VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Argentina: La lucha continúa

Villa 31: Un grito contra la indiferencia

RAMA - INDYMEDIA

En 70 años de historia, lucha, discriminación, desalojos y abandonos, la Villa 31 sufrió cambios poblacionales y demográficos. Esta mañana un grupo de vecinos de la Villa 31 y 31 bis cortó la autopista Illia, cuya construcción entre los años 1994 y 1996 se realizó a base de desalojos violentos, motivo por el cual hoy la Villa se encuentra dividida en dos: la 31 y la 31bis.

Si bien sus demandas fueron históricamente desoídas, salvo en pequeños casos vinculados a maniobras electorales, el malestar en la villa se profundizó este año con la llegada de Mauricio Macri a la Jefatura de Gobierno, quien incluso en su campaña prometió la erradicación de esta

Pero no fue la primera vez que las Villas 31 y 31bis se vieron amenazadas: hace tres años proceso de especulación inmobiliaria, con el fuerte aporte de capitales internacionales, volvió sus apetencias sobre las tierras de la Villa 31 y a la necesidad de su desalojo, tanto por el alto valor actual que tienen sus más de 15 Ha. como por el discriminatorio estigma creado sobre sus habitantes pobres. La faz visible y pública de una de las inversiones previstas para la zona de Retiro, es de 480 millones de dólares (Puerto Madero II) a través de un consorcio financiero integrado por: la empresa privatizadora de todos los aeropuertos del país (Corporación América S.A que incluye en parte capitales italianos y otros europeos); Banco Macro Bansud S.A. (capitales nacionales en el exterior y se dice que también participan capitales norteamericanos) y una constructora (Fernández Prieto) que ha construido más de 200.000 m2 desde 1996 en Puerto Madero I (datos: Diario Clarín, agosto y septiembre de 2005, también en Clarín y La Nación en Diciembre del 2005). Sin embargo, no hay estudios sobre capitales financieros actuantes en el tema de inversiones inmobiliarias de esta escala.

Es muy frecuente escuchar en los medios masivos comentarios adversos de la Villa 31, en donde permanentemente se habla de proyectos de obras insinuando el desalojo total o parcial de las aproximadamente 5.000 familias que residen en las villas 31 y 31bis. Sin embargo poco de hablar de proyectos de urbanización que contemplan la permanencia de sus habitantes, manteniendo parte de sus estructuras y modificando aquellas construcciones precarias. Proyecto que mejoraría la calidad de vida de sus vecinas y vecinos, integraría a la villa a la ciudad y acabaría con gran parte de la conflictividad actual (no solo generada por problemas habitaciones y condiciones habitaciones, sino también por los prejuicios culturales a los que cada habitante es sometido cuando, por ejemplo busca un trabajo, educación o atención institucional fuera de la villa).

A principios de la década del '70 la Villa 31 albergaba alrededor de 16.000 familias (entre 45.000 y 60.000 habitantes) organizados en una activa Coordinadora villera (que agrupaba a las villas de la ciudad), de lucha por la tenencia de la tierra, vivienda y radicación como barrio urbanizado. En esa época, la Villa 31 era proveedora de múltiples oficios y en particular, mano de obra bien capacitada para el sector de construcciones. Los habitantes contaban con promesas oficiales y planes de radicación, a través de un proyecto urbano elaborado por la Universidad de Buenos Aires, Facultad de Arquitectura.

Durante la dictadura militar (1976-83) hubo una erradicación compulsiva y de violencia feroz contra los habitantes, siendo su gente trasladada por la fuerza en camiones militares fuera de los límites de la ciudad-capital y abandonados a su suerte en el conurbano o trasladados a los ciudadanos extranjeros a países limítrofes. Dicha expulsión compulsiva fue frenada por un recurso de amparo promovido por los "curas villeros", con sentencia favorable de un juez en 1979, que permitió dejar 46 familias (aproximadamente 200 habitantes). Sus viviendas fueron destruidas por las topadoras municipales. Los pocos vecinos subsistieron durante años sin siquiera tener agua corriente, teniendo que hacer colas con baldes para juntar agua fría en una canilla pública, sin luz ni gas.

Hacia 1985, con la vuelta de la democracia la villa volvió a poblarse. La superficie que ocupa la Villa 31 es de 15.25 hectáreas, que en su mayoría pertenece a la ONABE (Organismo Nacional de Bienes del Estado), dependiente del gobierno nacional. Solo una parte pequeña pertenece al Gobierno de la Ciudad, otra a la ex/ YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales) hoy privatizada por Repsol/España y otra fracción de tierras son del ferrocarril.

Hace ya algunos años existe un proyecto de Urbanización de la Villa 31 diseñado por un grupo de Arquitectos de la Universidad de Buenos Aires. Un proyecto de urbanización sin desalojos que convertiría a la Villa 31, en el "Barrio Mugica" tomando el nombre deseado por varias personas que habitan la villa inspirado en la figura de Carlos Mugica. Dicho proyecto originalmente fue diseñado para la Villa 31, es decir la parte más consolidada ubicada entre la autopista y el puerto. Dicho proyecto, que incluso fue finalizado y cuyos planos están disponibles, contemplaba a mas de 2.500 familias y dichas obras tenían un costo aproximado de 30 millones de pesos, en ese entonces.

Este proyecto declarado de interés para la Ciudad por la Legislatura porteña a mediados del año pasado y premiado en la Bienal Iberoamericana de Urbanismo de Chile en 2002. Desde mediados del año pasado diversos grupos de vecinos empezaron a relacionarse con los arquitectos buscando, por un lado, actualizar y extender el proyecto para que incluya también a la Villa 31bis, e incorporar cuestiones sociales y culturales que complemente el trabajo técnico realizado por los arquitectos para que también atienda demandas específicas del barrio.

Hace más de un año se creó la mesa de trabajo de las villas 31 y 31 bis, integrada por el arquitecto Javier Fernández Castro, secretario académico de la facultad y director del proyecto, junto a diversas organizaciones y vecinos del barrio. Con el apoyo de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y el visto bueno de la Comisión de Vivienda de la Legislatura, el proyecto muestra la suficiente solidez como para que, al menos, sea recibido por el Ejecutivo de la Ciudad. Sin embargo la Jefatura de Gobierno de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se niega a contemplar esta alternativa.

Los vecinos movilizados en la villa pretenden constituirse en un barrio más de la ciudad, no excluido como una villa miseria y discriminados por su pobreza como ciudadanos, tal cual como les fue prometido en forma reiterada por diversos gobiernos municipales a lo largo de los últimos 40 años. También piden participación en la elaboración de un plan integral, que incorpore a la totalidad de la Villa (la 31 y 31bis) con sus mas de 5000 familias, que la habitan y construyen cotidianamente un capital social, que no encaran ni tienen en cuenta las políticas públicas municipales.

Los abandonos y ataques sufridos por esta Villa frecuentemente discriminada y criminalizada, pero que en cuyo interior habitan miles de vecinas y vecinos trabajadores, encierran una larga historia de 70 años de lucha, por los cuales las 9 horas que permaneció la autopista cortada en la pasada jornada merece una atención mayos que el simple titular referido al "Caos de transito". Desde la 31 sus voces merecen ser escuchadas, y su historia contemplada.

7 décadas pasaron ,
del primer asentamiento,
con obreros inmigrantes ,
que acamparon frente al puerto

7 décadas pasaron,
y miles de campesinos ,
con sus sueños arribaron,
a la villa de Retiro

7 décadas pasaron,
y una cuantas topadoras,
lastimaron nuestra historia ,
…y quieren volver ahora

7 décadas pasaron,
y nos siguen engrupiendo…

7 décadas pasaron….

¡Y SEGUIMOS RESISTIENDO!

Murga los Guardianes de Mugica (1999 – 2008).

Fuente: lafogata.org