La Coordinadora Nacional de Mujeres Indígenas denunciará en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) "la grave situación que viven en México las integrantes de los pueblos originales, especialmente en relación con la salud materna y reproductiva, derivada de la falta de recursos gubernamentales destinados a ese rubro".

Un grupo de representantes de la coordinadora acudió a la Cámara de Diputados, donde las legisladoras panistas Evangelina Pérez y Margarita del Sagrado Corazón Chávez, integrantes de la Comisión de Asuntos Indígenas, expresaron su respaldo a las integrantes de dicha organización, quienes hicieron hincapié en que el género femenino es objeto de violencia intrafamiliar, torturas y violaciones en la República Mexicana.

A su vez, Martha Sánchez Néstor, indígena guerrerense, dio lectura a la Declaración del cuarto Encuentro Continental de Mujeres Indígenas de las Américas, celebrado en Lima, Perú. En el documento se demanda a los países latinoamericanos respetar el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el cual tiene que ver con los derechos humanos y las libertades fundamentales de los pueblos indios.

El resolutivo manifiesta el repudio a las leyes de privatización del agua y la explotación indiscriminada de los recursos naturales. En el documento se exige a los gobiernos programas de compensación social por los daños al medio ambiente, rechazo a la persecución de líderes y autoridades indígenas y el desconocimiento de los planes Puebla-Panáma, Colombia y Cocalero, así como del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el Area de Libre Comercio de las Américas y los pactos Andino y Amazónico (corredor biológico mesoamericano).

"Denunciamos -manifestó Martha Sánchez- la actitud racista y discriminatoria de los estados de nuestra América, porque siguen violando sistemática y reiteradamente nuestros derechos y libertades fundamentales, por lo que exhortamos a la implementación urgente de medidas en relación con el convenio 169 de la OIT y que se instrumente en el seno de éste un espacio de interlocución directa de los pueblos indígenas y las mujeres para monitorear y vigilar su cumplimiento."

En relación con México, las integrantes de la coordinadora anunciaron que se presentarán en la tercera sesión del foro permanente para cuestiones indígenas de la ONU, a realizarse durante mayo en Nueva York, donde demandarán al gobierno de Vicente Fox el incremento del presupuesto para la salud, porque la tasa de mortalidad materna en las zonas indígenas es tres veces mayor a la nacional.

Libni Iracema Tircio Chautla, tlapaneca de Chilapa, Guerrero, insistió en la gravedad de las condiciones sociales en que se desarrollan las indígenas:

"Vivimos en una represión constante contra las mujeres, porque no hay un interés del Estado para atendernos; no hay un real compromiso para respetar las culturas indígenas; es inexistente el reconocimiento en nuestro arte, y la militarización en las comunidades indígenas sigue en aumento."

Demandó a todos los sectores sociales del país transformar la conciencia nacional para aceptar la pluriculturalidad del pueblo de México, y señaló la ausencia de los órganos de gobierno en el tema de la violencia contra las indígenas.

Sobre el particular, Zoila Hernández, del poblado de San Isidro Vistahermosa, Oaxaca, quien acudirá a Nueva York para denunciar su caso, relató que en su comunidad priva la violencia contra el género femenino: "Yo me atreví a denunciarlo y por eso me secuestraron y me torturaron. Me llevaron a un panteón y me dieron una pala para cavar mi fosa, advirtiéndome que si continuaba ahí, en ese lugar que ya conozco, me van a enterrar".