La muerte no nos hace buenos... (Parte III)
La muerte no nos hace buenos... (Parte II)
La muerte no nos hace buenos... (Parte I)

Juan XXIII

Solo puede haber un milagro, y entonces se puede atisbar que vendrá otro tipo de habitante para el Trono de San Pedro. Sin embargo, tal como están dadas las condiciones objetivas y subjetivas de este entramado del estado Vaticano, sobre Roma y el mundo sobrevendrá otro Papa al estilo del pensamiento ideológico de Juan Pablo II y políticamente diferente en su práctica, porque será otra persona, pero cercano a los designios del ahora: el Papa que revolucionó la iglesia.

Así comenzamos nuestro trabajo, antes de la fumata blanca del 19 de abril, 36 horas después de la reunión de cardenales para elegir, ahora sí a Benedictino XVI. El cardenal Ratzinger quien llevó a Juan Pablo II al trono de Roma, ahora es el nuevo Papa, con 78 años de edad y de una tradición ultraconservadora se transforma en Benedicto XVI. Esta orden fue fundada por San Benito en el año 517, de origen italiano, hijo de padres acomodados, este Santo fue nombrado patrono de toda Europa por Juan Pablo II, en 1980, cuando cumplía 150 años de su nacimiento. Esta orden fue una de las que más ha fundado en Europa sus congregaciones. En el caso de nuestro país esta orden se encuentra en diferentes partes de nuestro territorio.

Entre los cardenales que eligieron a Ratzinger hay dos miembros del Opus Dei, uno es el español Julián Herranz y el peruano Juan Luis Cipriano Thorne, El Opus Dei o la Obra de Dios tiene entre sus simpatizantes al elegido Papa, al camarlengo Eduardo Martínez Somalo.nbsp;

El teólogo Juan José Tomayo sostiene que en los últimos 25 años el catolicismo de Roma se ha configurado a imagen y semejanza de la organización conservadora fundada por el sacerdote español José María Escrivá de Balaguer, que es canonizado en el 2002.

Por otro lado Juan Pablo II rezó en la tumba de Escrivá Balaguer antes de entrar al cónclave que lo llevó al trono de Roma.

Como para ver la realidad de la actual Iglesia Católica decir que existen otras órdenes de tipo conservador como Comunión y Liberación, que nada tiene que ver con la Teología de la Liberación, que goza del apoyo del cardenal italiano Angelo Scola. La otra es el movimiento de los carismáticos Focolares que cuenta entre sus miembros a los arzobispos de Florencia, Ennio Antonello, y el de Praga Miloslav Vik, y para muestra de esta Iglesia jerárquica y monárquica que dejara el Papa fallecido, está el mexicano Norberto Rivera, relacionado con la hermética congregación ultra católica Legionarios de Cristo.

'Con Juan Pablo II retrocedió. Creó una iglesia mucho más clerical, masculina, ortodoxa, centralizadora, sin visión de pueblo de Dios (...) entonces eso afecta una pastoral como la nuestra, una pastoral de frontera como la CPT,' sostuvo Tomás Balduino.

Porque Karol Wojtyla cambia su perfil hacia uno conservador que impuso al clero de todo el mundo. El Papa polaco fue llevado de la mano por el Opus Dei, el conservador Cardenal Ratzinger de Alemania fue su impulsor político en la elección, cuando salió el humo blanco, luego de un brevísimo papado de Juan Pablo I, el Papa asesinado, como sostiene Rubén Dri. El arzobispo de Munich y el Opus Dei conquistaron pronto la cúpula eclesial donde se colocaron a sus seguidores más destacados.nbsp;

Monseñor Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei fue canonizado el 6 de octubre del 2002. Nace el 9 de enero de 1902 en Barbastro, en la provincia de Huesca, España, era hijo de pequeños comerciantes. Fue ordenado sacerdote a los 23 años de edad. Fundo en el año en 1928 el 'Opus Dei' en Madrid. Muere en 1975 y en 1981, el Papa inició la causa de beatificación y lo declaró como tal el 17 de mayo de 1982. Veinte años después fue canonizado.

Según se afirma el Opus Dei le dio a la banca Vaticana una cantidad de dinero que evitó su bancarrota.

El Opus Dei tiene 80.000 seguidores diseminados por todo el mundo, sus objetivos son la atención de los laicos en su vida religiosa, con una liturgia muy rígida, es la vigilancia de sus necesidades místicas como católicos, y sus prácticas ascéticas, donde se propone que sus miembros alcancen la santificación por medio del apostolado y el trabajo personal. Según sus seguidores esta es una de las pocas organizaciones espirituales que se proponen esto, ya que en el mundo materialista que se vive, sólo se piensa en lo material dejando lo espiritual. Como contradicción de sus propios planteos tienen escuelas empresariales y centros culturales. El nombre completo es la Prelatura de la Santa Cruz y Opus Dei, y la sede es Roma.nbsp;

Sus actividades se extendieron desde los barrios y hospitales de Madrid, luego de la Segunda Guerra Mundial, y otros procesos en América Latina, Asia, Africa y Oceanía acoge a todo tipo de personas, pero prefiere que tengan estudios universitarios, sean profesionales, activos, bien educadas, de buena presencia, inteligentes, capaces, que se destaquen en sus profesiones, de buen nivel económico, y personalidades de la política y finanzas.nbsp;

Juan Pablo II hizo del Opus Dei su prelatura esencial, tiene 1500 padres. Y según las versiones extraoficiales, antes de juntarse el cónclave, Ratzinger tenía 40 votos sobre 77 necesarios para ser Papa. Esta Prelatura personal es la que ha conducido el Vaticano en estos 26 años de reinado papal, con mano firme, autoritaria de puertas adentro, carismático, pero sepultando las renovaciones de Vaticano II.

La historia de la iglesia de los pobres está llegando a su fin, definitivo y autoritariamente impuesto por la larga monarquía de Juan Pablo II y del ahora Benedictino XVI que es contrario a la Teología de la Liberación. No en vano ha elegido un nombre de las catacumbas del proceso medieval y del avance de una iglesia que basó su poder en el rezo, la trascendencia y la pobreza de millones de seres humanos. En la servidumbre y en la explotación de la mano de obra campesina. Esa Iglesia se apoderó de millones de hectáreas donde trabajaban de sol a sol miles y cientos de miles de familias campesinas, desde muy corta edad hasta el eclipse humano.nbsp;

A pesar de los pronósticos de muchos que pensaron que América Latina tendría un Papa, por poseer el 44 por ciento de su feligresía, algo así como casi 500 millones de creyentes sobre los 1.100 millones en todo el mundo, a pesar de esas elucubraciones, Ratzinger fue el número cantado desde antes de comenzar el cónclave.

Hoy más que nunca la iglesia refleja que los otros momentos de la opción por los pobres, de la Teología de la Liberación, deben quedar sepultados definitivamente. Como nunca se impone la Teología de la Dominación, como afirma Rubén Dri. Más que nunca será con un oído en sus evangelios y otro en el Vaticano…

Pero más que nunca aquellos que quieren y buscan desde las entrañas de una iglesia que responda a los designios y necesidades populares podrán sostener, afirmar y luchar por esa sabia enseñanza de Monseñor Angelelli, con un oído en el evangelio y otro en el pueblo.