Argentina: Bienes naturales y modelo productivo; San Juan
minero de aguas turbias
Silvio Luna
ACTA
Ciudadanos
organizados por la protección del medio ambiente, siguen dando batalla contra
este despojo de recursos naturales y enriquecimiento de unos pocos en perjuicio
de todos. La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) sanjuanina es una
activa militante contra estas políticas de saqueo y expoliación que llevan
adelante empresas trasnacionales con el visto bueno del poder político.
Para que no se crea que la explotación minera es un hecho consumado con la
complicidad de todos los sanjuaninos, militantes de diversas organizaciones
populares en defensa del medio ambiente resisten el saqueo y denuncian la
contaminación.
No aparecen en ningún medio y no es casualidad, de eso se encarga el monopolio
de medios que maneja la gestión del gobernador José Luis Gioja. El ninguneo.
Pero es imposible tapar el sol con las manos, y el tiempo dará la razón a
quienes concientes de que hay que defender la tierra para las futuras
generaciones, marchan contra este vaciamiento organizado.
Algunos datos
La minería a cielo abierto en el país es sinónimo de saqueo. En el caso
particular de esta provincia para entender cuales son "los grandes beneficios"
que dejan estas empresas, no hace falta bucear muy profundo, algunos datos y
conceptos así lo revelan:
- Las empresas mineras contribuyen sólo migajas al Estado Provincial (comparado
con lo que se llevan), con escasas retenciones, sin impuestos, y múltiples
beneficios impositivos.
- Las regalías que aportan estos capitales (en su mayoría canadienses,
estadounidenses y británicos), alcanzan el 3%. En otros países superan el 35 por
ciento.
- Gozan de reintegros por las exportaciones, se les solventa combustible y
energía eléctrica subsidiada.
- A cambio de esos "beneficios" realizan donaciones, financiación de pequeñas
obras, auspicios de eventos, todo marketing.
- Hablando de permisividades, en San Juan estas empresas tienen la venia
oficialista para empapelar la ciudad con carteleria que los señala como
poseedores de normas ISO en el cuidado de medio ambiente, toda una ironía.
- Estas explotaciones en Argentina configuran una entrega, pues el Estado en sus
diversas formas es cómplice de esta extracción indiscriminada de recursos
naturales no renovables de valiosa importancia geoestratégica.
- La mano de obra ocupada (que no supera los mil puestos de trabajo), representa
un ínfimo porcentual en el índice general de ocupación.
- No sólo se extrae el oro, también lucran con explotación de otros valiosísimos
minerales. Y sigue la lista.
Resistiendo esta fabulosa transferencia de recursos, compañeros y compañeras
pertenecientes al "Movimiento No a la Mina", "Ongamira Despierta", entre otros
que se reúnen todos los martes en las plazas principales de la ciudad de San
Juan, se plantaron este 20 de noviembre frente a la Legislatura Provincial y el
Frente Cívico, para mantener vivo el rechazo, el repudio, para seguir
manifestando que no queremos ser espectadores de este saqueo, para señalar a los
responsables de un futuro San Juan contaminado.
Concientizar a la ciudadanía sobre las irreversibles consecuencias de esta
actividad contra natura, es el mas digno de los objetivos. Así lo revela el
mensaje: "Si a la vida, al agua pura, a la tierra; no a la minería contaminante
del aire, el oro es solo un negocio para las empresas mineras; la
responsabilidad es del Estado que permite que consuman y agoten nuestra fuentes
de agua matando nuestras economías regionales; las mineras ya derritieron Toro
1, Toro 2 y Esperanza, Ley de Protección de Glaciares Ya".
Estos ciudadanos quieren, queremos, dejar a nuestros hijos una provincia con un
medio ambiente sano con ese elemento vital que naturalmente fluye del reservorio
natural cordillerano (fuente de vida para este Valle de Tulum), no esa imagen
gris matizada por socavones, áreas muertas, flora y fauna desvastada.
Cabe consignar que la CTA San Juan es una cotidiana participante en la
construcción de este movimiento de resistencia generalizada al saqueo de la
explotación minera a cielo ambiente que contamina el agua y el medio ambiente y
está volando a diestra y siniestra la cordillera.
Ley de glaciares
Esta ley (vetada por la presidenta Cristina Fernández), dejó al desnudo los
peligros de la explotación minera.
Fue lamentable la situación vivida en estos días por los legisladores nacionales
por San Juan. Casi se convierten, sin quererlo, en artífices de la defensa del
agua y el medio ambiente, al votar recientemente a favor de la Ley de Protección
de Glaciares. Luego vino la rectificación lógica, los representantes del pueblo
sorprendidos en su buena fe "no se habían dado cuenta que esta norma entorpecía
obras conjuntas con el vecino país de Chile".
El gobernador sanjuanino, señalado como el principal interesado en presionar a
la Presidenta de la Nación para que vetara esta ley, tuvo que salir a justificar
y excusar a sus legisladores. Pues lo más grave no era precisamente el riesgo
que corrían esas "obras publicas" con el vecino país, sino que la Ley de
Glaciares (aprobada por diputados y senadores), establecía claramente la
necesidad de: "… preservar los glaciares y su ambiente, como reservas
estratégicas de recursos hídricos y proveedores de agua, acompañada de un punto
crucial: la estricta prohibición de "la exploración y explotación minera o
petrolífera" en la zona de las fuentes de agua congelada,… mas clarito, le
echamos agua.
Este episodio desnudó el peligro real que corre nuestro medio ambiente por la
explotación minera contaminante. En ese contexto el Jefe de Gabinete, Sergio
Massa, admitió que "gobernadores de la zona cordillerana han manifestado su
preocupación con lo dispuesto por la norma sancionada" porque afectaría
inversiones y puestos de trabajo.
El único recelo de estos gobernadores es que tienen en sus provincias
millonarios emprendimientos mineros como el de Veladero-Pascua Lama.