VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Argentina: La lucha continúa

Emotivo homenaje a las Abuelas de Plaza de Mayo de Córdoba

Katy García
Prensa red

Se realizó en el Teatro Real y se reconoció la labor que Irma Ramaciotti y Sonia Torres vienen realizando para devolverles la identidad malversada a los más de 400 nietos que aún faltan recuperar. Entre ellos, los suyos. Se recordó la memoria de Otilia Lescano, la otra fundadora de la filial Córdoba de las Abuelas.

"El ovillo se escapó, tejimos un grito, hicimos redes, devanamos el pasado, desenredamos la duda, estaremos juntos…"

Entre todos te estamos buscando, es la consigna que aún sigue vigente para este puñado de Abuelas que lleva 30 años de lucha en la búsqueda de sus nietos. Desde que decidieron organizarse, momentos después de producidos los secuestros de sus hijos e hijas han recuperado 88 de los más de 500 bebes apropiados por los captores.

Irma Rojas, Abuela de Plaza de Mayo de la regional Buenos Aires, estuvo presente en el homenaje. Su historia es reciente porque hace tres meses, recuperó en Córdoba a su nieta Belén.

"Para mí fue una noticia hermosa, un nacimiento. Afortunadamente la criaron personas de buena fe", cuenta. Belén siempre supo que era hija adoptiva y sus padres la alentaron a buscar su verdadera identidad.

Belén, es hija de Horacio Altamiranda y de Rosa Luján Taranta, oriundos de Florencio Varela, provincia d e Buenos Aires, secuestrados en la madrugada en el mes de mayo de 1976.

Tenían dos hijos y Rosa estaba embarazada de siete meses. "Recuperarla, es la alegría más grande que tuve y no pierdo la esperanza y la fe de que los vamos a encontrar a todos", confía. Cientos de historias similares aún faltan por descubrir.

Para este aniversario los organizadores, miembros y amigos de los organismos de Derechos Humanos prepararon un conjunto de actividades artísticas que se desarrollan en el transcurso de esta semana.

El acto central se realizó en la noche del jueves en el Teatro Real y tuvo como protagonistas centrales a Irma Ramaciotti y Sonia Torres, fundadoras junto a la fallecida Otilia Lescano, de la regional Córdoba de las Abuelas de Plaza de Mayo.

Néstor Pérez, fue el encargado de leer un texto que narra la historia de las Abuelas y de coordinar las actividades en el escenario. "En la pavorosa oscuridad de la represión política, se sumergieron como una lucecita expectante y escrutaron con el pecho presuroso cada rincón de la maquinaria de exterminio estatal. Pasearon sus energías por las entrañas de un régimen preñado de impunidad. De aquél 22 de octubre de 1977, pasaron tres décadas en las cuales el país pasó del genocidio al imperio de la república", afirmó.

"Su lucha se hizo emblema, ese emblema alumbró futuro y volviendo a unirlas con quienes siempre fueron suyos: cada uno de los nietos recuperados, descubre la impostura y grita la vigencia de una lucha inagotable", agregó.

Mientras, se mostraban imágenes documentales, para dar cuenta del frío del horror que "hiela la sangre", con el teatro en penumbras, se dejaban caer cientos de copos de algodón sobre los presentes. La Banda Inestable, con su música, permitió que la mayoría de los presentes pudieran distenderse, tragar saliva y continuar.

En primera fila estaban Irma Ramacciotti, Sonia Torres, Emi D’ambra, Nelly LLorens, Negrita Sciuto, Paula Chabrol, Isolda Viñeira y tantas otras madres que también son abuelas. Adriana Pusitano, docente y escritora habló en nombre de la Escuela de Letras y reivindicó la tarea de Irma, su pasión por la poesía y la escritura como sostén en tan duros momentos.

Luego, Alicia la tercera de sus seis hijos, leyó uno poema que a su criterio sintetiza "la esencia de tu vida".

"Todo el dolor sufrido, desposado del alma asoma en tu mirada
Valiente y luchadora trataste tu camino, el del amor los hijos y los afectos
Sin dejar la alegría de vida compartida y aún luchas y sigues
Y ayudas a los tuyos aunque vivir te cueste porque el cuerpo te duele más la razón te dice que la vida es servicio y servir si que puedes".

Pero había otra sorpresa para Irma. Le editaron su obra en un libro.

A Sonia le tenían reservada otra, ligada a la danza y a la la interpretación teatral. Pero la mayor alegría fue cuando apareció uno de su nietos al que no veía hace tiempo.

Los nietos hablan

Tres de los nietos recuperados valoraron el tesón y el trabajo desarrollado por las Abuelas para que sus propias historias encontraran sentido y verdad. "Abuelas abrió puertas en los más remotos lugares del país llevando su lucha inclaudicable'.

'Hoy somos 88 los nietos que recuperamos nuestra identidad", dijo Marías Belén Altamiranda, la última nieta recuperada en Córdoba.

"Me enteré que era hija de desaparecidos cuando tenía 12 años, sin embargo el proceso de recuperar mi identidad es algo que sigo haciendo día a día y este es el mismo camino recorrido por muchos chicos que buscan su identidad biológica", testimonió Astrid Patiño.

'Con aquellas pequeñas cosas' -tema de Joan Manuel de Serrat-, como fondo, Gustavo Godoy, presentó un video documental sobre la vida de Otilia Lescano de Argañaraz. "Otilia hizo de la causa común una herramienta de resistencia política. Hasta los últimos días demostró un compromiso irreductible y cerraba los puños con gran vigor. Me hubiera gustado conocer a esta mujer", expresó.

Carlos Orzaocoa, amigo de la familia y compañero de militancia de sus hijos, recordó que en 1974, tuvo que comunicarle que su hijo César había caído en combate. "Ahora me quedo tranquila, porque César murió como vivió, como eran sus ideas, sus sueños, sus esperanzas", le había dicho. Luego dos de sus hijas, Mirta y Bety, agradecieron el homenaje y reivindicaron su lucha.

También se proyectó una animación que narra una historia de pérdidas y reencuentros y sintetiza la trayectoria de lucha de Abuelas. Después vivieron más sorpresas, regalos, manifestaciones de afecto y la música de Rally Barrionuevo que le puso el broche de oro el encuentro.

Se recibieron numerosas adhesiones y se leyó un correo electrónico de Joan Manuel Serrat.

"No quiero perderme la conmemoración de este trigésimo aniversario y como no puedo estar entre vosotras, mando mi más cariñoso y solidario abrazo a quienes tanto hacen para mantener a flote nuestra dignidad personal y colectiva. Para la Abuela Otilia que me abrió las puertas de su casa en mi regreso a la Argentina y me hizo conocer de su luchas: por estos días la estaremos recordando de manera especial".

Marcelo Yornet, en nombre de la agrupación Hijos agradeció a las Abuelas por todo lo aprendido. '... muchas veces les dijeron, olviden a sus hijos, olviden a sus nietos y nosotros hemos aprendido que el olvido no es una elección y que ante la injusticia no cabe el silencio. Cuando se conquista justicia, es para todos', expresó para luego manifestar la gratitud de la sociedad 'Gracias por la valentía incomparable, porque en el inicio del terror genocida salieron a caminar y a girar en ronda para que miraran los que no querían ver, y para que escucharan los que no querían oír'. A la vez, reconocieron el trabajo realizado por los equipos técnicos en la ardua tarea de buscar, averiguar, investigar, gestionar recursos y difundir lo realizado.

Al acto asistieron la Rectora de la Universidad Nacional de Córdoba, Carolina Scotto, el viceintendente electo Carlos Vicente, el Director de Derechos Humanos y secretario Adjunto de la CTA-Córdoba, Luis Baronetto y Nando Fernández, entre otros dirigentes.      


Fuente: lafogata.org