El temible comisario del gobierno dictatorial de Alfredo Stroessner, Lucilo Benítez, insiste en dejar su prisión. Él presentó un nuevo escrito ante la Justicia. Lo hizo ante un Tribunal de Apelación.

El detenido y condenado por violación de los derechos humanos, se siente agraviado por la decisión de la jueza Ana María Llanes, quien le negó su pedido de libertad condicional. Solicita a los camaristas que se vuelva a considerar su solicitud y se dicte una decisión que le favorezca.

"La resolución apelada agravia mi derecho elemental de reintegrarme al seno de mi familia, para el proceso de mi readaptación social. Ya he soportado privación de libertad por más de 17 años. No consideran el perjuicio psicológico, físico, moral, económico y de orden familiar que me sigue produciendo ese castigo...", apunta en una parte el reo.

Su castigo. El también conocido como "Kururu Pire" está sentenciado a 25 años de cárcel por la detención ilegítima y homicidio de Mario Raúl Schaerer Prono, a quien lo asesinaron el día 6 de abril de 1976, en Investigaciones, luego de crueles sesiones de torturas. La sentencia de 25 años contra Benítez fue ratificada en tres instancias judiciales. El mismo "Kururu Pire" también está castigado por la desaparición de los hermanos Benjamín y Rodolfo Ramírez Villalba, en el mismo departamento policial. Otro proceso criminal que involucra a Benítez, es acerca de la detención ilegítima y torturas de Alberto Alegre Portillo.

Benítez era el brazo ejecutor de Pastor Coronel y sometía a sus víctimas a los vejámenes terribles, según los testimonios que se encuentran en instancias judiciales.

"Kururu Pire" dice que con la privación de su libertad no se cumplen los ideales, ni los propósitos de la readaptación de una persona a la sociedad, luego de haber cumplido con tantos años de prisión.

Chivo expiatorio (?). "Mis perseguidores me han elegido como chivo expiatorio para cobrarse con creces el pecado social cometido por el anterior sistema de gobierno; que un ayer pudo haberles producido algún perjuicio. En ese afán, y con verdadero ensañamiento, acometen su venganza contra mi persona y familia, dando la impresión de que no tienen el coraje o el valor moral de perseguir a quienes debieran, y no como el caso que nos ocupa, descargar su ira contra el indefenso...", apunta el escrito del comisario Benítez.

Los informes arrimados a la jueza Llanes daban cuenta de que él no se encontraba psicológicamente en condiciones de ser beneficiado con la libertad condicional, porque necesariamente debe ser sometido a un examen psicológico y psiquiátrico.