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Latinoamérica


 

GOBIERNOS. Dpto. de Estado calificó de pobre acción de Venezuela


Rangel descalificó a EE UU como evaluador de DDHH


El vicepresidente de la República, José Vicente Rangel, desestimó ayer a través de un comunicado el informe del Departamento de Estado de los Estados Unidos que consideró deficiente el desempeño de Venezuela en materia de derechos humanos en lo que va de 2005.
La ONG Washington Office on Latin America denunció "flagrantes disparidades en el tratamiento de Venezuela, Ecuador y Colombia" en el informe y llamó al Departamento de Estado a "redoblar esfuerzos para informar estrictamente" y "minimizar sus prioridades políticas".
El Departamento de Estado anunció en su informe anual de 2005 para 196 países que el gobierno del presidente Hugo Chávez "ha incrementado su control sobre el sistema judicial y que las organizaciones no gubernamentales sufrían amenazas. También cuestionó a Cuba.
El min-Interior, Jesse Chacón, informó que la Armada venezolana patrulla áreas territoriales cerca de la isla de Curazao, donde Marines de EE UU realizan prácticas militares. Dijo que esperan información de esas acciones.

AP/ABN/Agencias/EFE

En América Latina "en general" se respetan los derechos humanos, excepto en Venezuela, Cuba y Haití donde el nivel sigue siendo "pobre", una calificación que también se aplica a algunos estados en México y Brasil, dijo ayer el Departamento de Estado.

"En realidad no existe un solo país con antecedentes perfectos en el mundo", dijo Michael Kozak, subsecretario de Estado interino para asuntos de derechos humanos y laborales en la presentación del informe anual 2005 de la situación de los derechos humanos en 196 países.

En Colombia, donde hay un conflicto armado desde hace cuatro décadas, continúan "los graves problemas", pero el Departamento de Estado hizo notar que el respeto del gobierno del presidente Álvaro Uribe por los derechos humanos "ha mejorado en algunas áreas".

El porcentaje de la participación de las fuerzas de seguridad en el total de abusos fue "bajo" en el 2004, aun cuando algunos miembros de esas fuerzas "continuaron cometiendo graves abusos" incluyendo muertes extrajudiciales y desapariciones forzadas, dijo.

El documento

El informe, que se elabora anualmente por disposición del Congreso, dice que en Venezuela el respeto por los derechos humanos en los últimos 12 meses seguía siendo "pobre" como en el año previo.

El Departamento de Estado señala que el Gobierno del presidente Hugo Chávez "ha incrementado su control sobre el sistema judicial y su interferencia en la administración de justicia" y que las organizaciones no gubernamentales sufrían "amenazas e intimidaciones" de simpatizantes de Chávez.

"En diciembre, la legislatura aprobó leyes que socavan la libertad de los medios, la libertad de expresión, y que en la práctica convierten en delito criminal las críticas al gobierno", dijo.

Posición inmoral

Para no perder la costumbre en la disputa verbal entre EE UU y Venezuela, el vicepresidente José Vicente Rangel rechazó las críticas del gobierno estadounidense al "pobre" desempeño de Venezuela en la defensa de los derechos humanos, a través de un comunicado.

El alto funcionario aseguró que Estados Unidos no tiene autoridad moral para tratar ese tema.

"Su Gobierno está descalificado desde todo punto de vista para hablar de éste tema. El Gobierno que más viola hoy en día los derechos humanos, en su propio país y en el mundo, es el de Estados Unidos, a través del asesinato de miles de personas, niños, mujeres, ancianos, como ocurre en Irak, en Afganistán", replicó.

"El informe sobre derechos humanos elaborado por el Departamento de Estado de Estados Unidos, carece de validez", sentenció Rangel, quien afirmó que se trata de un documento "deliberadamente manipulado".

El funcionario venezolano repudió que Estados Unidos se atribuya el derecho de juzgar al resto de los países del mundo sobre temas tan delicados como el de los Derechos Humanos.

"Es lamentable que una causa de la importancia de los derechos humanos sea objeto de una inócua utilización, con fines vulgarmente politiqueros", refirió Rangel.

Además, señaló a la nación norteamericana de incluso planear "la eliminación física de Jefes de Estado o de dirigentes políticos contrarios a los lineamientos de Washington".

Más seguridad

Por otra parte, Venezuela reforzó la vigilancia aérea y marítima de su territorio tras detectar ejercicios militares de EE UU en Curazao, isla caribeña situada frente a Falcón, informó ayer el comandante de la Armada, Armando Laguna.

El vicealmirante dijo telefónicamente a la cadena estatal de televisión VTV que la movilización militar estadounidense no fue notificada al Gobierno venezolano, "como tradicionalmente ocurre", aunque aseguró que se trata de maniobras rutinarias "y no hay razones para alarmar a la población".

"La situación está dentro de los parámetros legales y normales (...), pero estas operaciones no fueron notificadas al Gobierno; la detectamos y tomamos nuestras previsiones para determinar la intención, pero ellos siempre están efectuando maniobras en las Antillas Mayores", reiteró.

Laguna reiteró que la presencia en Curazao de "marines estadounidenses, aviones de combate y lanchas anfibias no revisten mayor preocupación, pues se trata de labores de rutina de este país en esa zona".

El comandante de la armada venezolana informó que sus "unidades se encuentran en la mar patrullando con toda normalidad y verificando que la situación se encuentra dentro de los parámetros normales y legales".

La embajada de Estados Unidos en Caracas no ofreció comentarios por el momento sobre el caso.

CRÍTICA
La Organización No Gubernamental (ONG) Washington Office on Latin America (Wola) denunció ayer "flagrantes disparidades" de tratamiento en el informe del Departamento de Estado sobre Derechos Humanos y las atribuyó a "las prioridades políticas" del Gobierno de Estados Unidos.
La ONG denunció "flagrantes disparidades en el tratamiento de Venezuela, Ecuador y Colombia" en el informe anual.
WOLA recordó asimismo que la "credibilidad de Estados Unidos en el frente de los Derechos Humanos ha sido dañada por escándalos de tortura y por las políticas de detención aplicadas en Guantánamo".