Latinoamérica

Octubre de 2003, a 18 días de este fatídico mes, el Congreso boliviano aceptaba la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada (GSL) enviada por fax desde el aeropuerto de Viru Viru ubicado en Santa Cruz y asumiría la presidencia mediante sucesión constitucional, el historiador y periodista Carlos Mesa G., quien al día siguiente, ante una multitud de campesinos y el sábado, frente a una multitud de vecinos de la ciudad rebelde de El Alto se comprometía a cumplir con las siguientes demandas: Referéndum para decidir el destino del gas y la convocatoria a la Asamblea Constituyente que se constituirían en la denominada Agenda de Octubre.

Muchos nombres circularon de boca en boca, por los medios de prensa, locales, nacionales y extranjeros, como protagonistas de la segunda eclosión social de este milenio, personajes que gozaron de popularidad meteórica para bien o para mal… así que empezaremos a establecer que fue de la vida de ellos.

Mauricio Cori, ex - presidente de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve), gozo efímeramente de las mieles del poder, pues cada decisión que concernía a la ciudad de El Alto, necesitaba su aprobación; su entorno político se beneficio con pegas (1) en diversas instancias de la administración pública. Las bases alteñas lo sacaron semidesnudo de la sede de la Fejuve, después de propinarle una wask’a (2) con itapallu (3), debido que Cori había cometido la herejía de aceptar un viaje de los cívicos chapacos (4) a los campos gasíferos de Tarija y comprender la necesidad de exportar el gas. Su ingreso a la arena política en las elecciones municipales del 2004, de la mano de la Nueva Fuerza Republicana (NFR), partido que co – goberno con GSL, estuvo signada por el fracaso, apenas obtuvo dos millares de votos.

Juan Melendrez, ex – Secretario Ejecutivo de la Central Obrera Regional (COR), sin penas y sin gloria, estuvo a la sombra de la Fejuve alteña, aceptando los beneficios del poder transformados en pegas en reparticiones públicas. Su protagonismo en las jornadas de Octubre se transformo en famélicos mil quinientos votos en las justas municipales de la ciudad de El Alto.

Roberto de la Cruz, quien fuera acusado de incendiar la Alcaldía alteña en las jornadas de Febrero de 2003, adquirió notoriedad por sus declaraciones incendiarias en Octubre, alcanzo protagonismo nacional, pese a que su estatus sindical no estaba definido, al haber sido expulsado por la Central Obrera Regional (COR) de El Alto, aunque después fue acogido por la Central Obrera Boliviana (COB). Latigazos mediante acepto la candidatura a concejal municipal por el M-17, partido por el fundado, siendo electo. En las jornadas de Mayo - Junio de 2005 sus declaraciones regionalistas en contra de los cambas (5) provocaron airadas protestas en el oriente boliviano, últimamente se encuentra en una florida guerra de piropos con la dirigencia de los movimientos sociales alteños por el asunto del traslado del aeropuerto Kennedy.

Jaime Solares, quién en las jornadas de Octubre comando la protesta social a través de la Central Obrera Bolivana (COB), hizo lo posible por co – gobernar con Mesa, siendo rechazado se dedico a poner zancadillas a dicha gestión, objetivo que se materializo en las jornadas de Mayo – Junio de 2005, con la renuncia del Presidente. Padeciendo de ilusiones democráticas, intento formar una alianza con Felipe Quispe Huanca de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB). La soñada alianza obrero - campesina se frustro porque Quispe no acepto que Solares vaya de candidato presidencial. Ulteriores encuestas darían a Solares el tres por ciento de la intención de voto para las elecciones generales.

La Paz/Chuquiagumarka, 19 de Octubre de 2005.

Notas.-
(1) Eufemismo para definir a una fuente laboral.
(2) Wask’a: palabra aymará que denomina a los latigazos proporcionados a una persona.
(3) Arbusto cuyas ramas provocan escozor, irritación de la piel, es utilizado en la justicia comunitaria para escarmiento.
(4) Gentilicio de los habitantes del departamento de Tarija.
(5) Gentilicio de los habitantes del oriente de Bolivia.

(*) El autor fue ex – Secretario Ejecutivo de la Confederación Universitaria Boliviana.