Marcha del jueves 9 de junio de 2005. Hebe de Bonafini
 
  Hebe de Bonafini: Como siempre, la Plaza es hoy diferente. Todos los jueves tengo que decirlo. Siempre vienen compañeros. Hoy tenemos a Juan Larrat, un compañero de Neuquen, que hace más de sesenta días que está en huelga junto a sus compañeros. El nos quiere contar qué es lo que pasa.
 
Juan Larrat: Buenas tardes. Nosotros venimos desde muchos kilómetros. La idea es poder comentarles que sí, que hace diez meses que estamos en conflicto por la salud, que hace 60 días que estamos en huelga, que este mes y el mes pasado, como represalia, Jorge Sobisch, que intenta ser presidente de este país y que es un hijo dilecto de Menem, nos contestó con balas y represión a todos nuestros pedidos de audiencia. Nos han pegado en la calle y lo último que hicieron fue descontarnos de nuestro salario; muchos compañeros hoy no tienen para subsistir y (por eso) estamos haciendo una olla popular frente al Hospital, porque no tenemos cómo solventar todas las dificultades que tenemos. Nosotros agradecemos esta posibilidad de comunicarnos con ustedes, porque decimos que estamos defendiendo más que nuestro salario: estamos defendiendo un sistema de salud que hasta hoy es gratuito, igualitario para todos los compañeros que están empobrecidos en nuestra provincia y ojalá que en todo el país en algún momento tengamos un sistema así. Nosotros vamos a seguir hasta las últimas consecuencias defendiendo este sistema. Lo que también necesitamos es una colaboración para un fondo de huelga, hay unos compañeros que están allí con una alcancía y a todo aquel que pueda colaborar, así sea con una moneda, lo vamos a agradecer muchísimo, porque, insisto, es para la olla popular que estamos llevando adelante frente a nuestro Hospital. Muchas gracias.
 
H.B. : Los compañeros de Neuquen, que como respuesta han recibido palos y balas, están luchando por algo que nos corresponde a todos, que es una salud igualitaria y gratuita. Así que, desde aquí, como sabemos que nuestros discursos salen por internet y son muy leídos, queremos decirle a todo el país que Sobisch, que quiere ser presidente, lo único que tiene de bueno es eso que sabe hacer: pegar, balear a la gente, tirarle gases para que no reclame ni exija. Así que ya sabemos qué basura es Menem y ahora ya sabemos qué basura es Sobisch.
 
Hablemos ahora de lo que pasó en Cuba, de esa reunión maravillosa en la que tuvimos la suerte de participar, sobre la Operación Cóndor. Sabemos que el Cóndor sigue volando sobre esta Latinoamérica y que el Cóndor vuela cuando se siguen muriendo niños de hambre y cuando hay trabajadores presos por pedir trabajo, cuando hay compañeros a quienes se les aplica un Código que nadie va a cumplir porque es un miserable Código. Ese Cóndor que sigue volando hace que se mueran en este país cien niños de hambre por día, y en un país tan rico como éste, que está sembrado casi todo y que tiene vacas para todos, no se pueden seguir muriendo los niños de hambre. Esto nos preocupa y lo mismo la situación de los jubilados.
 
Estamos desamparados. La tercera edad, o la cuarta, como la quieran llamar, está desamparada. Casi no hay lugares donde nos atiendan y desamparados porque tenemos unas pensiones miserables. Y un gobierno que no se ocupe y se preocupe de los viejos y los niños no puede hablar de democracia. Por más que nosotros apoyemos al Presidente, algunos proyectos y algunas cosas que se están haciendo, tenemos que seguir criticando que no se ocupen de los niños ni de los viejos, por lo tanto mientras no haya un proyecto donde los niños coman y los viejos puedan vivir y no subsistir, seguiremos hablando de que no hay democracia. La votación de octubre no es la democracia, es más de lo mismo. Es más de los mismos tipos, es más de la misma gente y es más de mucho fascismo que quiere seguir gobernando.
 
Gracias.