16 de marzo del 2002

Tito Kayak (destacado desobediente civil por la causa de Vieques) cuenta sobre las torturas a las que fue sometido en cárceles del imperio

Refundación Comunista

El líder ambientalista y fundador de Amigos del M. A. R. Alberto (Tito Kayak) De Jesús Mercado luego de haber firmado su libertad en el Programa Halfway House tras haber cumplido un año de condena por actos de desobediencia civil en Vieques denuncia el maltrato físico y psicológico institucional que sufrió en la cárcel federal.
De Jesús quién estuvo encarcelado en el Metropolitan Correctional Center en Manhattan fue agredido físicamente y fue objeto de constantes amenazas, insultos y burlas. Además, el líder ambientalista recibió un trato inhumano tras habérsele negado las necesidades básicas como: agua, servicios médicos inmediato, visitas, servicios sanitarios e higiénicos.
"Hubo un patrón de conducta constante y progresiva contra mi persona desde el mes de agosto del pasado año. Desde que entré al sistema me colocaron en el llamado hoyo. En MCC no fue la excepción a esta norma tan absurda. Entre los meses de agosto a noviembre del pasado año, cuando estaba en la Special Housing Unit, o el llamado hoyo no tenía servicio de baño, sin agua, sin luz, sin cepillo dental, sin toallas, la comida me la daban fría y con un encierro de 24 horas casi todo el tiempo.
El 17 de enero del presente año, un día antes del supuesto traslado a mi Islita, me encerraron nuevamente en el hoyo creo que por saludar e intentar despedirme de un confinado. Cuatro oficiales de la MCC me agredieron físicamente. Estos oficiales me llevaron a una celda, me agarraron, me dieron una bofetada, me dieron puños en la espalda, patadas y un rodillazo. Yo no entendía por qué. Me dijeron: `Tú vas hacer lo que queramos. Te vamos a alimentar'.
Yo seguía sin entender lo sucedido. Solicité que me llevaran al médico, pero no fue hasta cinco días después que recibí atención médica y hasta ocho días después que me sacaron placas. Luego me encerraron en el hoyo, con un foco de luz constante y una cámara que me monitoreaba todo el tiempo. Estuve aproximadamente nueve días sin bañarme, sin derecho a visita, sin derecho a llamadas telefónicas, me congelaron la comisaría. No podía comprar sellos para comunicarme con mi familia, mis amistades y con los Amigos del M. A. R. Los guardias se burlaban de mi y me insultaban.
Alguien me indicó que esto era un complot contra mi persona. Creo que toda esta situación no tiene la mínima razón. Nosotros mantenemos la postura que no vamos a ser sirvientes del sistema carcelario. Es importante decir que hasta este momento no se han entregado mis pertenencias", relató De Jesús.
"En relación a la situación de Vieques, no estaré libre hasta que la marina de guerra se vaya de nuestra hermana Isla Nena. No me siento completamente libre hasta que Carlos (Taso) Zenón, su hijo Yabureibo y el estudiante Pedro Colón Almenas estén aquí conmigo. Estos son los verdaderos héroes", afirmó el fundador de Amigos del M. A. R.
"Luego de relatar esta triste situación, quiero reservar un espacio sagrado y muy especial para decirle gracias a mi pueblo. La primera palabra que me viene a la mente es gratitud. Gracias al Pueblo de Puerto Rico por las muestras de cariño y solidaridad para conmigo, mi familia y los Amigos del M. A. R. Gracias a todas las personas en Puerto Rico y en Nueva York que hicieron las gestiones para el traslado a mi patria. No se me debe nada, soy yo quién está en deuda con todo el mundo y con mi Puerto Rico", recalcó De Jesús.
Tito Kayak fue trasladado al Programa Halfway House (Media Casa), el 13 de febrero tras una intensa campaña iniciada por los Amigos de M. A. R. a través de solicitar al Pueblo de Puerto Rico, a los Congresistas, amistades y organizaciones a favor de la lucha de Vieques ayuda para esta gestión. A eso de las 7:15 de la mañana de hoy, Tito Kayak firmó los documentos que le garantizaban su libertad y el fin de una sentencia de un año de cárcel impuesta por el juez Héctor Laffite. Luego de dos semanas en dicho Programa, fue modificada su sentencia a arresto domiciliario con las condiciones de reportarse al mismo y de otorgarle tiempo para trabajar e ir a la iglesia.
Colectivo de Resistencia Amigos del M. A. R.