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La Fogata con las Madres

 

Editorial de ¡Ni un paso atrás! Programa del 4/12/2003

Latinoamérica para sus pueblos

Los pueblos de Latinoamérica soportan similares condiciones, circunstancias, contexto, que los igualan, que los reconocen hermanos, que los generalizan. Historia y presente de explotación y masacres, y sueños socialistas en el destino que miran esos pueblos a los ojos.

Este año o vez, las Madres nos convocan a su Marcha de la Resistencia número veintitrés, bajo la consiga "No al pago de la deuda externa, por la unidad latinoamericana". Las Madres advierten que las exigencias fondomonetaristas resultan decisivas en la conformación del complejo escenario en el que sobreviven los pueblos latinoamericanos, desde el país más al sur de América del norte hasta el barrio más austral de la patagonia. ALCA y Fondo Monetario contra patria y socialismo.
No hay posibilidad de patria sin socialismo. No hay salida para América latina, negra e india cruza con los restos idiomáticos de España y Portugal, si la apuesta política del continente opta por entregar el liderazgo de los nuevos tiempos a las burguesías autóctonas, que de nacionales sólo tienen el documento de identidad. El sistema de poder, explotación y dominación no distingue por la nacionalidad de sus subordinados: es el capitalismo y su maldita sociedad de clases.
De allí que la lucha de clases no sea una fórmula teórica carente de sentido histórico a esta altura de los hechos, sino exactamente lo contrario. No ha pasado a ser una cuestión secundaria en los conflictos y planteos políticos. Sigue siendo la lucha entre clases contrapuestas la contradicción principal de las sociedades. De su permanente desarrollo y resolución depende la continuidad de la historia y los cambios en la vida que devengan de ella.
Cuando hablamos de unir Latinoamérica estamos queriendo decir unir los pueblos latinoamericanos: los campesinos con los obreros, los sin trabajo con los sin tierra y sin techo, los cocaleros con los bolivarianos, los maestros y científicos cubanos con los indígenas de Perú y Ecuador, los rebeldes chilenos y colombianos con las Madres de Plaza de Mayo. Nos cuidaremos muy bien de no juntarnos ni un poquito así con nuestros explotadores locales, no pocas veces cómplices y aliados del imperialismo.
Pero no dejaremos de advertir, que es indispensable la unidad de nuestros pueblos, la coordinación de nuestras luchas, porque el enemigo principal que enfrentamos es el guerrero imperialismo norteamericano, que tiene similares planes de opresión y crueldad armada para todos nuestros países, sin discriminación de cultura, historia o identidad. Colombia será cualquier barrio del suburbio porteño si se profundizara la agresión militar norteamericana; Brasil sin tierra será el Chapare cuando los yanquis obliguen al sucesor de Sánchez de Lozada a erradicar los cultivos de coca; si un golpe de estado desalojara a Chávez en Venezuela, la gesta del 19 y 20 de diciembre argentino habría retrocedido varios pasos atrás.
Por eso, otra vez, junto a las Madres, en su vigésimo tercera Marcha de la Resistencia, para hacer de Latinoamérica el gran continente de paz y socialismo que los vastos pueblos que la componen se merecen y ansían.

Conducción: Luis Iramain
Columnistas: Oscar Palacios, Demetrio Iramain, Inés Vázquez, Marisa Gallego
Producción: Lucila D'Onofrio, Gerardo Nielsen