Prensa Latina

Las organizaciones campesinas de Paraguay presentarán hoy a la Comisión Permanente del Congreso su desacuerdo con el proyecto de ley de reforma de la banca pública que propiciará la participación de privados.

La Federación Nacional Campesina (FNC), al frente de las movilizaciones de los últimos meses, anunció asimismo este fin de semana que estará pendiente del cumplimiento de los acuerdos por parte del gobierno de los reclamos del sector.

El plan gubernamental para la remodelación del sistema bancario nacional incluye en su primera etapa la creación de la llamada banca de segundo piso con operaciones a través de entidades privadas y la fusión de varios bancos públicos.

La reforma, cuyo proyecto quedó congelado en el senado por falta de consenso de los parlamentarios, forma parte de las metas pactadas por el Ejecutivo paraguayo con el Fondo Monetario Internacional en un acuerdo "stand by" por unos 73 millones de dólares.

Representantes de las agrupaciones rurales dijeron a la prensa que discutirán con la comisión parlamentaria sobre los alcances del proyecto oficial y los posibles daños que acarreará a los pequeños productores agrícolas.

Varias organizaciones campesinas y productores de soja elaboraron un documento conjunto que servirá como base para el debate con los legisladores, a partir de las necesidades sociales y financieras del sector, adelantaron voceros del grupo.

Se supone que con el feriado legislativo de dos meses, el proyecto de reforma pase a la agenda de las comisiones del Congreso en marzo, cuando reinicien las sesiones ordinarias con el quórum requerido.

Héctor Cristaldo, presidente de la Coordinadora Agrícola de Paraguay (CAP), indicó que los líderes campesinos entregarán el documento al Senado por mediación del legislador Ronaldo Dietze, con la esperanza de que toman en cuenta sus propuestas.

La Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas, la FNC, la CAP y la Organización Nacional Campesina han ejercido presión desde diferentes instancias para que el congreso y el ejecutivo valoren las iniciativas de los productores y trabajadores agrícolas.

A juicio de la dirigencia rural la proyectada reforma bancaria pone en riesgo la existencia de entidades crediticias estatales que realizan prestaciones al sector, carente de condiciones financieras para afrontar las reglas de los privados.

En medio de la tregua con el gobierno, la FNC anunció que se mantiene alerta ante cualquier incumplimiento de las autoridades de los acuerdos de la mesa de diálogo, activada en diciembre tras la agudización del problema agrario.

Odilón Espínola, secretario general de la agrupación, recordó que el gobierno prometió la entrega en breve plazo de unas cinco mil hectáreas de tierras para familias de los departamentos de San Pedro y Caaguazú.

El obispo de San Pedro, Fernando Lugo, indicó que en las dos próximas semanas retomará las conversaciones con los principales líderes rurales para actuar como mediador ante el llamado gabinete de crisis, encabezado por el vicepresidente Luis Castiglioni.

Dijo que están pendientes una serie de discusiones en busca de propuestas concretas que solucionen los problemas a miles de familias campesinas.