Argentina: La lucha continúa
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Informe de la comisión de la memoria por la tragedia en la
cárcel
"En Magdalena hubo intencionalidad"
La Comisión de la Memoria de la provincia de Buenos Aires presentó a Kirchner el informe sobre el incendio en el penal que derivó en 33 muertes. Según el texto, la tragedia fue una "masacre". El Presidente propuso crear un organismo de seguimiento de la situación en las cárceles.
Página 12
El presidente Néstor Kirchner prometió crear un organismo destinado a
realizar un "seguimiento" de la situación de todas las cárceles del país,
después de recibir un duro informe elaborado por la Comisión por la Memoria de
la provincia de Buenos Aires sobre el incendio de la cárcel de Magdalena. El
informe califica de "masacre" la tragedia ocurrida el 16 de octubre pasado y
concluye que "hubo intencionalidad" en las muertes de los 33 presos. "El horror
de la Unidad Penal 28 no es un hecho aislado e irrepetible, es parte de una
cadena de muerte, tortura, apremios, tratos degradantes, violencia ilegal y
negocios sucios, que la Comisión ha denunciado en su informe de 2004", señala el
texto.
Entre otras irregularidades, la comisión menciona que los guardias
penitenciarios no abrieron una puerta de emergencia por temor a las fugas, que
sólo funcionaban 31 de los 55 extinguidores y que la red de cañerías contra
incendio nunca funcionó porque las bombas no tenían conexión eléctrica.
El informe que le llegó al Presidente consta de 58 páginas divididas en seis
capítulos y de un video con los testimonios de sobrevivientes, testigos e
imágenes que documentan las condiciones en las que se encontraba la unidad 28 de
Magdalena. Se trata de una investigación paralela de la comisión, basada en el
análisis de la causa judicial, el sumario administrativo abierto por el Servicio
Penitenciario Bonaerense (SPB), las visitas del Comité contra la Tortura de
Magdalena y en conversaciones con los presos sobrevivientes y aquellos que
participaron en el rescate de los cuerpos.
"No quedan dudas. La tragedia fue una masacre. Su razón se encuentra tanto en la
actitud del SPB de Magdalena, como en las acciones y omisiones del Estado
provincial", sostiene la comisión. El informe explica que "un grupo de agentes
penitenciarios decide encerrarlos (a los presos del pabellón 16) con un incendio
ya iniciado y resuelve dejar las puertas cerradas, no abrir ningún candado, ni
siquiera el de la puerta de emergencia". "En cambio, hubo represión y balas de
goma para los detenidos de pabellones vecinos que intentaron socorrer a los
presos que estaban muriendo", añade el texto.
"Es verdad, como afirman los agentes en sus declaraciones, que ‘los internos
rompieron instalaciones’. Rompieron paredes y abrieron boquetes en el pabellón
16. Trataban de salvar vidas", señala la comisión. Al hacer mención a la puerta
de emergencia que quedó cerrada, el texto reproduce una frase de un agente
penitenciario que declaró que "si esa puerta se hubiera abierto, las cosas
hubieran sido distintas". "La ley de fugas estuvo claramente por encima de la
defensa de la vida", dice la comisión.
El trabajo también afirma que "las inspecciones y los testimonios aportaron
otros datos significativos: las mangueras de los pabellones no tenían agua y los
extinguidores estaban descargados". Sobre el primer punto, la comisión menciona
un informe de un arquitecto del SPB que revela que "en el gabinete de bombas de
red de incendio de los Módulos de Autodisciplina (pabellones 15, 16, 17 y 18) se
observó la inexistencia de conexión eléctrica alguna". Respecto a los
matafuegos, el jefe de la División Armamento del SPB informó que "el día de la
tragedia en la unidad 28 había 55 extinguidores, pero sólo 31 en
funcionamiento".
La comisión denuncia que "ello se debía a que hubo una reducción considerable
—de un 50 por ciento—, en la orden de compra para la recarga de matafuegos en
todas las unidades y dependencias del SPB".
También se hace mención al alto grado de toxicidad de los gases que despidieron
los colchones que se quemaron dentro de la cárcel. "Recién con fecha 25 de
octubre se declara la emergencia sobre las obras y construcción penitenciaria y
en el marco de ella la cartera de Justicia resuelve cambiar los colchones. Queda
claro que no existía siquiera un obstáculo presupuestario para el cambio de los
colchones de poliuretano requerido por jueces, defensores y organizaciones de
derechos humanos", dice el texto.El encuentro con Kirchner se llevó a cabo en la
Sala de Situación de la Casa Rosada con la asistencia del vicepresidente de la
comisión, el fiscal bahiense Hugo Cañón, Alejandro Mosquera, la monja Martha
Pelloni, Laura Conte, Roberto Cossa y el rabino Daniel Goldman, entre otros. El
Presidente se encontraba acompañado por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández,
y los secretarios General de la Presidencia, Oscar Parrilli, y de Derechos
Humanos, Eduardo Luis Duhalde.
Al término del encuentro, el fiscal Cañón señaló que los miembros de la Comisión
pidieron al jefe de Estado "profundizar" los estudios de esos "crímenes" ante la
falta de investigación por parte del gobierno de la provincia. "Son campos de
concentración las cárceles bonaerenses", advirtió. Reveló además que el
presidente Kirchner les propuso una serie de medidas como la constitución de una
comisión nacional para el seguimiento de la situación en todas las cárceles del
país. Añadió que por este episodio "no se produjo la renuncia de un solo
funcionario político" y "sólo fueron pasados a disponibilidad el jefe de la
unidad y otros dos oficiales superiores".
El hecho ocurrió la noche del 15 al 16 de octubre pasado cuando, tras una pelea
entre presos cuyo origen no está claro, los reclusos del pabellón 16 quemaron
colchones, lo que derivó en la muerte de 33 internos asfixiados. La fiscal de La
Plata a cargo del caso, María Laura D’Gregorio, investiga si el personal del SPB
de la Unidad de Magdalena incurrió en el delito de abandono de persona al dejar
que murieran 33 internos durante el incendio en el pabellón.
El documento de la Comisión denuncia además "el discurso de impunidad difundido
por el Estado provincial luego del incendio, en el sentido de que habría sido un
accidente impulsado por los propios reclusos, que con su violencia limitaron las
posibilidades de rescate por parte de los guardias", apuntó el integrante de la
Comisión por la Memoria. Un capítulo del informe reúne a su vez todos los
antecedentes, denuncias, fallos y escritos de defensores oficiales y fiscales
que habrían alertado sobre la posibilidad de que una tragedia de estas
características se produjera en el Penal de Magdalena.