto a casa con sentimientos contrastados, no lineales, y hemos reflexionado sobre el hecho de sentirnos como soldados de Marcos, que era un error, tanto para Marcos, como para el EZLN, como para nosotros, incluso si tenemos esta hermandad que nos lleva a definirnos como zapatistas europeos, algo por lo que pedimos excusas a los zapatistas, pero que para nosotros es un elemento de ruptura con la tristeza del panorama político de la izquierda y del movimiento en el mundo. El zapatismo es una liberación, por lo que hemos tomado prestado este nombre, pidiendo siempre perdón por ello, porque tenemos la necesidad de una llamada de liberación, de liberación mental, de liberación del sueño, e intentamos hacerlo en nuestra selva, por esto nunca hemos sido comités de solidaridad con Chiapas, somos Ya Basta¡, Desobedientes, porque el problema es traducir en Europa aquello que aprendemos en Chiapas, no construir el apoyo externo a lo que hacen los demás. Debe implicar construir algo que nos lleve a cambiar, esto es algo de lo que nos ha enseñado esta experiencia con los compañeros del EZLN.

GÉNOVA JULIO 2001, NACEN LOS Y LAS DESOBEDIENTES

Algo fundamental es que no salimos del Estadio Carlini (sede de los desobedientes durante las manifestaciones contra el G8) como monos blancos, sino como desobedientes, porque sabíamos que existía la posibilidad de ser derrotados como monos blancos, pero también de iniciar una nueva historia, la de los desobedientes. Sabíamos que teníamos que usar aquella gran acumulación de visibilidad, de potencia que habíamos alcanzado para Génova, antes de Génova, con la declaración de guerra a los poderosos, con el recorrido de los monos blancos, para disolverlos finalmente. Este era el momento que queríamos para disolver los monos blancos, porque tenían que servir para vivir momentos de multitud, no para representarse a si mismos o para crear un ejercito. Por fortuna lo conseguimos, en esto no nos equivocamos. No ganó la idea de la guerra, la de la derrota a los monos blancos, pues estos desaparecieron, dejando en su lugar algo que es 10 veces mas que los monos blancos, los y las desobedientes, que se han convertido, ahora en Italia, en una realidad política y social enorme, tal y como hemos visto últimamente.

Una realidad con sus límites, pero muy importante, dentro del movimiento de los movimientos, siendo una de las grandes agregaciones políticas de las cuales se habla y que consigue hacer hablar y producir iniciativas sociales. Creo que en Génova hemos asistido al final de la dinámica constituyente del imperio a través de las cumbres, y al inicio de la dinámica constituyente del imperio a través de la guerra. En Génova hemos visto la guerra que después ha introducido el concepto de Guerra Global Permanente que hemos vivido directamente; la suspensión de los derechos, la relación de las fuerzas del orden con los manifestantes como enemigos, los presos y las presas, los detenidos, las torturas, el asesinato, la muerte. Lo que ha sucedió después del 11 de septiembre, el inicio de la Guerra Global Permanente. Hemos conocido el final de una fase, que era aquella que siguió a Seattle, caracterizada por la producción de imaginario para el imperio global a través de las cumbres. Se ha cambiado de estrategia abrazando la guerra global permanente como dimensión sistémica en la constitución del imperio. Por fortuna hemos intuido este elemento. No pudimos pensar, obviamente, como tendría lugar, pero allí nos hemos quitado los monos blancos, esto nos permite vivir todavía.

Florencia Noviembre 2002, Matrix

Existe la necesidad, por parte del poder, de reescribir Genova. Matrix tiene la necesidad de producir otra "película", porque la película de Génova que se vio en todo el mundo pone en dificultad al poder. El poder no aparece como le hubiera gustado, no produce consenso para el poder, sino que produce problemas. Recordemos que después de Genova hay 140 policías investigados por la justicia por primera vez en Italia, se habla de torturas, están en grandes dificultades y el poder responde como lo hace Matrix, reescribiendo la película, intentando salvar la legitimidad del poder en el uso de la fuerza. La guerra es el fin de la mediación y por tanto implica la necesidad del poder de legitimar el uso de la fuerza, de las armas, de la suspensión de los derechos, de la propia guerra, como dinámica de relación política.

La política se convierte en la continuación de la guerra con otros medios. El poder tiene que construir una represión sostenida con un mecanismo jurídico comunicativo. Es una represión que tiene, además, la tarea de introducir la guerra interna, la restricción de las libertades políticas y civiles en occidente, que debe unirse a los elementos de la Guerra Global Permanente, como la guerra preventiva. Esto implica una gran problema si tenemos en cuenta que el neoliberalismo se funda sobre el paradigma de la "máxima libertad". Existe un enfrentamiento dentro del imperio respecto a esto, entre el modelo de Clinton y el modelo de Bush, por ejemplo, que empieza a aparecer. Esto tiene que ver con los mecanismos de producción de miedo y de restricción de libertades políticas y civiles en nuestro mundo, con la modificación constitucional que se da materialmente, que ya se ha dado respecto a los artículos referidos a la guerra. Italia ha violado siempre el articulo 11, en estos tiempos, que impedía hacer la guerra, han cambiado la Constitución, la OTAN ha violado su principio y después ha cambiado su Constitución, lo mismo sucede con las libertades y las garantías de derechos en las democracias conocidas hasta antes del 11 de septiembre.

Desobediencia al Imperio

Hay que leer lo que nos esta sucediendo en términos de represión. La desobediencia tiene esta idea, esta capacidad de estar en medio entre la corrupción y la represión. Es difícil controlarla. Te dicen que: o te corrompes o haces el juego a la represión, para convertirte en lo que necesitamos que seas, un terrorista. Nosotros estamos, al contrario, atentos a no caer en ninguna de las dos trampas y creamos un espacio político nuevo que ellos no consiguen interpretar. En el ultimo informe de los servicios secretos italianos sobre la seguridad del país, definen este problema, dicen que la desobediencia es algo nuevo que no consiguen interpretar con las leyes, pero que es peligros, de hecho son citados como problemas Bin Laden y la desobediencia, como problemas sociales, el fundamentalismo islámico y la desobediencia, para la seguridad del país. Creo que tienen razón. Aunque de frente tengamos al poder, a los Estados, a los servicios secretos de medio mundo, que buscan crear una realidad virtual que nos pueda situar en el lugar donde puedan gobernarnos, tenemos que resistir a estas trampas.

Alianza con los migrantes

Es mejor hablar de una utilización reciproca a partir de una nueva dimensión que introducen los y las migrantes que es la de lo global presente en los territorios locales, y la dimensión del derecho a la ciudadanía como un derecho universal, pero que se explicita territorialmente en las condiciones materiales de vida de sujetos nuevos, tanto del trabajo como de la vida social. Siempre hemos pensado que es mejor proceder con mecanismos de autoorganización común, pero también de acciones diferenciadas. Nosotros hemos ido a desmontar un centro de detención de inmigrantes y pienso que hemos hecho bien, aunque no hubiera inmigrantes con nosotros. Un día lo harán los inmigrantes directamente y nosotros tendremos que hacer otras cosas en otros lugares, creo que este mecanismo no debe ser confundido con la idea de una vanguardia y las masas de inmigrantes que estan detrás, sino simplemente como una batalla común referida a la ciudadanía.

Tenemos que pensar en formas en las que esta unión entre sujetos diferentes tiene lugar en condiciones comunes, por ejemplo la practica de la desobediencia a las leyes sobre inmigración produce estos espacios de unión, o la hospitalidad a los clandestinos, que no es una simple cuestión de buen corazón aunque, de todas formas, no venga mal en el mundo de mierda en el que vivimos ser humanos y ayudar a quienes están peor. Pero creo que debe ser un territorio de organización, de espacios comunes de resistencia que pueden ser el lugar donde se produce este mestizaje. Nosotros en nuestros Centros Sociales creamos, públicamente, centros de acogida para clandestinos, y mecanismos de resistencia donde se da un mestizaje en el tiempo, entre sujetos diferentes creado a traves de objetivos comunes, como el estar en una comunidad. Por tanto, mas allá del sabotaje a las leyes, que es necesario, hay que organizar iniciativas para denunciar las violaciones de derechos humanos que están detrás de estas leyes de una Europa convertida en una fortaleza.

Creo que el elemento fuerte tal vez sea el no considerar la cuestión de quien organiza a quien, sino de utilizarnos para crear lugares de mestizaje a partir de dimensiones concretas. Sevilla ha significado esto, porque en realidad para hablar con los inmigrantes del encierro, hemos ocupado una iglesia. Después hemos hablado porque eramos iguales. Si hacíamos como otros que iban allí a decir: ven conmigo que te organizo yo, que te represento yo, no habríamos cambiado nada. Ellos han cambiado porque han llevado acabo aquel tipo de acción política, y han sido la verdadera contracumbre, y nosotros hemos cambiado porque en lugar de ir a donde estaban, hemos hecho como ellos y ellas, ocupar, y después hemos hablado.

- Luca, ¿Volveremos a vernos para tomar café italiano en Lanzarote?

- Pienso que si, pero tendremos que tomar café zapatista.

(traducción: Alfredo y Pablo)