Tasio Erkizia, histórico militante independentista y uno de los convocantes de la movilización prevista para hoy, afirmó ayer que «arrancar el permiso para esta manifestación ha sido un nuevo triunfo del pueblo contra quienes quieren evitar la expresión de las ideas y de los distintos proyectos políticos».
Aún quedan reivindicaciones, como la de retirar la bandera española.
Convocantes de Bilbo: «Arrancar el permiso ha sido un triunfo de todo el pueblo»                        

BILBO.- En declaraciones efectuadas ayer en la Plaza del Arriaga, y ante numerosos medios de comunicación, Erkizia acusó a «los Ares, Basagoiti y Barrio» de haber intentado «torpedear esta movilización», pero remarcó que «han fracasado».
En este contexto, realizó un llamamiento «a todos los abertzales y de izquierdas, pero también a todo el pueblo, a todos los demócratas» para que participen en la manifestación que, bajo el lema «Orain herria, orain bakea» partirá hoy a las 12.00 desde la calle Alameda de Rekalde, junto a la sede del PSE. «Está en juego un futuro democrático para este pueblo», sentenció.
Entre las razones para responder a la convocatoria, Erkizia apuntó que «esta semana se ha visto muy claro que el PP o sectores del PSE apuestan claramente por reventar cualquier camino hacia la paz» porque «saben que un diálogo abierto y sin exclusiones les va a llevar necesariamente a respetar la voluntad de este pueblo», explicó Erkizia. Así, afirmó que «esta manifestación es una forma de impulsar un proceso de paz y de decir que el pueblo está dispuesto a luchar hasta el fin por este propósito».
Críticas de PP y PSE                       

  Por su parte, el secretario general del PSE, Patxi López, acusó a Interior de Lakua de «perju- dicar al Estado de Derecho y a la propia democracia» al no prohibir la manifestación de este mediodía, que equiparó con la de Donostia.
A su juicio, la decisión de Interior «es una muestra más de esa ambigüedad calculada del PNV, del Gobierno Vasco, de esa política de la zanahoria y el palo con la que intentan contentar al mundo de Batasuna».
Para la presidenta del PP de la CAV, María San Gil, fue Josu Jon Imaz quien «ordenó» a Javier Balza «lo que había que hacer» y consideró que PNV e Interior «se someten de forma voluntaria a las decisiones de los radicales», por lo que reclamó la intervención del delegado del Gobierno de Madrid en Gasteiz. y pidió al Gobierno Zapatero que preste «la máxima atención de lo que está ocurriendo en Euskadi.