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Latinoamérica

Un exhorto perdido en el río de la plata    
Argentina reclama información sobre María Claudia García   

Fabián Kovacic
Brecha

¿Una gauchada extraoficial? ¿Una emboscada burocrática? ¿Una mano clandestina que quiere torcer el destino? Quién sabe. Desde hace cuatro meses el trámite de extradiciones por el secuestro en Buenos Aires de María Claudia García de Gelman está parado porque -cuándo no- se extravió un documento, y nadie da razón de lo ocurrido. Fuentes de la cancillería uruguaya aseguran a BRECHA que el exhorto extraviado nunca llegó al Palacio Santos; el resto es misterio.
El 12 de agosto último el juzgado federal a cargo de Norberto Oyarbide envió un exhorto a Uruguay solicitando información sobre los militares involucrados en el secuestro y desaparición de María Claudia García en 1976.
En la secretaría desde donde partió el pedido nunca tuvieron una respuesta sobre los datos solicitados, ni siquiera sobre la ruta seguida por el pedido.
El recorrido habitual en estos casos incluye varias etapas. El juez federal solicita a la Corte Suprema argentina autorización para requerir los datos al Poder Judicial uruguayo. La Corte, tras evaluar el pedido, lo remite a cancillería para que a su vez haga la solicitud ante su par oriental. La cancillería uruguaya entrega a su vez el pedido de trámite a la Suprema Corte de su país y ésta, tras evaluarlo, lo entrega al juez competente en el caso.
Hasta donde pudo averiguar BRECHA, el exhorto de Oyarbide iba dirigido "al juez letrado de primera instancia penal en turno en jurisdicción de Montevideo". Sin embargo, en algún punto del recorrido se perdió el rastro del pedido. El exhorto incluía datos filiatorios de los militares José Nino Gavazzo, Manuel Cordero, Juan Antonio Rodríguez Buratti, Gilberto Vázquez, Ernesto Rama, José Arab y Jorge Silveira, además de los policías Ricardo Medina y José Sande. En el mismo pedido Oyarbide requería la situación judicial de esos militares en relación con causas sobre violación a los derechos humanos radicadas en la justicia uruguaya, y otras causas judiciales civiles, penales o de carácter comercial.
SIN RESPUESTA La cancillería argentina registra como fecha de salida del exhorto el 2 de setiembre de 2005 rumbo a su contraparte uruguaya. "El pedido rebotó y debimos enviarlo a la Suprema Corte uruguaya", aseguró a BRECHA sin más explicación una fuente de la cancillería argentina. Dos meses después reclamaron una respuesta sobre el pedido pero sólo obtuvieron silencio. Este segundo pedido ocurrió una semana después de que el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Duhalde, se presentara ante el juez Oyarbide denunciando penalmente la desaparición de María Claudia y dos semanas después de que la justicia uruguaya clausurara la causa en territorio oriental.
Desde la secretaría a cargo de Duhalde aseguran que, tras la reunión mantenida en setiembre con el secretario de la Presidencia Gonzalo Fernández, "las cosas parecen encaminadas por los carriles presidenciales.
El presidente Vázquez aseguró que hay un interés profundo en llegar al fondo no sólo en el caso Gelman". De esa reunión celebrada entre Fernández y Duhalde surgió la creación de la oficina para esclarecer casos de desapariciones en las dos orillas. Debido a los testimonios de los familiares la carpeta argentina ya cuenta con datos ciertos sobre los argentinos desaparecidos en Uruguay o llevados hacia allí, si bien es un tema que se maneja en estricta reserva.
Allanado el camino entre el poder político para colaborar en el tema, sólo queda cumplir con la vía judicial. Observadores argentinos de la justicia federal reconocen que en general desde el juzgado de Oyarbide hubo inconvenientes de forma con la redacción de los exhortos hacia países extranjeros, como Suiza en el caso de las cuentas bancarias de Carlos Menem.
Sin embargo, esa hipótesis se desvanece toda vez que desde la cancillería argentina se reconoce oficialmente que el documento aterrizó en algún escritorio del Poder Judicial uruguayo.

¿Una causa Orletti?

 El juez Oyarbide tiene a su cargo, además de la causa de María Claudia, la de otros menores cuyos padres fueron víctimas del Plan Cóndor. El expediente tiene puntos de cruce con las causas del Primer Cuerpo de Ejército, que a su vez incluye los casos de Automotores Orletti analizados desde diciembre de 2004 por el juez federal Daniel Rafecas. En los últimos cuatro meses una docena de uruguayos ex detenidos en Orletti y familiares de los desaparecidos en ese centro clandestino de detención pasaron por el tercer piso de los tribunales federales argentinos en el barrio de Retiro. En todos sus testimonios aparece el caso de María Claudia con informaciones parcializadas o menores. Sin embargo, no hay dudas de que María Claudia estuvo en Orletti y fue trasladada a Montevideo donde dio a luz a una criatura.
Esos testimonios decidieron también a la Secretaría de Derechos Humanos a iniciar un expediente interno, que por ahora acumula materiales de archivo sobre Orletti, con miras a iniciar una denuncia penal específica en el caso de María Claudia. "No hay fecha, por ahora solamente estamos recopilando datos", dijeron escuetamente en la repartición. Si se tiene en cuenta que por Orletti pasaron detenidos políticos argentinos, uruguayos, chilenos, brasileños, bolivianos, paraguayos y cubanos, ese nido del Cóndor en la capital argentina amerita un pormenorizado análisis del que pueden surgir inesperadas pruebas contra Gavazzo y compañía.