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Argentina: La lucha continúa
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Separan a policías adictos al gatillo fácil
Diario Río Negro
El titular de la comisaría de la ciudad rionegrina de Cipolletti, Luis Alberto
Aballay, fue separado de su cargo junto con una docena de oficiales, luego de un
operativo que finalizó con un joven herido, víctima del gatillo fácil.
El caso del joven baleado con balas de goma por un policía cipoleño, quien junto
a otros uniformados lo persiguió creyéndolo sospechoso de un delito, desembocó
en el relevamiento de su cargo de un comisario y de los efectivos que
participaron del operativo.
Luis Alberto Aballay ya no es el jefe de la comisaría Cuarta, y en su reemplazo
asumirá el comisario inspector Eliseo Razzari.
El jueves de la semana pasada, el joven Germán Figueroa fue perseguido y herido
en el techo de su domicilio con perdigones de un cartucho antidisturbio que
disparó el sargento Raúl Juárez, imputado -no procesado, al menos todavía- en la
causa que tiene la jueza Alejandra Berenguer.
El secretario de Seguridad y Justicia de Río Negro, Miguel Angel Bermejo, había
estado en esta ciudad apenas se conoció la noticia del suceso con el muchacho,
se entrevistó con la jueza Berenguer y prometió acciones concretas a la madre
del chico, Cristina Asin de Figueroa, al intendente Alberto Weretilneck y a la
presidenta del Concejo Deliberante, Mabel Rigoni.
Y fue precisamente Bermejo quien dispuso el miércoles por la noche, juntamente
con la jefatura de Policía, relevar del cargo al comisario Aballay y trasladarlo
a Viedma.
Más aún. Bermejo y la jefatura resolvieron que la conducción de la seguridad
total de la ciudad recaiga en el Jefe de Zona de la Regional Segunda, comisario
inspector Jorge Villanova, por lo que a él remitirán los jefes de comisarías y
destacamentos del ejido.
Además de las acciones que está llevando adelante Berenguer, Bermejo tomó la
decisión de que se decrete la "suspensión preventiva de los policías que
participaron en el operativo, por haber impartido órdenes o excedido en las que
hubiere recibido, en la investigación interna que lleva a cabo la policía por la
actuación de agentes en el caso Figueroa", según dice un parte oficial difundido
por el Ministerio de Gobierno.
Se deduce que quedan en la mira del poder político y de la propia investigación
interna de la fuerza no sólo los uniformados que el jueves 9 a media mañana
quisieron demorar a Germán Figueroa y a un amigo en la plaza Sarmiento, del
barrio Alanis, lo persiguieron, ya con refuerzos, hasta su casa de calle
Uspallata, entraron y lo hirieron, sino también a los que en la propia comisaría
impartieron órdenes sobre este operativo.
En el trámite interno sólo el sargento Juárez no se hallaba cumpliendo sus
actividades operativas normales en la comisaría Cuarta porque después del
incidente se había acogido al beneficio de sus vacaciones. Ahora, eso volverá
para atrás y tendrá como los otros, la suspensión preventiva.
Juárez designó como su defensor al abogado Gustavo Lucero y se especulaba ayer
con que los demás que tomaron parte directa del operativo también podrían apelar
a los servicios de este profesional.
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