VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Argentina: La lucha continúa

Lo que no se dijo del fiscal de la causa, Raúl Pedro Perotti
La condena al 'Turco' Julián

CORREPI

El pilar fundamental en la propaganda de DDHH del gobierno kirchnerista ha sido la condena discursiva a los crímenes cometidos en la dictadura y la nulidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final; en este marco, el viernes se conoció la primera condena a uno de los represores del autodenominado 'Proceso de Reorganización Nacional', Julio Simón (a) El Turco Julián, ex policía federal que fue sentenciado a 25 de prisión. Tanto los abogados del CELS que representaban a la familia Poblete, como la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Horacio Verbitsky y el Secretario de DDHH Luis Eduardo Duhalde aparecieron en los medios dando a la sociedad un mensaje unívoco de gran triunfo, señalando que ésta era la primera condena de muchas por venir. Y gracias a K, por supuesto.

Lo que decidieron no comunicar estos personajes fue que existía un sumario abierto al fiscal de la causa, Raúl Pedro Perotti, por denuncias de participación en la dictadura, de haber presenciado torturas, por haber obrado como fiscal acusador, abogado defensor y juez en las causas llevadas adelante en La Pampa contra los compañeros detenidos en rigor de la Ley Antisubversiva 20.840. Lo que tampoco difundieron fue la forma agresiva en que el representante del ministerio público interrogó a los sobrevivientes de los campos de concentración que declararon como testigos, al punto de despertar las sospechas de los compañeros de la AEDD y otros organismos, que así llegaron a averiguar quién era este fiscal. La información mencionada fue publicada en el matutino Página 12 y está en conocimiento del Centro de Estudios Legales y Sociales.

A pesar de que la denuncia fue ampliamente difundida por organizaciones de DDHH, políticas y sociales que convocaron, el mismo día de la lectura de la sentencia, a un escrache al funcionario en la puerta de los tribunales de Comodoro Py, ninguno de los medios presentes se apartó un centímetro de la historia oficial, ninguno de los que celebraban el fallo hicieron mención alguna a la negra historia del fiscal, que en vez de inquirir sobre las torturas cometidas por Julio Simón se interesaba en preguntar a los testigos sobrevivientes si alguno de ellos se había 'quebrado' y colaborado con los militares.

Es bueno que el Turco Julián fuera condenado a 25 años de prisión. Bueno sería que justamente este individuo, que durante el menemismo se dedicó a recorrer canales de televisión oficiando como 'columnista' de Mauro Viale y otros por el estilo para vanagloriarse de su 'apostolado contra la subversión' y explicando que 'la orden era matarlos a todos', no fuera condenado. El Turco Julián fue de los primeros represores a los que sucesivos gobiernos fueron soltando de la mano, a medida que dejó de ser útil a los intereses de los poderosos, y se convirtió en una molesta evidencia de carne y hueso de los métodos que tuvieron que emplear durante la dictadura. Pero el silencio de los grandes festejadores públicos de la condena, reproducido por los medios, desnuda el circo de sirvientes que le lavan la cara al gobierno represor de turno. Mentiras en la información que recibe el pueblo. El juicio al "Turco Julián", botón de muestra de la política de DDHH del gobierno democrático y constitucional de Néstor Kirchner.

Fuente: lafogata.org