El proletariado urbano se lanza de lleno a la lucha por la nacionalización del gas y el petróleo. Miles y miles marcharon en casi todas las ciudades bolivianas, fortaleciendo la ofensiva desatada por la COB, que ya cuenta con el respaldo de los bloqueos carreteros de campesinos y colonizadores y la presión de los pueblos de El Alto y Cochabamba

Econoticiasbolivia.com

Con bulliciosas y gigantescas marchas de teas, los obreros de las fábricas del país se sumaron a la enorme ola social nacionalizadora que, día a día, crece a lo largo y ancho de Bolivia, arrinconando al gobierno neoliberal de Carlos Mesa

"¡Mesa y Goni (diminutivo de Gonzalo Sánchez de Lozada), los mismos asesinos!" "¡Mesa traidor, ándate a Washington! ¡Nacionalización, carajo!" "¡La media luna chilena no pasará... el pueblo unido la aplastará!" "¡Muera el referéndum tramposo!" "¡Abajo Mesa, vende-patria" "¡Viva la Central Obrera Boliviana (COB)!" son algunas consignas que los trabajadores de las fábricas entonaron insistentemente, en casi todas las ciudades del país mientras hacían detonar petardos y cachorros de dinamita.

En La Paz la manifestación de este jueves fue gigantesca. Recordando los motines policiales del 2000 y el 2003 y cuando pasaban por las oficinas de la policía y el tránsito, los manifestantes con vítores convocaron a "la tropa policial" a "amotinarse" para imponer la nacionalización de los hidrocarburos. "¡A la policía le quedan dos caminos: unirse a su pueblo o ser sus asesinos!" "¡Sindicalizar a la tropa policía!" gritaron a coro los obreros, ante la mirada atenta de los uniformados.

A la marcha se plegaron otros sectores de trabajadores, cumpliendo así un "pacto intersindical" que busca unificar las luchas "en torno a la COB". Maestros, mineros, camineros, gremiales, constructores y otros sectores se sumaron a las filas de los obreros fabriles que, según sus dirigentes, quieren otra vez "vanguardizar la lucha de los explotados bolivianos".

En el campo, reportes de prensa daban cuenta de la irrupción de nuevos puntos de bloqueos de campesinos y colonizadores en las carreteras del Altiplano y el robustecimiento de los cortes de caminos en el norte de La Paz y los Yungas. "Esto recién empieza", dijo el dirigente de la Federación de Campesinos de La Paz, Rufo Calle.

En las ciudades, el mayor peso de las movilizaciones ha recaído hasta ahora sobre los maestros urbanos y rurales, que marchan todos los días, mañana, tarde y noche, dando una verdadera lección de cómo se lucha por rescatar la riqueza y la dignidad de la patria. Ejemplo que ya está siendo imitado por los pueblos de El Alto y Cochabamba, y por otros sectores como los fabriles.

MESA, VENDEPATRIA

El máximo dirigente de los trabajadores fabriles de Bolivia, Alex Gálvez, luego de encabezar la marcha de teas informó a los medios de comunicación que el último Ampliado nacional fabril, que se realizó en Cochabamba, determinó "exigir al gobierno de Carlos Mesa cambiar las preguntas tramposas del Referéndum por una sola, que debe decir si el pueblo quiere o no la nacionalización inmediata del gas y el petróleo".

El también fabril y máximo dirigente de la Central Obrera Departamental de La Paz, Salustiano Laura, afirmó que el referéndum es una "mamada" (engaño): "Creo que para los trabajadores está quedando claro que Carlos Mesa es peor que Gonzalo Sánchez de Lozada. Es un vende-patria que no quiere tocar los contratos firmados con las transnacionales. Si no nacionaliza inmediatamente nuestros recursos naturales debe irse (...)".

Tras explicar que los trabajadores fabriles determinaron sumarse "disciplinadamente" al plan de lucha de la COB, el secretario general de la Federación de Fabriles de La Paz, Henry de la Barra, afirmó que, de manera unánime, por escrito e igual que los mineros, los obreros de las fábricas del país han determinado declarar la "guerra" al referéndum "tramposo" de Carlos Mesa.

Este lento despertar de los obreros bolivianos es significativo, pues da otra fisonomía a la actual mecánica de clases del país. Sin embargo, parece que este proceso, a decir de sus propios dirigentes, va tomar un tiempo, pues se encuentra en pleno "proceso de reorganización".

DOCUMENTO NACIONALIZADOR

En plena marcha, los dirigentes de los fabriles distribuyeron un documento que exige al gobierno de Mesa "cumplir la agenda de octubre del 2003", cuando más de 80 bolivianos murieron por la nacionalización del gas y el petróleo.

El documento, además, advierte que las familias de los fabriles no participarán del "engañoso" referéndum, si es que el gobierno no cambia las cinco preguntas por otras más cortas que establezcan nítidamente la "NACIONALIZACIÓN DE LOS HIDROCARBUROS".

A continuación destacamos las partes más importantes del extenso documento:

"CONSIDERANDO:

Que; el gobierno de Carlos Mesa, continuismo del Gonzalo Sánchez de Lozada, aún no cumple con su promesa hacia el pueblo boliviano y a la memoria de hombres, mujeres y niños que ofrendaron sus vidas en las históricas jornadas de octubre en la denominada guerra del Gas (...)

Que, los bolivianos (en octubre) exigieron (...) la total nacionalización de los recursos hidrocarburíferos para los bolivianos y la industrialización del gas para generar empleos y recursos genuinos para el Estado Boliviano, y (así) no seguir mendigando migajas ante las empresas transnacionales que se apoderaron de nuestros recursos naturales.

Que; el pueblo boliviano exigió al gobierno el Referéndum Vinculante sobre la decisión del futuro del GAS, sin embargo Carlos D. Mesa nuevamente se encuentra en situación de repetir la historia para satisfacer necesidades ajenas, más aún agravado por leyes como la capitalización y la ley de hidrocarburos de entero beneficio para las transnacionales del imperio del norte (...)

Que, este gobierno una vez más se hace la burla del pueblo boliviano, al pretender realizar un referéndum con cinco preguntas que no representan las exigencias reales para la recuperación de los hidrocarburos (...)

Que, en ninguna de las preguntas se especifica la anulación de contratos con las transnacionales que explotan nuestros recursos naturales y se enriquecen cuando los bolivianos en su mayoría nos debatimos entre la miseria y el hambre y la desocupación (...)

Que; nuestro país está signado trágicamente por su estructural atraso (...)

Que; los trabajadores fabriles rechazamos enfáticamente las preguntas formuladas en el referéndum que tienen como único objetivo seguir favoreciendo a las transnacionales siguiendo la política de Gonzalo Sánchez de Lozada, y burlándose de los (80) muertos de octubre.

POR TANTO, LOS TRABAJADORES FABRILES RESUELVEN:

1. Rechazar las cinco preguntas del gobierno de Carlos Mesa sobre el referéndum (...) por ser totalmente engañosas y con trasfondo transnacional, y que no representa el sentimiento del pueblo boliviano que exige la NACIONALIZACIÓN DE LOS HIDROCARBUROS.

2. Exigir al gobierno de Carlos Mesa, cambie las cinco preguntas por otras cortas y concretas para el referéndum en las que debe estar incluidas, LA NACIONALIZACIÓN DE LOS HIDROCARBUROS PARA EL ESTADO BOLIVIANO, la industrialización del gas para crear nuevas fuentes de empleo, anulación de contratos con las petroleras transnacionales, cumpliendo la denominada agenda de octubre.

3. Si el gobierno sigue con sus propias preguntas, los trabajadores fabriles y nuestras familias NO PARTICIPAREMOS del referéndum digitado por intereses políticos y de las empresas petroleras transnacionales, que quieren seguir saqueando nuestros recursos no renovables sin pagar impuestos ni regalías al país (...)"