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ALCA

28-11-2002
Cambios en el entorno de la lucha

Fidel Vascós González

Un año ha transcurrido entre el Primero y el Segundo Encuentro Hemisférico de Lucha contra el ALCA. En el contenido de los debates del actual II Encuentro, que tiene lugar en el Palacio de las Convenciones, se destacan dos aspectos que han modificado significativamente el entorno continental. Uno es el cambio de estrategia para implantar el ALCA por parte del gobierno de Estados Unidos; el otro, el vertiginoso ascenso del movimiento social de los pueblos latinoamericanos.
Cuando la administración norteamericana lanzó el ALCA en 1994, concebía su implementación de manera simultánea en todos los 34 países convocados. La oposición que este engendro anexionista ha promovido, está obligando a un cambio en la estrategia inicial. Ahora se ve más claro que los arquitectos imperiales están acentuando la conclusión de convenios bilaterales de EE.UU. con países aislados y con subregiones del continente. Ante la posibilidad de que la fecha del 2005 esté muy cerca para concluir el proceso de integrar el Área de Libre Comercio de las Américas, desde Alaska hasta la Tierra del Fuego, ya no se aspira a que todos los países latinoamericanos se incorporen al unísono en el convite imperialista. Ahora conciben avanzar país por país para, al final, concluir con los mismos objetivos trazados al inicio. Así, EE.UU. anunció la próxima firma de un tratado de libre comercio con Chile y, posteriormente, con la región centroamericana.
A su vez, los movimientos sociales de lucha contra el ALCA han ido fortaleciendo sus coordinaciones para la actuación. Uno de los ejes alrededor del cual tiene lugar este robustecimiento es la convocatoria a consultas populares sobre la aceptación o no del ALCA. La más significativa de esta consigna tuvo lugar en Brasil, donde un plebiscito voluntario alcanzó la participación de más de diez millones de ciudadanos, el 98% de los cuales se manifestó por el NO. Es de destacar los foros de reflexión y la movilización masiva en las calles de Quito en protesta por la reunión de ministros del ALCA celebrada a principios de este año en esa capital.
A ello se suman las recientes victorias en las elecciones presidenciales de Lula en Brasil y Lucio Gutiérrez en Ecuador, así como, antes, la disputa por la Presidencia en Bolivia del líder indígena Evo Morales.
Especial incidencia en el fortalecimiento del movimiento popular ha tenido el desastre económico, social y político de Argentina, el cual demostró a las claras el fracaso del neoliberalismo.
El cambio en la estrategia del imperio para intentar pasar el ALCA, el ascenso del movimiento social y el apoyo popular manifestado en las urnas a Lula, Lucio y Evo Morales, como antes había ocurrido con Hugo Chávez en Venezuela, constituyen nuevos elementos positivos en la lucha de los pueblos latinoamericanos contra el engendro neocolonial. Ello determina la introducción de consecuentes ajustes en la estrategia de las organizaciones populares del continente, ratificando sus principios esenciales, ante los retos que se avecinan en el año 2003, específicamente durante el segundo semestre, con la reunión de la Organización Mundial de Comercio en Cancún, y la reunión ministerial del ALCA, en Miami.