Argentina: La lucha continúa

Después de estos 15 meses de lucha en busca de verdad y justicia por nuestros pibes asesinados, por los que tienen pesadillas de esa noche terrible, y por todos, seguimos de pie y unidos, sobrevivientes, familiares y amigos junto a las organizaciones que nos apoyan.
Con la destitución de Aníbal Ibarra, ganó la verdad. La fuerza de la verdad. No ganó el macrismo (ya que fue votada por legisladores de muy diferentes ideas), no ganó la vergonzante actitud de Baltroc, no ganó el doble panquecazo de Romagnoli. Ganó la verdad y la movilización. Este triunfo que es pequeño, y que no nos engañamos, no termina con la impunidad reinante, instala sin embargo el antecedente de que por una vez el responsable político de una masacre dá cuentas de sus actos. Nada más y nada menos. Por eso al poder le preocupa tanto, por eso operó el pacto de impunidad Kirchner/Fernández/Ibarra.

Perdió la mentira. La mentira repetida día a día por casi todos los medios, la mentira del golpe político institucional supuestamente buscado por los familiares, omitiendo decir que existen 26 procesados por la justicia incluyendo empresarios, policías y funcionarios pùblicos municipales. Omitiendo nuestros numerosos pedidos de indagar penalmente, además de al propio Ibarra, a funcionarios del SAME, el cementerio de Chacarita y la Morgue, y determinar los dueños de la empresa off shore que arrendaba el complejo (hotel, estacionamiento, local).
Quedó muy clara la connivencia político empresarial; quedó bien claro que nunca atendió el jefe político los alertas de lo que estaba ocurriendo, quedó demostrado que los responsables del área solamente tenían el mérito de ser íntimos del jefe de gobierno y de la senadora Vilma Ibarra; quedó claro que es imposible para un gobernante ser ajeno a lo que estaba ocurriendo.
Porque también quedó demostrado con sobradas pruebas que el sistema de emergencias no funcionó, que el caos que se vivió en los hospitales fue indescriptible; en los traslados, en la cantidad de chicos fallecidos por entrar más de una vez, porque se demostró que esa experiencia de deambular de hospital en hospital durante hasta 2 días, no fue una cuestión aislada sino totalmente generalizada, e inhumana. Porque después de ese deambular, al encontrar a los chicos, tuvimos que despedirlos a cajón cerrado por el estado de sus cuerpos.
De esta violencia indescriptible sobre los cuerpos y sentimientos de quienes ya no están, y de nosotros mismos, es responsable político Aníbal Ibarra.

Quedó claro en el Juicio Político, todo lo que venimos denunciando en nuestros documentos, y más: por ejemplo que Cromagnon no era uno más entre los boliches de Buenos Aires, sino uno de los seis principales, por tanto debió ser doblemente puesto en la mira para inspeccionar y clausurar. Por ejemplo, quedó claro que el Director Operativo del SAME, Soloaga, decidió la concurrencia masiva de ambulancias recién una hora después de la masacre; porque estuvo claro que no había una norma básica de emergencia pese a los antecedentes de AMIA, Embajada de Israel y Lapa.
Quedó claro que se privó a muchos sobrevivientes de atención pre hospitalaria sencilla como la provisión de oxígeno. Según las autopsias, muchos de los fallecidos no tenían un valor mortal de monóxido; la falla estuvo en la falta de atención
Quedó claro, por ejemplo, y tomando las palabras del diputado Devoto, que ante la catástrofe ocurrida, el clasificar a todas las víctimas con código rojo, no fue para cuidar la vida de nuestros pibes, sino una "decisión política brutal" cuyo principal interés fue preservar la imagen política del gobierno y en particular, la de Anìbal Ibarra.
"La perversa lógica de la decisión fue ‘limpiar’ lo más rápido posible la zona para evitar que las desgarradoras escenas que recorrían el país y el mundo, siguieran apareciendo en las cadenas de televisión. (…) Esta decisión política (…) significó en la práctica trasladar el desastre a los hospitales".

Ante estos y otros datos reflexionamos: fue más importante salvar la imagen gubernamental que las vidas de los chicos.
De todo esto, de los hechos, prácticamente no informaron los medios masivos de comunicación. La ciudadanía debió enterarse de los motivos de la destitución, por nuestras campañas de esclarecimiento.

En 15 meses no existieron preguntas a Ibarra. Todos los días tuvo un micrófono abierto de televisión para decir lo que quisiera. Y una tribuna en alguna escuela o plaza, aun destituido. Tampoco en su momento, se permitió la re pregunta en la interpelación. Y muchos comunicadores tuvieron palabras agraviantes para nosotros, como por ejemplo quien nos acusó de "lucradores" con la muerte de nuestros chicos.

Ante la necesidad de ocultar hechos gravísimos, los medios comunicaron infamias recicladas permanentemente, como la guardería que nunca existió o el supuesto descubrimiento de la persona que habría iniciado el incendio.

¿Por qué, nos preguntamos, no se investigan las denuncias del periodista Verbitsky acerca de las empresas que construían mediáticamente la imagen de Ibarra, y que actuaron en otros gobiernos anteriores?

¿Por qué no se rinden cuentas ante la existencia de la mayor deuda del Gobierno de la Ciudad originada en la publicidad de los últimos meses del ya suspendido Ibarra, un monto de 20 millones que pagan los contribuyentes?

Es importante que el verdadero progresismo (aquel que quiere llegar a la verdad y se interesa por los hechos, no el que supone que un pasado supuestamente progresista habilita para cualquier accionar en el presente) se informe, que lea todos los testimonios del Juicio Polìtico, incluidos los testigos a favor de Ibarra, que soporte como nosotros los innumerables datos que reafirman una y otra vez que todas las muertes de nuestros chicos, todas, fueron evitables. Por ello hablamos de masacre, no de tragedia ni accidente. Los chicos no murieron para molestar el futuro polìtico del sr "progresista" Ibarra o su alianza con Kirchner, murieron por la "complicidad entre empresarios de la noche y el Gobierno, en un sistema de no control y corrupción estructural, en manos de funcionarios de primera línea, de los que Ibarra era allegado directo y, además, responsable político". Estas son palabras de los fiscales, no nuestras.

Hemos aprendido en estos 15 meses, cuánto se parece el funcionamiento polìtico corrupto, a la lógica empresarial inescrupulosa. Falta de respeto por la vida en Ibarra y Chabán, auto victimización en Ibarra y Chabán. Las últimas declaraciones de este empresario vuelven sobre nuestro dolor e intentan instalar la mentira. De nuevo sugerimos comparar sus declaraciones con las reales pruebas que constan en la causa penal. Todos sabemos ya que Chabán vio la posibilidad del incendio y no hizo nada para impedirlo. Como Ibarra tuvo alertas para cerrar Cromagnon y no lo hizo. Chabán no solamente sabía que el lugar estaba excedido en público sino que èl mismo proponía ese exceso de público, para ganar más. Es por eso que coimeaba policías que están imputados penalmente. Coimas de 100 pesos se llevaron las vidas de nuestros pibes.
En la causa no hay ningún otro testimonio que avale los dichos de Chabán sobre los supuestos jóvenes de short rojo que habrían encendido las bengalas. Nos preguntamos cómo pudo verlos claramente, en medio del humo, con las luces apagadas y mientras huía sin atender a las vìctimas.
Chabán sabía que la puerta señalizada como "salida" con un cartel luminoso, estaba cerrada con candado. Esto provocó que los chicos fueran justamente hacia esa puerta, donde se encontraron con un metro y medio de cadáveres apilados. Tampoco estaban abiertas las otras puertas habilitadas como salidas de emergencia, que dan a Bartolomé Mitre.
Chabán sabía. Ibarra sabía.

¡Qué parecida la actitud de Chabán a la de Ibarra! Qué parecido actúan el poder político y el poder empresarial corruptos!

Por ello, por ese accionar que sabemos no termina en una persona, concluimos que la República de Cromagnon sigue vigente, y se expresa entre otros casos, en las maniobras para que prescriba la causa AMIA y en el estancamiento del caso Mamani, donde la empresa de los patovicas responsables es licenciataria del Gobierno de la Ciudad. A los familiares de AMIA, a la familia Mamani, nuestra solidaridad.

En nuestra pelea contra la impunidad, exigimos la expulsión del gabinete de Telerman de todos los personajes nefastos como Raúl Fernández – jefe de la campaña mediática de Ibarra y ahora premiado con el cargo de Secretario de gabinete de Telerman- y Marta Albamonte. Es impresentable la incorporación de Roy Cortina a este gabinete, y nuestra memoria nos dice que es amigo y pertenece al mismo partido que Norberto Laporta, quien votara en contra de la destitución de Ibarra.

Pelear contra la impunidad de hoy y de siempre, gobierne quien gobierne, es el tributo necesario a 30 años del golpe de estado genocida, uno de los hechos de mayor impunidad de nuestra historia. Por ello hemos estado presentes en el masivo acto del 24 de marzo, un acto que este gobierno que se dice de los derechos humanos, intentó desvirtuar y hasta impedir. Pero no le fue posible. Como familiares, hemos mostrado nuestra tolerancia al aceptar, en el marco de un debate con más de 300 organizaciones, que la consigna de Justicia por Nuestros Pibes no estuviera entre las principales convocantes, aunque sí en el importante documento acordado que se leyó en la plaza, nuestra plaza, la de los que reclamamos y luchamos. Los 30.000 desaparecidos estaban presentes, y sentimos que nuestros pibes también. Porque Cromañon es uno de los nombres fuertes de la impunidad de hoy. Los supuestos familiares y sobrevivientes golpistas marchamos con todos, mientras otros que nos acusaban de autoritarios, como la sra. de Carlotto y algunas de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, intentaron romper el acto del que fueron convocantes. Aun así, con su lamentable actitud, no lo lograron. La marcha fue masiva y el documento denunció como se debe las injusticias de hoy, que es como se honra a quienes lucharon ayer, hoy y siempre.

Es para luchar contra las impunidades de hoy que intentamos el crecimiento de un amplio movimiento anti impunidad, donde invitamos a integrarse a todas las organizaciones y en particular, a familiares de las vìctimas de gatillo fácil, violencia institucional, corrupción empresarial, etc.

A 15 meses, la lucha continúa.
Por eso exigimos:
-         Indagatoria a Ibarra ya
-         Aceleración de los pasos procesales para impedir que prescriba la causa
-         Procesamiento de los responsables del SAME, Chacarita, Morgue Judicial e investigación sobre las empresas off shore
-         Cambios profundos en el gabinete de Telerman
-         Investigación acerca de los fondos utilizados por el Gobierno de la Ciudad para financiar la Campaña Ibarrista ante el Juicio político.
-         Contra todo pacto de impunidad: CARCEL A IBARRA CHABAN Y TODOS LOS RESPONSABLES

LOS PIBES DE CROMAÑON PRESENTES
AHORA Y SIEMPRE  

Fuente: lafogata.org