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Latinoamérica

ENTREVISTA AL PRESIDENTE HUGO CHÁVEZ

EU lanzó todo su poder contra nosotros y sin embargo, "el barco no se hundió... ni se hundirá"

Arturo Cano
enviado de la "La Jornada" en Caracas.

El presidente Hugo Chávez Frías tarda tres minutos en completar su acto reflejo: se lleva la mano al bolsillo del traje gris y saca su pequeño ejemplar de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la bicha, le dicen algunos aquí, con la cual derrotó a la oposición dos veces en 1999, con la cual se religió en 2000 y con la cual se sometió exitosamente a la prueba del referéndum revocatorio. No la suelta en el transcurso de toda la entrevista.

Luego de ser ratificado en el poder, con una votación inédita en la historia electoral venezolana, el presidente Chávez repasa su obra de gobierno, asegura que los reclamos de la oposición tendrán que resolverse en tribunales y que no son un tema que vaya a ocupar su tiempo: "Yo gané y voy a seguir gobernando".

Con todo, considera "posible" que algunos sectores de la oposición busquen una salida violenta a la confrontación política abierta desde 2001. Sin embargo, asegura que por lo pronto ha recibido "algunas buenas señales" de sectores de la oposición, especialmente empresarios, obispos y algunos directivos de medios de comunicación. No ha ocurrido así con los dirigentes de la Coordinadora Democrática: "Ojalá terminen de enfrentar sus propios demonios y de vencerlos".

En entrevista exclusiva con La Jornada, en su despacho del Palacio de Miraflores, Chávez sostiene que sus casi 6 millones de votos, contra unos 4 millones de la oposición, no muestran un país partido en dos bloques: "Aquí lo que hay es un país abierto y democrático".

Entre las muchas lecturas que da a su triunfo, está la del respaldo a su proyecto de país y en ese tenor habla de las misiones, su programas sociales que, dice, se convertirán en las instituciones básicas "del nuevo Estado social". Esto es lo que ha llamado la "profundización del proceso". Porque en materia de pago de la deuda externa, control cambiario, políticas monetaria y fiscal, Chávez asegura que "hay pocas cosas que cambiar, porque sencillamente han venido funcionando".

Aunque no está "totalmente satisfecho", el presidente venezolano afirma que debe considerarse que "por algo he sido ratificado con 60 por ciento de la votación popular".

El presidente Chávez afirma también que no meterá un dedo para defender a los individuos que dispararon contra una manifestación opositora el pasado lunes, aunque se trate de partidarios suyos. "Debe caerles el peso de la ley con todo su rigor, sean quienes fueran".

-La primera pregunta corre a cargo de José Vicente Rangel, hoy vicepresidente, quien se la hizo dos días antes de su primer triunfo electoral. Con un país dividido, decía él, es muy difícil avanzar y gobernar. ¿Podrá "avanzar y gobernar" tras el referéndum?

-Tenemos ya cinco años gobernando. Ni en los días más difíciles dejamos de gobernar. Llego a creer que ni siquiera en los días del golpe de Estado. Nunca hemos dejado de gobernar, con mayor o menor dificultad. No es que esté totalmente satisfecho, pero por algo he sido ratificado con 60 por ciento de la votación popular. Esto significa que los logros del gobierno han sido aprobados.

"En primer lugar, logramos una Constitución nueva. En la IV República funcionó durante 20 años una Comisión para la Reforma del Estado y no pudieron cambiarle una letra a la Constitución. Nosotros, en un año, hicimos una nueva. Vaya, qué efectividad de gobierno. El de 1999 fue el año de la nueva Constitución, y el 2000 fue el año de la relegitimación.

-De su relección.

-Todos los poderes fueron relegitimados. Fue el año del nacimiento de la nueva República, y nació con dificultades como todo parto, pero ahí está, pudimos nacer. Tuvo eficacia, porque habríamos podido quedarnos en este librito. ¿Cuántas constituciones nacieron y fueron engavetadas? No tuvieron im-pacto porque no hubo capacidad de gobernar la situación.

"El 2001 fue el año de la legislación revolucionaria...

-Las leyes habilitantes.

-Hicimos 49 leyes, una por semana. Las leyes para darle vida a la Constitución y para impactar de manera directa la realidad y comenzar a transformarla. Vaya, qué éxito de un gobierno que logra elaborar 49 leyes en menos de un año, y comenzamos a aplicarlas.

-Esas leyes fueron las que echaron a la calle a la oposición por vez primera.

-Claro, por estas elites... No podemos decir que todos los que votaron y siguen votando contra Chávez han llegado al grado radical de oposición de la Coordinadora Democrática... Y no creo que sea correcto hablar de un país dividido en dos bloques, no, aquí lo que hay es un país abierto y democrático. Cuando empezamos a aplicar las leyes habilitantes comenzó la reacción furibunda de la oligarquía y vino el golpe de Estado, y el sabotaje para tratar de acabar con el gobierno. Vaya, qué capacidad para sobrepasar la tormenta. El barco no se hundió.

-Pero estuvo en serio riesgo.

-Claro, yo estuve a punto hasta de morir. Estuvimos al borde una gran conflagración interna. Estados Unidos lanzó todo su poder contra nosotros. Hubo apoyo de Estados Unidos al golpe militar, a la desestabilización económica, apoyo financiero, militar, de inteligencia. George W. Bush decidió que Hugo Chávez tenía que irse. Y, sin embargo, aquí estoy sentado contigo, hablando en el despacho presidencial de Caracas. Es decir, aun sometido a las presiones más grandes, aun cruzando los mares más tormentosos, el barco no se hundió ni se hundirá ya, Dios mediante.

"Es decir, depuramos las Fuerzas Armadas de los golpistas; estamos reactivando la economía y este año tenemos el primer lugar de crecimiento en América Latina; recuperamos la industria petrolera y estamos produciendo 3 millones 200 mil barriles diarios, el quinto lugar en el mundo; hemos descubierto los yacimientos de gas más grandes de este continente; hemos atraído inversión extranjera desde China hasta Estados Unidos; nos hemos incorporado al Mercosur.

"En lo político, logramos vencer el referéndum, venciendo muchas dificultades, logramos convocar y motivar a casi 10 millones de votantes, un récord.

"En lo social, las misiones revolucionarias: hemos alfabetizado millón y medio de personas en un año, hemos entregado 200 mil viviendas, hemos entregado 2 millones y medio de hectáreas a los que no tenían tierra, hemos triplicado los créditos a los pobres.

Conductas patológicas

-Bien. Pero también tuvieron golpe, paro, firmazo y reafirmazo. La leyenda popular cuenta que usted le dijo a Gustavo Cisneros (el empresario venezolano que es segunda fortuna latinoamericana) "tú y yo vamos a acabar matándonos". ¿Acabó todo con el referéndum? ¿Teme o calcula que sectores de oposición pueden intentar una salida violenta?

-Eso es posible. Pero nunca, con nadie, he dicho que vamos a terminar matándonos. Tengo una gran fe en la vida. Una vez pasado el referéndum, y reconocido nuestro triunfo por el mundo entero, excepto por este mismo grupito que creo que tiene una conducta patológica, hasta de siquiatra..

-Disociación sicótica, ha dicho usted.

-Sí, sí. Es verdad, anoche estaba viendo a un dirigente la oposición y pensaba que algunos de ellos no tienen remedio. Es como si en las Olimpiadas vemos que un boxeador cae, que lo tienen que sacar en camilla, que están los médicos echándole agua porque no despertó y haya gente que todavía no reconozca el triunfo del otro. Es un nocaut claro, tanto que hasta Washington lo reconoce. Pero la oposición está llegando al ridículo. Los que votaron contra mí están en su derecho, pero la mayoría están de vacaciones o en sus casas. Sólo el uno por ciento está en los medios, tratando de ver cómo hacen para demostrar un fraude o tratar de manchar un referéndum tan limpio.

-Usted va a colaborar para que se despeje cualquier duda.

-No, yo no. Yo gané y voy a seguir gobernando.

-Le corresponde al Consejo Nacional Electoral.

-Si la oposición insiste, tercamente, que vaya a los tribunales. Yo estoy reconocido una vez más como presidente de Venezuela, desde Moscú hasta Washington, desde Quebec hasta Buenos Aires y voy a seguir gobernando.

El presidente Chávez anuncia entonces sus próximas actividades fuera de Venezuela. Irá a Brasil, "a una cumbre con Lula"; a Europa, invitado por el presidente español José Luis Rodríguez Zapatero; y, claro, a países petroleros como Rusia e Irán.

"Tengo mucho trabajo. No voy a dejarme amarrar por una locura", afirma.

A mis opositores "los conozco muy bien"

-Sus colaboradores insistían, antes del domingo, que la violencia no saldría del chavismo, porque en esta fuerza hay mando, liderazgo, control. Pero los hechos de Altamira trajeron una sombra al resultado del referéndum.

-Bueno, eso es lo que ellos querían. Lamentablemente lo lograron. Ellos, los dirigentes irresponsables de la oposición, que tienen una historia macabra y están cubiertos de sangre. En el golpe de Estado ellos buscaron los muertos. Ellos estuvieron muchos meses buscando un muerto, y cuando al fin lo tuvieron, celebraron "ya lo tenemos para echárselo a Chávez". Una cosa macabra, fascista. (En abril de 2002) ellos convocan a una marcha y a sus propios seguidores los conducen a una masacre para luego decirle al mundo que es Chávez quien los masacró. Que cálculo tan perverso y asesino. Eso es lo que abunda en esos círculos de la llamada Coordinadora Democrática. Enfermos, yo creo que son enfermedades de poder. Cuando ellos gobernaron este país desaparecían gente, mataban gente, robaban hasta más no poder, nunca les dolió la pobreza. Creo que han perdido buena parte de la condición humana, lo creo porque los conozco muy bien.

Todo el peso de la ley

La noche del domingo, admite el presidente Chávez, estaba "preocupado de que se alargara mucho" el anuncio de los resultados del referendo.

La razón, explica, fue que Jimmy Carter y César Gaviria, los coadyuvantes internacionales, pidieron al CNE no dar a conocer el primer boletín, que tenían listo "a la una o dos de la madrugada", hasta que ellos no hablaran con la oposición

El ex presidente estadunidense y el secretario general de la OEA, dice Chávez, trataron de "evitar lo que no pudieron evitar".

En la reunión con los opositores, refiere Chávez, Carter y Gaviria expresaron a la Coordinadora Democrática: "Ustedes tienen que reconocer esto, porque los resultados que va a dar el CNE son los mismos que tenemos nosotros".

Incluso Súmate, la ONG que saca las cuentas electorales para la oposición, "ya les había dicho que ganaba Chávez, pero ellos tenían el plan de buscar la violencia, porque saben que nunca nos van a ganar un referéndum".

Aun con esos datos, sostiene Chávez, tras el anuncio del CNE la madrugada del lunes, la oposición "decide llamar a la desobediencia, a manifestaciones". En las calles, dice el presidente venezolano, se demostró el "escaso liderazgo" de la CD, porque pocos acudieron al llamado.

"Aquí en Caracas, otra vez en la Plaza Altamira, donde no eran más de 200 personas. ¿Por qué salieron esas 200 personas? Por el llamado de estos irresponsables. Esa madrugada ellos debieron decirle al país esa noche es 'reconocemos el triunfo del no, felicitamos al pueblo y que viva la democracia', y llamar a toda su gente a descansar, como yo llamé a los míos, a celebrar sanamente y luego a irse a descansar".

En Altamira los opositores bloquearon la calle y llegó un grupo de individuos en motocicletas que después de un enfrentamiento a golpes sacó sus armas y disparó, con el saldo de una señora muerta y varios heridos.

El presidente informa que dos de los sujetos que dispararon ya fueron aprehendidos, pero dice que todavía está en investigación a qué grupo pertenecen.

Eso sí, está seguro de que "no son del Comando Maisanta, no son de los partidos que me apoyan, porque ahí hay disciplina, tenemos unos comandos que funcionan hasta nivel barrio".

-No los va a proteger.

-Absolutamente no. Debe caerles el peso de la ley con todo su rigor, sean quienes fueran. Ahora, de todos modos hay que preguntarse, para evaluar hacia atrás la situación, ¿por qué llegaron esos dos grupos a enfrentarse ahí? Sin duda, cuando la irresponsable dirigencia opositora, en vez de reconocer el triunfo popular, llama a la desobediencia y a tomar plazas, entonces también hay sectores de la otra corriente que dicen 'vamos nosotros también a la calle'. Y entonces es cuando comienza para nosotros el terrible reto de frenar a nuestra gente. Si esta gente son grupos que apoyan al gobierno, actuaron por su cuenta y riesgo. Sin duda, que esos hechos han manchado esto, y lamentamos mucho la pérdida de una vida humana.

La corrupción metida hasta los huesos

-En los cerros, entre sus bases, se escuchan muchas historias de sectarismo, de rechazo a los partidos, de corrupción. Me dice una señora que necesitan "una revolución dentro de la revolución".

-Ese proceso ya comenzó. Dije que 2004 sería de la revolución dentro de la revolución. Claro, las revoluciones si mueren, mueren. Pero esta ha cogido vida y tiene que ir renovándose y reforzándose a cada paso. Eso tiene muchas lecturas y muchos frentes de batalla.

"Claro que hay corrupción en Venezuela. Tenemos una cultura de corrupción creada desde hace medio siglo, precisamente por esta gente que forma la Coordinadora Democrática, los adecos y los copeyanos, que se hacían ricos.

"Tengo un amigo allá en mi pueblo que fue alcalde, él era copeyano, y es muy honesto. Cuando entregó el mismo carrito, la misma casita rural, la misma mujer. Y la mayor parte de la gente decía: "Este sí es pendejo, no aprovechó, no robó".

El presidente Chávez afirma que la corrupción de los partidos tradicionales "cundió por el país. Y es una de las grandes batallas que tenemos que dar todavía, la revolución moral. Todavía hay corrupción. He tenido que sacar gente del gobierno, gente en la que creía mucho, y ordenar investigaciones. Ahora, ¿qué ocurre? Casi todas las acusaciones que yo he hecho, u ordenado, quedan por ahí en los vericuetos de un Poder Judicial todavía penetrado por la misma corrupción y por los partidos Acción Democrática y COPEI. Pero eso va a comenzar ahora sí, estoy seguro, porque ahora se aprobó la nueva ley del Tribunal Superior de Justicia, y dentro de poco la Asamblea Nacional designará nuevos magistrados, lo que nos permitirá ir a fondo a todos los tribunales para sacar los jueces corruptos o que no tienen coraje para actuar.

-Es la ley que criticaron organismos de derechos humanos muy reputados, como Human Rights Watch.

-¿Reputados de qué?

-Reconocidos por su labor en muchos lugares, por su condena incluso al gobierno de Estados Unidos.

-Pongo en duda esas reputaciones, al menos en lo que se refiere a Venezuela. En la situación venezolana muchas reputaciones han quedado desnudas y desnudadas.

"Esta es una ley absolutamente enmarcada en la Constitución. La oposición quiso boicotearla porque no les conviene que haya jueces imparciales. A mí me tuvieron secuestrado y luego el TSJ decidió que yo estuve custodiado "por unos militares preñados de buenas intenciones". Y los golpistas andan libres. Yo tuve que tragar arena aquel día que el tribunal supremo tomó esa decisión. Y no me quedó alternativa más que llamar al pueblo a obedecer porque la gente quería irse al tribunal a quemarlo. Ahora comenzará a aplicarse esa ley, para sancionar los delitos de cuello blanco, para sancionar la corrupción vieja y nueva.

"¿Corrupción en mi gobierno? Ante cualquier sospecha firme lo que he hecho es remover funcionarios y ordenar investigaciones que están en manos del Poder Judicial. Es parte de esa revolución moral en marcha. Y esa vieja cultura de la corrupción adeco-copeyana, que se metió hasta los huesos de esta sociedad, pues nos va a costar varios años y sobre todo mucho ejemplo para erradicarla de Venezuela".

Las misiones, embrión del desarrollo endógeno

Líderes y analistas de oposición reconocen que una de las claves del triunfo de Chávez fueron las misiones, programas sociales de salud y educación emprendidos hace un año con recursos de Petróleos de Venezuela (PDVSA).

Chávez dice que tales programas "deben ir convirtiéndose progresivamente en las instituciones básicas del nuevo Estado social. Sobre todo la Misión Barrio Adentro, se está transformando ya en una institución, en el sistema nacional público de salud. Habrá que ampliarlo, fortalecerlo, para que..."

-Para que algún día deje de necesitar a los médicos cubanos.

-Claro. Dentro de dos meses deben regresar 300 muchachos venezolanos, que vienen de Cuba, ya médicos, que tienen cinco años allá. Esos muchachos van a ir a Barrio Adentro y ya tenemos otros 500 allá. Y aquí también, en algunas universidades hemos duplicado la matrícula de las facultades de medicina. Lo mismo que la Misión Vuelvan Cara, una misión estructural, que nos está permitiendo comenzar la transformación del modelo socioeconómico, sobre todo porque le estamos transfiriendo propiedad a los pobres, los estamos capacitando desde el punto de vista técnico y estamos sembrando el país de lo que hemos llamado núcleos endógenos de desarrollo, para darle forma al modelo endógeno del desarrollo nacional.

-Y en materia macroeconómica, ¿también se propone una revolución?

-Es un marco que nos ha permitido comenzar a hacer un proceso de transformación. En ese marco hay pocas cosas que cambiar, porque sencillamente han venido funcionando. En el pago de la deuda externa no tenemos ningún cambio previsto, hemos aliviado muchísimo la deuda, la hemos restructurado y en este momento no nos impide llevar adelante el proceso de transformación. En materia cambiaria, no tenemos previsto derogar el control de cambios, pues nos ha permitido fortalecer las reservas. La política monetaria está en manos del Banco Central y no creo que haya un cambio. En lo fiscal seguiremos con una política expansionista de la inversión pública, para con ello dinamizar el país y atraer incluso la inversión privada. No seguiremos para nada las politicas del Fondo Monetario Internacional que siempre ordenan a estos países nuestros restricción fiscal, el recorte de los programas sociales.

-Pero tiene tratos con el FMI.

-Somos parte del FMI y tenemos ahí miles de millones de dólares.

-Pero no aceptan la receta.

-No es que somos enemigos a muerte del FMI, que no queremos ni verlos. Yo los he recibido aquí, los oigo y ellos me oyen. Pero nosotros tenemos aquí nuestra propia medicina.

-¿Hasta cuándo se va a sentar la oposición con su gobierno?

-No sé. Pero ha habido algunas buenas señales.

-El pronunciamiento de la patronal Fedecámaras.

-Sí. Ya he dicho al vicepresidente que haga un primer acercamiento. Y también he recibido buenas señales de algunos obispos y de los directivos de algunos medios de comunicación. Pero los partidos... ojalá terminen de enfrentar sus propios demonios y de vencerlos.