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Latinoam�rica
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Las tres banderas de Pando
Sol de Pando | Datos & An�lisis
En Pando se dirime el porvenir de Bolivia. El 10 de agosto del 2009 flamearon
en la naciente Comunidad Intercultural "Bernardino Racua" las banderas
republicanas del nuevo Estado Plurinacional.
El pasado 10 de agosto se produjeron en el Departamento de Pando dos actos
simb�licos que marcan un hito en la historia agraria boliviana. Los municipios
de Santa Rosa (en la provincia Abun�) y Nueva Esperanza (en la provincia
Federico Rom�n), fueron el escenario de los primeros asentamientos
interculturales enmarcados en el Programa de Constituci�n de Nuevas Comunidades
en Pando, programa que a su vez forma parte del Plan Nacional de Distribuci�n de
Tierras y Asentamientos Humanos, que es la herramienta con que el Gobierno del
presidente Evo Morales ejecuta una Nueva Pol�tica de Tierras en Bolivia.
Las nacientes comunidades interculturales en Santa Rosa del Abun� y Nueva
Esperanza, se hallan en dos de los siete municipios de Pando donde se ha
proyectado asentar un total 3.000 familias campesinas, provenientes del todo el
pa�s, que soliciten tierra fiscal para vivir y trabajar en ella.
Como se sabe, el Estado boliviano es due�o y se�or, en representaci�n y bajo
vigilancia de la sociedad boliviana, de todas las tierras fiscales que hayan
podido ser inventariadas dentro el territorio boliviano (inventarios que se
triplicaron de manera transparente en la actual gesti�n con relaci�n a reg�menes
pasados). La poblaci�n de Bolivia, a trav�s del Estado, tiene derecho a acceder
�sin m�s tr�mite que su necesidad� a m�s de 2.3 millones de hect�reas de
tierras fiscales disponibles para su distribuci�n, en los departamentos de
Pando, La Paz , Beni y Santa Cruz. Este patrimonio de los bolivianos est� bajo
la transparente protecci�n de la Ley 3545 a trav�s del Registro �nico Nacional
de Tierras Fiscales.
Estrategia amaz�nica
"Esto que el presidente Evo Morales nos ha encomendado realizar aqu� en Pando no
es un simple traslado ni solamente una rutinaria distribuci�n de tierras"
�explicaba el ministro de la Presidencia Juan Ram�n Quintana cuando inauguraba
la comunidad intercultural "Bernardino Racua" en el municipio de Santa Rosa del
Abun�. "Nuestro Presidente nos ha ordenado, nos ha instruido, nos ha conminado
a desarrollar en la regi�n amaz�nica del pa�s toda una estrategia de
recuperaci�n territorial y conservaci�n de la biodiversidad poblando todas las
tierras productivas en este hermoso para�so con familias bolivianas que
necesitan un espacio propio para vivir dignamente".
Con aquella explicaci�n, el Ministro de la Presidencia sintetizaba la compleja
acci�n fundacional que el naciente Estado Plurinacional de Bolivia viene
desarrollando en su territorio amaz�nico. Se trata de una estrategia integral
que, seg�n inform� la viceministra de Desarrollo Rural Teresa Morales, involucra
al menos a 14 instituciones p�blicas dependientes de seis ministerios. Los
principales responsables de esta estrategia son el viceministro de Tierras
Alejandro Almaraz como operador t�cnico-jur�dico, y el ministro Quintana como
operador estrat�gico-institucional.
Calendario demorado
El marco estrat�gico que el Ministerio de la Presidencia dise�� para
viabilizar la Nueva Pol�tica Agraria, asume que un eficaz plan de distribuci�n
de tierras, al implicar la constituci�n de nuevos asentamientos humanos, pasar�
ineludiblemente por un nuevo ordenamiento territorial, es decir nuevas gestiones
territoriales y medioambientales capaces de generar polos de desarrollo en estas
zonas olvidadas de la vieja Rep�blica. Por eso es que cuando se habla de tierra,
se habla tambi�n de territorio.
As� pues, los asentamientos de las nuevas comunidades interculturales no se
produjeron de la noche a la ma�ana, mucho menos al calor del clima electoral.
"Este plan se inici� al d�a siguiente de la posesi�n del presidente Evo Morales.
Se ha cumplido ya una primera etapa con el saneamiento y la identificaci�n de
tierras fiscales, que fue resistida con toma de instituciones, asaltos y
amedrentamientos contra el Inra, y cuando empezamos a planificar la distribuci�n
de tierras disponibles, quisieron frenarnos con la masacre de Porvenir. Nos han
demorado el calendario y ahora nos acusan de cohecho electoral", comenta Juan
Ram�n Quintana, a tiempo de informar que en la pr�xima etapa se proceder� a
consolidar los asentamientos mediante la ejecuci�n de importantes proyectos
agr�colas y agroforestales.
Si es cohecho electoral que el Fondo Productivo Social (FPS) haya priorizado
durante la �ltima gesti�n la aprobaci�n y ejecuci�n de m�s de 170 proyectos s�lo
en Pando como nunca antes de la historia, si es cohecho electoral la creaci�n de
un Comando Amaz�nico que permite a las Fuerzas Armadas de Bolivia contribuir en
la lucha contra la pobreza rompiendo con un pasado antidemocr�tico como el que
tiene atrapados a los militares de Honduras, si es cohecho electoral que Entel
haga una interconexi�n entre las comunidades interculturales y el mundo que les
rodea, entonces el Estado en Bolivia no tiene raz�n de ser para aquellos que
siguen creyendo que la vida de los pobres no debe valer m�s que un voto.
Planificando la vida
El proceso de constituci�n de Asentamientos Humanos responde a una planificaci�n
transparente de distribuci�n de tierras, respetando las aptitudes de uso del
suelo para un aprovechamiento sostenible y comunitario de los mismos, en torno a
proyectos productivos con rentabilidad progresiva.
Es un proceso racionalmente organizado en las siguientes fases:
Formulaci�n de Planes de Ordenamiento Territorial que articulen la
distribuci�n de tierras con los asentamientos humanos, en coordinaci�n con
entidades de gobierno y entidades privadas vinculadas al desarrollo rural.
Formaci�n de Consejos Departamentales de Coordinaci�n con las
organizaciones sociales del campo y comunidades organizadas sin tierras o con
poca tierra, en torno a los cuales se pueda promover consensos sobre criterios
de selecci�n de beneficiarios con mayor racionalidad y equidad social y
territorial.
Formaci�n de un Comit� T�cnico Interinstitucional de Coordinaci�n, con
car�cter de obligatoriedad entre Ministerios y Viceministerios involucrados en
esta tarea.
Orientaci�n informativa y educativa en las comunidades con necesidades o
demandas de tierras (en el mismo lugar de origen), donde se realice un trabajo
de base, de organizaci�n conjunta del proceso de traslado y construcci�n del
nuevo asentamiento que permitan un efectivo ejercicio del control social y un
ejercicio pleno de los derechos individuales como colectivos.
Participaci�n de autoridades departamentales y municipales, y de
organizaciones locales en el proceso de construcci�n del nuevo asentamiento
humano, especialmente en los lugares donde hay voluntad pol�tica de respaldar
estos procesos.
Registros t�cnicos
Por razones hist�ricas obvias, Pando es una prioridad en esta nueva pol�tica
agraria impulsada por la Ley 3545 de Reconducci�n Comunitaria. Hasta agosto del
pasado a�o se terminaron de distribuir 738.946 hect�reas de tierra fiscal
disponible a 58 comunidades campesinas pandinas, sobre un total de 1�445.196
disponibles, de las cuales sobran 706.250 hect�reas , que es la tierra
disponible donde se ejecuta la actual creaci�n de nuevas comunidades
interculturales ocupando apenas 208.500 de esas hect�reas.
Los nuevos asentamientos deb�an iniciarse el pasado a�o, pero circunstancias
como la masacre del 11 de septiembre retrasaron el cronograma.
Ser�n cuarenta nuevas comunidades interculturales que se asentar�n en siete
municipios de las provincias Abun� (Santa Rosa), Nicol�s Su�rez (Bella Flor),
Manuripi (Puerto Rico y Filadelfia), Federico Rom�n (Nueva Esperanza y Santos
Mercado) y Madre de Dios (El Sena).
Los beneficiarios son campesinos sin tierra que iniciaron los tr�mites de
dotaci�n a mediados del a�o 2007, inscribi�ndose en el Registro �nico Nacional
de Beneficiarios (RUNB) que guarda datos completos y actualizados de los pueblos
y comunidades ind�genas, campesinas y originarias sin tierras o que las poseen
insuficientemente.
Las solicitudes son colectivas, canalizadas mediante las organizaciones
comunitarias reconocidas constitucionalmente.
Un derecho abierto
"Nadie est� siendo obligado a migrar a Pando o a cualquier otra zona donde haya
tierra fiscal disponible. Son solicitudes que hemos recibido y que estamos
atendiendo y atenderemos gustosos por que es lo que manda nuestra nueva
Constituci�n", afirma el viceministro de Tierras Alejandro Almaraz Ossio, el
principal operador t�cnico-jur�dico de este proceso agrario, junto con el
ministro de la Presidencia Juan Ram�n Quintana que es el operador
estrat�gico-institucional del Programa.
En efecto, la dotaci�n de tierras fiscales (es decir de propiedad estatal) para
beneficiar a trabajadores agr�colas y comunidades ind�genas que no poseen ese
bien capital, es una obligaci�n gubernamental que ya fue definida en 1996
mediante la Ley Inra; y se la aplica con m�s vigor a�n desde el 2006 cuando se
aprueba la Ley de Reconducci�n Comunitaria. La nueva Constituci�n vigente desde
enero del 2009, institucionaliza esta pol�tica de modo integral en su art�culo
395:
"Las tierras fiscales ser�n dotadas a ind�gena originario campesinos,
comunidades interculturales originarias, afrobolivianos y comunidades campesinas
que no las posean o las posean insuficientemente, de acuerdo con una pol�tica
estatal que atienda a las realidades ecol�gicas y geogr�ficas, as� como a las
necesidades poblacionales, sociales, culturales y econ�micas. (�)".