Nebera
Korella (Euskal Herria)

Te escribo esta carta en nombre de la alcaldesa de Iruñea Yolanda Barcina que como bien sabes y a pesar del puesto que ocupa de esta tierra no tiene ni pajolera idea y lo que es peor no quiere tenerla de costumbres de la tierra que gobierna.

Te escribo estas líneas para constatar que no es necesario haber nacido en Navarra para conocer, respetar y amar sus costumbres basta con ser medianamente honrado y sentirse, aunque sea un poco, integrado entre sus tierras y sus gentes. En el peor de los casos se puede optar por respetar a quienes si la sienten e integran.

Para amar Navarra hay que sentir obligatoriamente que esta tierra esta viva y que vive gracias a sus costumbres, su cultura, su idioma, su historia y las peculiaridades que la hacen diferente y única. También se puede vivir, incluso gobernar, sin amarla pero, si se es honrada, se debería admirar aquellos que la veneran.

Seguramente tú sabes mucho de todo esto, de ser diferente, de costumbres, de idioma y de peculiaridad que te hace sobrevivir no solo al tiempo, te hace adelantarte al mass media que apuesta por Reyes Magos, Papa Noel o Santa Kraus. Es lo que tiene el marketing.

Así que hoy he decidido escribirte en nombre de esta alcaldesa foránea y olvidadiza, negligente y prepotente, insolidaria y torpe, farsa y toca pelotas. A la postre es de lo que se trata en todo momento de mentir, negar, prohibir y poner cuantas trabas se puedan al desarrollo y la reafirmación de la identidad de Navarra en general y de Iruñea en particular. Y a fe que esto sabe hacerlo mucho mejor que el solicitar los permisos legales para áticos particulares.

Estarás acostumbrado a recibir miles de cartas en euskera, la lengua de los navarros desde la Ribera a la Sakana, del Baztán a Iruñea, desde Tierra Estella a la Montaña, desde Aralar a las Bardenas, pidiéndote miles de pequeños regalos y grandes sueños, estarás mas acostumbrado a cartas personales en las que cada cual pide para si aunque espero que esta tierra nuestra no haya perdido la solidaridad que le caracteriza y continué pidiendo para los demás, cartas de gente mucho mas joven que yo en su mayoría si bien es bueno llegar hasta aquí, después de haber cumplido muchos años, y seguir creyendo en Olentzero. Es bonito.

Estos días, me imagino, estarás asistiendo entre socarrón y enfadado al follón que esta peculiar alcaldesa esta organizando en la capital de Euskal Herria intentando, como antes lo han hecho con la ikurriña o el euskera los de su camada, que no salgas a sus calles, que no vuelvas a ser la ilusión de muchos y que muchos de sus sueños queden abortados al no poder entregarte la carta en mano.

Yo te pediría que me dediques unos minutos a esta que solo quiere pedirte perdón en nombre de los muchos navarros, en concreto de Iruñea, que tienen por desgracia tener a semejante personaje en lo mas alto del consistorio, que vuelvas a llenar sus cartas de ilusión y orgullo por ser tan navarros en tanto a los otros, aquellos que solo apuestan por sueños extraños y extranjeros, les llenes de lo mejor que sabes hacer, de carbón.

Para ella, para esta alcaldesa foránea y toca pelotas lo mejor que le podrías enviar es un billete de ida hacia cualquier parte pero lejos… hasta tú tienes que aprender que hay casos imposibles y este es uno de ellos.

Querido Olentzero este año nos volveremos a ver la noche del 24 en Euskal Herria en general y en Navarra en particular, en Navarra en general y en Iruñea en particular y este año también volveremos a esperar que nuestras cartas y nuestros deseos se cumplan aunque algunos les joda.

Hator, hator etxera, hator, hator Euskal Herrira.

Zorionak eta urte berri on denori.