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Argentina: La lucha continúa

8 de april del 2004

Buenos Aires: Entrevista a los trabajadores del Metro
"Restituir el derecho histórico de los trabajadores a las 6 horas, es una lucha que consideramos justa y digna"

Agencia Rodolfo Walsh

Luego de una ejemplar lucha que abarcó cuatro días de paro completo y la ocupación de las estaciones cabecera, los trabajadores de subterráneos [Metro] consiguieron una importante victoria. Recuperaron las seis horas para todos los sectores, lograron que los despidos resueltos por Metrovias como represalia al paro volvieran para atrás y que se los reconociera como parte en las negociaciones. Quedó como tema de discusión a futuro el proyecto que tiene la empresa, de instalar máquinas expendedoras de pasajes.

Buenos Aires, martes 6 de abril de 2004.- Los encontramos casi al final del andén de la estación Federico Lacroze Ese mismo andén que alguna vez fue testigo de nuestro sofocado y apretujado apuro. Ese andén que nunca deja de evocar el comienzo de la genial "Tiempos Modernos" de Carlitos Chaplin. Arriba todo está listo para que el festival en solidaridad con los trabajadores de subterráneos de comienzo.

- ¡Ahí está el delegado!. Y un compañero, guía circunstancial, señala con su mano a Christian, delegado de la Línea B.

Larga cabellera sujetada en forma de cola de caballo, bermudas y camisa de trabajo con el "coqueto" bordado de "Metrovias" en el bolsillo. Muestra signos de cansancio en su cara.

Nos sentamos. Termo en el piso, entre la piernas, y mate en mano comienza a desgranar con voz pausada, los argumentos y la confianza en el triunfo. La mayor parte del cuerpo de delegados se encuentra en el Ministerio de Trabajo. Esperan definiciones de un momento a otro.

"El conflicto se inició cuando la dirección de la UTA firmó a espaldas de los trabajadores un acuerdo con la empresa, en el Ministerio de Trabajo" comenzó a explicarnos "donde se acuerda una jornada tramposa de 6 horas para los boleteros. La reivindicación histórica y el justo derecho de los trabajadores en el subte siempre ha sido bajo gobiernos democráticos, excepto el de Menem (en las dictaduras Onganía y de Videla se laburaba 7 horas y con Menem 8 horas) , son las 6 horas. Restituir el derecho histórico de los trabajadores a las 6 horas, es una lucha que consideramos justa y digna. Para el tren se consiguieron hace unos meses, quedaban los boleteros y algunos sectores más."

Los compañeros de la empresa van y vienen constantemente, saludan. Algunos levantan el puño con un gesto de seguridad y confianza, otros consultan, quieren enterarse de las novedades.

"La UTA firmó siete horas, a espaldas del sentimiento de la gente y de las posibilidades reales de los trabajadores y de la lucha." Continuó explicando Christian "De hecho con una firma tramposa que dice seis horas, pero que en realidad son siete. Además firmó un cheque en blanco a la empresa para bajar máquinas expendedoras de pasajes que implican la eliminación de puestos de trabajo de muchos compañeros a futuro."

Arriba un grupo de trabajadores gritaba: "Salta, salta, salta pequeña langosta, UTA y Metrovias son la misma bosta". El festival aun no comenzaba.

"La UTA se hizo presente en la línea B, el sábado tratando de convencer a los trabajadores de las bondades del acuerdo firmado y se fue con un duro revés. Los trabajadores no aceptaron ninguno de los argumentos, explicaciones o excusas que daba la UTA."

Nos contó Christian Danieli, es menudo y porta con orgullo una barba rala, casi imberbe. Pertenece al sector tráfico, nadie diría que hace diez años que maneja trenes en el subte. "Nosotros tenemos, los que estamos arriba del tren y algunos talleres, implementadas las seis horas. Entendemos que fue una jugada de la burocracia y parte del gobierno, en tratar de dividir a nosotros los trabajadores del subte, dando seis horas a un sector y otro no." Analiza Danieli "Entendemos por sentido común, que esto genera cierto recelo y malestar, cuando fuimos todos a una lucha desde un principio. Nosotros como trabajadores siempre reivindicamos y fuimos desde el inicio a pedir las seis horas para todos, no para un sector u otro"

A cuatro días de iniciado el paro, comenzó el viernes 2 de abril a las 16.30 hs, los trabajadores de subte muestran un ánimo excelente. Dentro de los coches pueden observarse señales de haber sido utilizados como dormitorios. Numerosos compañeros aunados en la ronda del mate charlan acaloradamente y puede verse material de lectura de diverso tipo: desde diarios y revistas de los multimedios hasta el periódico "Nuestra Lucha", que editaban los trabajadores de Brukman y Zanón.

"Mayoritariamente el estado de ánimo es realmente extraordinario." Destaca Christian "Hay compañeros que están acá hace 4 días acá en el subte, durmiendo acá, comiendo acá, viendo a sus hijos acá. Hay compañeros que no se han movido ni un minuto de las cabeceras. Hay otros que han rotado, pero siempre hay una cantidad importante de compañeros. El estado de ánimo es realmente extraordinario. Estamos organizados para dormir, para comer, para hacer guardias, para limpiar el vestuario, porque tampoco tenemos limpieza. Es decir, creo que si hubiera necesidad de seguir parando hay condiciones para hacer más tiempo."

Alberto Riquelme, trabaja en el taller Rancagua (¡Si Román fuera pariente mío, crees que trabajaría acá!), ha participado en toda la lucha que se llevó a cabo por las seis horas, vestido de overol afirma convencido "Me sumo porque soy trabajador, me considero también afectado por todo lo que está pasando, quiero tomar este compromiso y esta acción. Creo que es lo que tenemos que hacer los trabajadores. No queda otra alternativa, esto lo hago por convicción."

La primer respuesta de Metrovias para frenar el conflicto fue enviar telegramas de despidos y pedir el desafuero de los delegados. Generar miedo, controlar mediante el terror. A pesar de ese burdo y brutal intento, la solidaridad entre los trabajadores pudo más. Pablo, otro conductor de la línea B lo expresó Claramente: "No hay miedo a los despidos porque estamos todos juntos unidos y por un mismo objetivo".

"Los despidos fueron la presión que tuvimos, pero aparte de eso, nada. Tenemos muy claro lo que tenemos que hacer y como defendernos, prácticamente no nos intimida eso de la presión que pueda hacer la empresa sobre nosotros." Agregó Danieli "nosotros les garantizamos a nuestros compañeros que tienen el telegrama en su casa, que ellos van a volver al trabajo" aseguró "Los compañeros arriesgaron y estamos de hecho todavía arriesgando un trabajo en el que estamos trabajando seis horas y en estos momentos arriesgar el trabajo es muy difícil. Esto marca una solidaridad muy grande interna Esto se viene construyendo desde hace algunos años" redondeó Christian.

Arriba, el festival está en su apogeo, trabajadores, organizaciones y grupos solidarios han hecho uso de las palabra. Las bandas suenan, la gente se renueva en forma constante.

Christian destaca la solidaridad recibida: "se han acercado y hemos llamado también a distintas organizaciones barriales sociales, sindicales opositoras a la burocracia, políticas y una serie importante de organizaciones que hemos llamado o se han acercado voluntariamente. Se formó una comisión de apoyo a la lucha. Hay varias actividades planteadas y creemos que esa solidaridad externa nos ha fortalecido bastante"

Ya finalizado el festival nos enteramos de la victoria: seis horas para todos, ningún despido, ni máquinas de boletos por ahora.

Mientras, en un bar, por televisión, vemos festejar a los trabajadores en la Estación Congreso de Tucumán de la línea D. Resuenan en la estación, como en la cancha, los cantos a voz en cuello contra los derrotados:

"Salta, salta, salta pequeña langosta, UTA y Metrovias son la misma bosta"