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Latinoamérica

Fuertes bloqueos campesinos en el norte de La Paz y violentas escaramuzas callejeras entre maestros y policías
Bolivia: se multiplica la presión sobre Mesa

Econoticiasbolivia.com

La Paz, mayo 31, 2004.- Fuertes bloqueos campesinos en el norte de La Paz y violentas escaramuzas callejeras entre maestros y policías inauguraron este lunes una semana que promete ser muy conflictiva en Bolivia por la amenaza de la paralización total de la ciudad de El Alto y la suspensión del transporte público en todo el país. Se acrecienta la lucha por la nacionalización del gas y el petróleo.

Los sectores en protesta exigen la atención favorable a sus demandas socioeconómicas y la nacionalización del gas y el petróleo, lucha que es encabezada por cinco semanas consecutivas por la Central Obrera Boliviana (COB) que realiza multitudinarias marchas y movilizaciones de masas en las principales ciudades.

En la madrugada de este lunes, los caminos que conectan la ciudad de La Paz con el norte quedaron totalmente cortados en los ingresos y tramos intermedios de los Yungas, cuando varios miles de colonizadores, campesinos y cocaleros sembraron piedras en el asfalto, paralizando el tráfico vehicular.

Según informó el principal dirigente de la Confederación de Colonizadores de Bolivia, Sergio Loayza, los bloqueos han sido activados por las 14 federaciones de colonizadores y pueblos del norte paceño, especialmente en Caranavi, Alto Beni, Larecaja, Carrasco, Palos Blancos, Yucumo y Quiquibey.

"Exigimos el cumplimiento de los acuerdos (...) la construcción de los puentes prometidos, la apertura de caminos, la construcción del mercado de coca y la modificación de las preguntas del referéndum para que se decida sobre la nacionalización del gas", dijo Loayza al advertir que los bloqueos se harán sentir con más fuerza a medida que transcurran las horas.

Hasta el mediodía, según el reporte de las radioemisoras yunqueñas, en el corte de las rutas del norte no se habían producido incidentes ni hechos de violencia. Todo lo contrario a lo que aconteció en la autopista y en el camino antiguo que unen las ciudades de La Paz con El Alto, donde maestros urbanos y rurales, tras bloquear las vías, se enfrentaron con la policía. Hubo profusión de gases, piedras, balines y cachorros de dinamita, con un saldo preliminar de cuatro maestros heridos con balines de goma y plomo.

Los maestros, que ya van a la cuarta semana de huelga, exigen el aumento de salarios, mejores condiciones para la jubilación, más presupuesto para la educación y la nacionalización del gas. Los profesores del área urbana han abierto también nuevos piquetes de huelga de hambre, en tanto que los maestros rurales de La Paz intensificaron los bloqueos, tras desconocer los acuerdos que sus dirigentes nacionales habían alcanzado con el gobierno del neoliberal Carlos Mesa.

Este fin de semana, el gobierno y sus aliados del Movimiento al Socialismo (MAS) del diputado cocalero Evo Morales, se habían empleado a fondo para quebrar la huelga de los maestros y así partir por el eje la lucha de la COB, que hasta ahora no logra incorporar masivamente a los campesinos al bloqueo y a fabriles y mineros a la movilización. Sin embargo, la maniobra no dio resultado y los dirigentes de los maestros rurales, alineados al MAS, fueron repudiados y desconocidos por las Asambleas en La Paz y otros distritos.

PARO EN EL ALTO

La presión también es intensa sobre otros dirigentes sindicales leales al MAS, como es el caso de la ciudad de El Alto. Allí, la Central Obrera Regional y la Federación de Juntas Vecinales, que fueron fundamentales en el derrocamiento del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, convocaron a un paro total de 24 horas para este miércoles, exigiendo la nacionalización del gas.

Hasta la semana pasada, El Alto había estado ausente de las movilizaciones de la COB, siguiendo las instrucciones de Morales para boicotear la protesta. Sin embargo, la presión de las bases y las frecuentes golpizas a los dirigentes masistas (como es el caso de Mauricio Cori, de las Juntas Vecinales) obligaron a éstos a convocar a las movilizaciones y al paro, que prometen ser contundentes por la radicalidad de las bases al igual que la suspensión de actividades del autotransporte.

HUELGA DEL TRANSPORTE

Aunque las autoridades de gobierno seguían intentando este lunes neutralizar la medida de protesta de los choferes, el ampliado de los transportistas de todo el país convocó a paralizar actividades por 72 horas desde mañana martes. Todas las federaciones del transporte habían asegurado que acatarían el paro, y sólo la distrital de La Paz anunció que no llevaría adelante la medida. "Todos los días hay marchas y bloqueos en La Paz, no hemos podido trabajar bien y no hemos ganado nada", dijo a modo de disculpa, Franklin Duran, dirigente de los choferes paceños.

Como todas las ocasiones que fueron a la huelga, los choferes confían en que su medida virtualmente paralizará las más importantes ciudades del país, cortando además todas las comunicaciones terrestres entre las ciudades bolivianas y sus salidas con los países vecinos. Los choferes, aliados ya a la COB, exigen el congelamiento del precio de los carburantes y la eliminación de los empresarios que comercializan estos productos al por mayor.

MÁS AMENAZAS

Este martes también podría ser intenso en el oriente sur del país, tras que los campesinos colonizadores de Yapacaní amenazaron con tomar los pozos petroleros si no atienden sus demandas.

Desde esta misma región se informó que la Asamblea del Pueblo Guaraní, que a principios de mes había cercado los campos petroleros, "decidió rechazar el Referéndum convocado por el Presidente Carlos Mesa, en el entendido de que el pueblo boliviano ya se pronunció sobre el futuro del gas y el petróleo en las jornadas de octubre y durante las movilizaciones que protagonizaron los indígenas del oriente y del Chaco boliviano".

Los indígenas del Chaco se reunieron el último fin de semana y llegaron a la conclusión que "no es necesario realizar gastos millonarios para una consulta popular como es el Referéndum, donde no se recuperará la propiedad real de los recursos naturales hidrocarburíferos".

El dirigente de la Asamblea del Pueblo Guaraní, Justino Zambrana, informó que reajustaron sus cuadros con "la misión de emprender acciones de presión para recuperar la propiedad de los hidrocarburos para el beneficio de la mayoría de los bolivianos y no de las empresas trasnacionales", según informó la red radial Erbol.

El referéndum, convocado para el 18 de julio, ha sido calificado como "tramposo" por la COB, ya que no incluye la nacionalización del gas, exigida por el 81% de la población, según las encuestas más confiables y serias de la prensa boliviana.