VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Latinoamérica

Cruzada diplomática de Estados Unidos en España

Patricio Montesinos
Cubadebate
 
En menos de seis meses cuatro enviados del régimen norteamericano de George W. Bush han visitado España con el objetivo expreso de intentar presionar a las autoridades de este país, lo que medios políticos califican de cruzada diplomática e injerencista de Washington en Madrid.

El más reciente viaje de los representantes de Bush lo cumplió en las últimas horas Shirin Tahir-Kheli, titulada asesora de la Secretaria de Estado norteamericano Condoleezza Rice para la Reforma de la ONU,  según reseñaron medios de prensa españoles.

Las mismas fuentes aseguraron que el tema central abordado por Tahir-Kheli  con sus anfitriones en Madrid fue las reticencias de Washington hacia la propuesta del nuevo Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el cual el régimen de Bush pretende se integre y funcione acorde a sus intereses imperiales, y le permita tener poderes punitivos y capacidad sancionadora contra los países del Sur, y los que se les enfrenten.

La subalterna de Rice no disimuló siquiera para decir ante la prensa que Estados Unidos desea imponer una serie de criterios para la selección de los países que deberán conformar el Consejo de Derechos Humanos, y evitar así que algunas naciones puedan ser  miembros de ese nuevo órgano de la ONU, que deberá reemplazar a la desacreditada Comisión de Derechos Humanos.

La cruzada diplomática emprendida por Washington  en Madrid no se ha ceñido solamente a presionar a España para que adopte una postura a su favor en relación con el Consejo de Derechos Humanos, sino también a convertir al país europeo en punta de lanza contra Latinoamérica.

Así lo hizo saber también sin tapujos el senador republicano de la Florida Mel Martínez en otra muy reciente visita a España, durante la cual "sugirió" al gobierno del presidente José Luis Rodriguez Zapatero como debería actuar con respecto a algunas naciones de America Latina, entre ellas Cuba y Venezuela.

Como si España fuera una república bananera o un apéndice de Estados Unidos, Martínez se inmiscuyó en sus asuntos internos, como lo hace muy a menudo el embajador norteamericano en Madrid, Eduardo Aguirre.

El viaje del senador de la Florida a España siguió a otros con idénticos propósitos del Secretario Adjunto de Estado norteamericano para Latinoamérica, Thomas Shannon, y Caleb McCarry, nombrado por Bush en el 2005 Coordinador para la Transición Política en Cuba.

Shannon y el interventor McCarry en sus respectivas visitas por separado a Madrid, en enero último  y octubre del año pasado, tampoco escondieron sus deseos de hacer de España un muro de contención contra el avance de la izquierda en America Latina, y en sus declaraciones públicas se esmeraron en atacar especialmente a Cuba y Venezuela.       

Fuente: lafogata.org