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Argentina, la lucha continua....

�El juicio de Campo de Mayo?

Desde los medios de comunicaci�n se ha presentado el proceso por el asesinato de Floreal "Negrito Avellaneda" y por el secuestro y tortura de su madre, Iris Pereyra de Avellaneda, como el "juicio de Campo de Mayo".  Se calcula que por all� pasaron m�s  de 5000 detenidos- desaparecidos.  Una vez m�s parece hacerse presente la intenci�n de llevar a los tribunales algunos casos paradigm�ticos y dan por cerrada la cuesti�n.

Campo de Mayo

Campo de Mayo est� ubicado dentro de lo que fue la zona cuatro que inclu�a cerca de una decena de partidos de Buenos Aires: San Miguel, Vicente L�pez, Tres de Febrero, Pilar, Escobar, Tigre, San Fernando, General San Mart�n, Exaltaci�n de la Cruz, Z�rate, Campana y San Isidro. La zona 4 no tuvo subzonas sino �reas.


Riveros

El control de todas las �reas recay� en el Comando de Institutos Militares, que reun�a todas las escuelas de "formaci�n". El general Santiago Omar Riveros, hoy sentado en el banquillo de los acusados, estuvo cargo de la zona desde septiembre de 1975 hasta los primeros meses de 1979.

En el �rea 470 que correspond�a a lo que hasta 1994 se conoci� como General Sarmiento y hoy equivale a San Miguel, Malvinas Argentinas y Jos� C. Paz se asentaba la guarnici�n de Campo de Mayo, una enorme franja militar de 5000 mil hect�reas. Desde 1976 hasta 1980, funcionaron all� cuatro centros clandestinos de detenci�n tortura y muerte: El Campito o Los Tordos, Las Casitas o La Casita, el Hospital Militar y la Prisi�n de Encausados.

El Campito

Ese campo de concentraci�n se ubicaba en la zona conocida como Los Tordos, de all� proviene su otra denominaci�n. Estaba entre el pol�gono de tiro y el aer�dromo de Campo de Mayo. Las instalaciones estaban constituidas por tres edificios: uno de chapa y dos de material. No hab�a ba�os en ese lugar pero s�, tres salas de tortura y un sal�n destinado a la enfermer�a. Los detenidos eran alojados en el edificio de chapa, que antes hab�a servido como caballeriza.


Croquis- El Campito

Los secuestrados que pasaron por all� estaban encapuchados y con las manos atadas con soga por delante del cuerpo. Cuando llegaban, les asignaban un n�mero: esa era su nueva identidad. As� los llamaban sus torturadores. Los detenidos eran ubicados en pabellones de acuerdo a la importancia que los genocidas que le otorgaban como bot�n de guerra, clasificaci�n que se derivaba de su pertenencia a determinada organizaci�n pol�tico- militar. De acuerdo a las instalaciones- que fueron demolidas entre 1982 y 1983-, se calcula que el Ej�rcito pod�a albergar a alrededor de 200 detenidos en forma simult�nea.

Hospital Militar de Campo de Mayo

El Hospital Militar funcion� como maternidad clandestina para prisioneras embarazadas provenientes de los centros clandestinos ubicados en Campo de Mayo as� como tambi�n de campos de concentraci�n que funcionaban en las proximidades de la dependencia. Las mujeres eran llevadas all� cuando estaban pr�ximas a la fecha del parto: eran ingresadas como "NN" a trav�s del Pabell�n de Epidemiolog�a y alojadas all� con los ojos vendados y atadas a las camas, con custodia permanente. Despu�s de verificar su estado de salud, a menudo se les inyectaba suero para acelerar el trabajo de parto. En algunos casos, se les practicaban ces�reas hasta un mes antes de que el embarazo llegara a t�rmino. Si se trataba de un parto "normal", el beb� se quedaba dos d�as con la madre. Si hab�a nacido por ces�rea, el reci�n nacido permanec�a con ella hasta cinco d�as. Despu�s era robado y su madre, regresada al infierno del campo de concentraci�n.


Bianco

Los partos se produc�an en el servicio de Ginecolog�a y Obstetricia del hospital, que estuvo a cargo del ya fallecido m�dico militar Julio C�sar Caserotto entre enero de 1977 y diciembre de 1983. Tambi�n fueron se�alados como responsables de la maternidad los m�dicos Atilio Bianco y a Agatino Di Benedetto, quien tambi�n fuera el primer interventor del Policl�nico Alejandro Posadas, hospital que funcion� durante la �ltima dictadura militar como centro clandestino de detenci�n, tortura y exterminio


Di Benedetto

La Iglesia, en relaci�n directa con la dictadura militar, jug� su rol en la apropiaci�n de ni�os y ni�as nacidos en el Hospital Militar de Campo de Mayo. De hecho una de las nenas apropiadas fue entregada a trav�s del Movimiento Familiar Cristiano. Adem�s, m�dicas y enfermeras confirmaron la presencia de monjas de la congregaci�n de Cristo Rey, quienes atend�an a las secuestradas que hab�an sido llevadas all� a dar a luz y que permanec�an tabicadas y atadas.

Los responsables de los campos de concentraci�n

El responsable del Campito fue el teniente coronel Jorge Vosso mientras que el de Las Casitas fue hasta 1977 el coronel Fernando Verplaetsen, uno de los genocidas que est� siendo enjuiciado, y despu�s de esa fecha, el coronel Nedo Otto Cardarelli. El comandante de gendarmer�a Dar�o Correa estuvo a cargo de la Prisi�n de Encausados y Ram�n Posse, del Hospital Militar hasta 1977.

Campo de Mayo, ejemplo de impunidad

Campo de Mayo fue de uno de los centros clandestinos m�s importantes que funcionaron durante la dictadura. A pesar de que son cientos los represores procesados por los miles de cr�menes cometidos all�, menos de una decena de ellos est� bajo arresto domiciliario y un par, en c�rcel com�n.

Se calcula que por all� pasaron cerca de 5000 detenidos- desaparecidos, cifra aberrante y similar a la que se estipula por la Escuela Superior de Mec�nica de la Armada (ESMA). De los ni�os que nacieron en cautiverio, s�lo seis fueron recuperados.

A 33 a�os del golpe genocida y a casi seis de anuladas la leyes de Obediencia Debida y punto Final, la justicia reci�n est� juzgando a seis genocidas por s�lo dos casos. Este desguace de las causas contra los genocidas reproduce y es funcional a la impunidad. A este paso y con este dise�o jur�dico, los testigos deber�n relatar una y otra vez el horror. Adem�s, deber�n pasar por la humillaci�n de los jueces, erigidos en verdaderos verdugos, como sucedi� con Iris Pereyra de Avellaneda y Arsinoe, su cu�ada. �Es este el juicio por Campo de Mayo?

Exigimos juicio y castigo a todos los genocidas.  Justicia por todos los compa�eros

Fuente: lafogata.org

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