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País Vasco

Censurar con carácter retroactivo.

Intxaurrondo

Llevo días pensando como canalizar mi protesta por lo que considero una nueva vuelta de tuerca que amordaza, nunca mejor dicho, a Euskal Herria y de rebote a toda opinión disidente.
 
La Audiencia Nacional vuelve a ser la noticia y sus jueces la razón. Ahora le ha tocado al histórico militante de la organización armada Euskadi ta Askatasuna (Patria y Libertad), ETA, Iñaki de Juana Chaos.
 
Desde que los medios de comunicación, ABC, El Mundo, Paz-Digital y algunos otros mas, decidieron sabiamente manipulados por el poder popular, del partido popular quede claro, que el preso Iñaki de Juana no podía recuperar la libertad, desataron su guerra mediática particular con el objetivo de obligar al poder a volver a desoír su propia legalidad.
 
El ahora preso debería recuperar la libertad después de haber cumplido la condena que le fue impuesta hace 18 años y que se ha visto reducida por las redenciones legales que el sistema penitenciario otorga. Es fácil pensar que este preso condenado a 3.000 años (tres mil) no haya obtenido redención gratuita alguna por parte de Instituciones Penitenciarias, más bien se le habrán negado muchas que a otros presos sí se les hayan otorgado.
 
A pesar de la guerra mediática y de la debilidad del gobierno en el poder frente a este tipo de campañas el juez central de instrucción número 1 Santiago Pedraz no encontró justificación legal alguna que prolongase el encarcelamiento del preso político donostiarra. Ello le hizo merecedor de una campaña de señalamiento público (ver hemeroteca), por lo que tal vez sea otro candidato a abandonar su domicilio como lo tuvo que hacer no ha mucho Pilar Manjón, presidenta de la asociación de victimas del 11M.
 
Ahora nos dice la Audiencia Nacional que el juez “no ha atinado” en la aplicación de la ley, que las alegaciones presentadas por la AVT aportan indicios suficientes para considerar su instancia errónea, la del juez Pedraz claro, y por ello decide que Iñaki de Juana no recupere la libertad una vez cumplida la condena. La justificación o razones para mantenerlo en prisión son la nueva imputación de «pertenencia a banda armada, exaltación del terrorismo y amenazas terroristas».
 
Para los mal pensados, entre los que yo me encuentro casi siempre, deja muy claro «El auto de procesamiento no supone que la persona o personas hayan de ser acusadas, ni mucho menos que si, llegado el momento lo fuesen, se dicte sentencia condenatoria, y siguen teniendo a su favor la presunción de inocencia, que sólo se podrá destruir con las pruebas de cargo que se practiquen en la vista oral».  
 
Estoy seguro que Iñaki, su familia, amigos y abogados dormirán mucho mas tranquilos.
 
La Audiencia Nacional no condena a nadie sin pruebas, la Audiencia Nacional sigue manteniendo la figura de la presunción de inocencia y por ello decide prorrogar su tiempo en la cárcel en espera de esa vista oral, que como todo el mundo sabe puede esperar hasta cuatro años, en la que el fiscal Justo Alonso y la AVT demostrarán, sin lugar a dudas, que los artículos publicados en diciembre, hace más de 180 días, en Gara, eran o constituían delito de amenazas y pertenencia a banda armada.
 
No hace mucho la también Audiencia Nacional, sala cuarta, decidía que la pertenencia a banda armada implicaba el uso de armas. Hace mucho más tiempo que el inigualable juez Garzón igualaba terrorismo con el uso de las mismas si no eran para cazar perdices. Lástima que Gabriel Celaya dejase escrito aquello de "La poesía es un arma cargada de futuro, un arma cargada de futuro expansivo con el que te apunto al pecho". Seguro que muchos jueces de la AN han creído que sus versos eran o sentaban jurisprudencia.
 
El Escudo (1.12.04) y Gallizo (30.12.04), son los dos artículos que Iñaki de Juana publicó en Gara y parece que ambos están cargados de ese futuro expansivo con el que la palabra apunta, el mismo que justifica su continuidad en la puta cárcel.
 
Hace mucho leí el libro publicado por Txalaparta titulado "Días" del propio preso y recuerdo su anécdota con las bolsas de basura negras y blancas que le ocasionó un parte a añadir a los muchos que seguramente tenia. El sabe de incongruencias y según ha dejado en declaraciones hechas sabía que la Audiencia iba a dictar procesamiento, que la presunción de inocencia es un mito urbano del que todo el mundo habla y nadie, si es vasco, ha visto.
 
Estoy convencido que esta nueva vuelta de tuerca en tiempos de talantes de diálogo y negociación vuelve a ser producto de la debilidad de un gobierno que no se atreve, de una oposición demasiado fuerte y del silencio de tantos y tantos que asisten al teatro desde butaca, siendo el precio de la entrada el no cuestionar la obra o la interpretación. De un gobierno empeñado por un pasado demasiado oscuro.
 
La censura existe, continua existiendo. Ahora de manos del fiscal Justo Alonso, de la politizada AVT, de la Audiencia Nacional y sus jueces, existe una censura que es capaz de rebuscar en el tiempo y lo que en su día no fue delito ser ahora, pasado el tiempo y siendo tan difícil de encontrar los artículos mencionados para comprobar sus acusaciones constituir justificación legal para negarle a una persona la libertad.
 
Tal vez en esto, lo de la libertad, esté equivocado y tomando una frase de Gasset, Iñaki de Juana sea más libre en la puta cárcel que muchos fuera de ellos. La frase, “Quien en nombre de la libertad renuncia a ser el que tiene que ser, ya se ha matado en vida: es un suicida en pie. Su existencia consistirá en una perpetúa fuga de la única realidad que podía ser”.  
 
Seguro también que es ésta la libertad que asusta al Tribunal Supremo, y nos recuerda el artículo 24 de la constitución, que limita la libertad de expresión y la de información en el derecho al honor, a la intimidad y a la propia imagen. Siendo así y teniendo en cuenta que estas limitaciones figuran en el articulo 10 del Convenio para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales está más que claro, sin leer siquiera los escritos juzgados, el por qué se le niega a una persona la libertad.
 
A Iñaki de Juana se le negó la libertad en octubre, debería haber salido en febrero, el juez Pedraz había situado esta libertad en agosto, la vuelta a la tuerca que la Audiencia Nacional ahora, el Tribunal Supremo otras veces y el Tribunal Constitucional si hiciese falta lo retendrán hasta que pase el efecto mediático iniciado por El Mundo en un articulo titulado ¿Se echara de Juana al monte? en el que no duda, citando a fuentes antiterroristas en, al asegurar que “volverá a matar”.
 
Iñaki de Juana Chaos no es un preso común, el estado continua negando el estatus o condición de preso político a él y a todos los presos de ETA, FRAP o GRAPO, al que el Ministerio Publico le acusa "ha llevado a cabo labores propagandísticas y publicitarias a favor de ETA, plantes y desobediencias organizadas por la banda en las cárceles, transmisión de datos de personas para que la organización las incluyera entre sus objetivos y captación de nuevos militantes, además de actuar como portavoz de los presos etarras".  Para ello, para fundamentar los indicios mas que suficientes aportados por el fiscal y la AVT, se entresacan, de los dos artículos señalados y que en su día no constituyeron delito, ni levantaron polvareda patriótica alguna, las frases o expresiones de “enemigos” , "sacad vuestras sucias manos de Euskal Herria" o "MLNV", para justificarlo.
 
Negar la libertad de una persona una vez cumplida la condena impuesta de acuerdo a la ley basándose en frases entresacadas de dos artículos de opinión provocan mi duda, mas que razonable, de la vulneración del estado de derecho del que presumen. Catalogar la decisión de un juez como “no atinada” es una burla a la profesión y a la persona. Volver hacer oídos a la AVT es mas de lo mismo.
 
Si callarnos ante esta nueva vulneración de la libertad de expresión, ahora con carácter retroactivo, en la interpretación patriótica y rancia del derecho al honor, a la intimidad o a la imagen o cualquier otro motivo “atinado” que nos quieran hacer creer muchos de los que apostamos por la palabra estamos condenados a ser parte de sus autos y de sus campañas mediáticas.
 
Hay algunos que no aprendemos nunca.  
 
Intxaurrondo 2005.julio.12