VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Argentina: La lucha continúa

Argentina: centros de tortura y muerte y la detención del represor Taddei en Madrid

Represión de la dictadura argentina

Centros de tortura y muerte â-ª Los detenidos eran vendados, apenas comían y tenían prohibido hablar o escribir â-ª Numerosas víctimas eran asesinadas cuando proporcionaban a la fuerza la información el

El Mundo.es
Madrid.

- La maquinaria de la represión de la dictadura militar argentina de 1976 a 1983 tenía como base para sus crímenes los Centros Clandestinos de Detención. En sus instalaciones, las Fuerzas Armadas y Cuerpos de Seguridad ejecutaba el plan sistemático de desaparición de personas que formaba parte de las operaciones de contrainsurgencia comenzadas pocos años antes, en el marco del llamado 'Operativo Independencia', para eliminar la disidencia política.
Los centros compartían estrictas características de funcionamiento -estaban instalados en lugares secretos y bajo el directo control de la autoridad militar responsable de dicha zona- y sobre todo, un tétrico objetivo: las personas que eran trasladadas a su interior eran sometidas a prácticas degradantes. Los detenidos, cuyos nombres eran reemplazados por un número y una letra, eran vendados por completo, tenían prohibido hablar o escribir, eran aislados en pequeñas celdas llamadas 'tubos' y apenas comían.
Al mando de estos centro se encontraba un 'jefe de campo', que podía ser militar o policía, mayor del Ejército o comisario de Policía; por debajo se situaba el 'grupo de oficiales', que tenía la finalidad de custodiar e interrogar a los detenidos, y por debajo se hallaban los llamados 'grupos de tareas', también llamados 'patotas', que tenían la misión de realizar el secuestro y traslado de los detenidos ilegalmente. Finalmente se encontraban los 'guardias', los cuales también torturaban, abusaban y vejaban a los detenidos.
Estos centros eran coloquialmente llamados 'LRD' (Lugar de Reunión de Detenidos), siempre supervisados por el Ejército. Alcanzaron su macabro auge con la toma del poder por parte del Gobierno militar, dando comienzo a la desaparición de personas mediante la utilización de un plan sistemático de represión en cabeza del poder estatal dominado por las Fuerzas Armadas.
La desaparición de personas presentaba una metodología sistemática, marcada por la procedencia de los secuestradores (Fuerzas Armadas y Cuerpos de Seguridad), la utilización de burdos disfraces y pelucas, el elevado número de personas que formaban el operativo y la ostentosidad del armamento utilizado.
Según se ha recogido en sentencias ya publicadas, sobre hechos similares, todo se respondía a directivas verbales, secretas e ilegales que sustancialmente consistían en detener y mantener oculta a las personas, torturarlas para obtener información y eventualmente matarlas haciendo desaparecer el cadáver o bien fraguar enfrentamientos armados como modo de justificar dichas muertes.
El principal Centro Clandestino de Detención fue la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), en Buenos Aires. Éste funcionaba dentro del 'Casino de Oficiales' y estaba a cargo del Grupo de Tareas, que son los que realizaban las funciones operativas. En él estuvieron retenidas algunas de las víctimas de los vuelos de la muerte, en los que, desde aviones, se arrojaba a los detenidos al mar. En total se tiene noticia de unos 340 centros clandestinos de detención en el país. En Buenos Aires hubo 60 centros, en la provincia de Córdoba 59; y en Santa Fe 22.
Algunos documentos oficiales demuestran la existencia de estos centros, negados por la Junta Militar.

Detenido en Madrid un ex policía argentino acusado de 161 torturas y secuestros en la dictadura militar

En octubre de 1985 se trasladó junto a su familia a España tras ser implicado en delitos

ELMUNDO.ES MADRID

La Policía ha arrestado en Madrid a un ex oficial argentino acusado de cometer 161 secuestros y torturas durante la dictadura militar argentina y sobre el que pesaba una orden de detención de las autoridades de su país.
Según informó la Dirección General de la Policía, se trata de Ricardo Taddei, de 63 años, oficial de la Policía Federal Argentina (PFA) en los denominados Centros Clandestinos de Detención entre los años 1976 y 1979, donde supuestamente ejerció tareas de guardia, secuestró, torturó e interrogó a 161 personas. Sin embargo, medios de comunicación argentinos como 'Clarin' afirman que su nombre es Eduardo Taddei.
El ex oficial ha sido detenido en Madrid por efectivos del Grupo de Localización de Fugitivos en colaboración con Interpol España.
Taddei, sobre el que pesaba una orden de búsqueda de la Justicia argentina, ha sido detenido en la calle de Capitán Blanco Argibay de Madrid.
Este bonaerense de 63 años fue oficial de la Policía Federal Argentina (PFA) en los denominados Centros Clandestinos de Detención, concretamente en los conocidos como 'Club Atlético', 'El Banco', y 'El Olimpo', entre los años 1976 y 1979. En estos centros desempeñó supuestamente tareas de guardia, de secuestrador, torturador e interrogador. Concretamente se le acusa de haber participado como autor en el secuestro y tortura de 161 personas, según se detalla en la documentación enviada a través de los diversos canales internacionales.
Veinte años en España El represor argentino ingresó en la Policía Federal Argentina en 1961, alcanzando el cargo de Principal, similar al de capitán del Ejército o al de Inspector Jefe de Policía en España. Sus destinos estuvieron siempre ligados a los Servicios de Inteligencia, con especialidades en la lucha antisubversiva, dedicada principalmente a grupos de extrema izquierda. En 1976 pasó a ejercer sus funciones en el Comando del Primer Cuerpo del Ejército, ubicado en la Capital Federal, Buenos Aires.
En 1979 se retira de la Policía Federal Argentina y es incorporado al Ejército, con el grado de coronel. Aquí desempeñará también funciones en los servicios de Inteligencia Militar, concretamente en el IN-7, lo que venía a suponer la jerarquía más alta.
Entre las 161 personas que fueron secuestradas y torturadas por el ahora detenido y otros represores se encuentra el empresario Osvaldo Sivak, retenido por dos individuos a punta de pistola el 7 de agosto de 1979. Ricardo Taddei fue involucrado en el crimen como miembro de la banda y dado de baja en su cargo. La causa fue archivada casi de inmediato.
Tras destaparse diversos sumarios en los que resultaba implicado, en octubre de 1985 Taddei se trasladó junto a su mujer e hijo a España. El detenido será puesto a disposición del Juzgado Central de Guardia de la Audiencia Nacional (Madrid).   

Fuente: lafogata.org