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Latinoamérica

También aumentaron los casos de encefalitis viral, meningitis y tuberculosis
Perú: pobres de puerto El Callao afectados por plomo

En el puerto El Callao, oeste de Lima, existen cinco barrios cuyos moradores viven en extrema pobreza condenados a convivir con plomo porque un sector se opone a mudarse y también por la falta de un programa gubernamental para trasladarlos, pese a que un importante número de niños están afectados por el mineral.

 
En el puerto El Callao, oeste de Lima, el drama de los niños pobres.

ROBERTO CORTIJO, LIMA, AFP / LA JORNADA
En estos barrios se ha detectado a menores que presentan cuadros de enfermedades con plomo en la sangre lo que contribuyó a agravar casos de encefalitis viral, meningitis y turberculosis.
En 1998 la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) del Ministerio de salud hizo una muestra en los cinco barrios sobre 898 menores que arrojó que 444 de ellos tenían plomo en la sangre. De esa cantidad 94 estaban por debajo de las 10 milésimas de gramo por decilitro de sangre, lo que es permisible; el resto, es decir 350, estaban por encima y de ellos había unos 82 casos con más de 40 milésimas, lo que es calificado de elevado.
Las madres de estos niños --cuatro en total-- informaron que no cuentan con asistencia médica adecuada para esas enfermedades por parte del municipio del Callao ni del gobierno.
Doctores de un hospital indicaron a la AFP que el plomo en la sangre de los niños les afecta el crecimiento, provoca retardo mental, alteraciones nerviosas, merma en el proceso de aprendizaje, afecta el sistema nervioso y les crea alteraciones nerviosa.
Explicaron que en los barrios Puerto Nuevo, Chacaritas, Frigorífico, Chalaca y Santa María se han presentado niños con esos problemas de salud y recomendaron el traslado de las familias a otra zona como única solución para erradicar el plomo de su sangre. La presencia del plomo en esa zona data de hace 70 años cuando existían siete depósitos que almacenaban ese mineral.
Actualmente sólo hay dos almacenes autorizados: Cormin y Perubar.
La contaminación en los barrios se produce por la manipulación del mineral, es decir los vehículos no eran cubiertos y el polvo del metal se caía, se impregnaba en el aire libre y los fuertes aires del puerto contribuían a su expansión a varios kilómetros, siendo los más perjudicados los cinco barrios que se levantaron cerca de los depósitos hace 50 años.
Voceros de los dos depósitos autorizados indicaron que no saldrán porque están ubicadas en una zona industrial, cerca de la línea férrea para transportar el mineral y próximos al puerto para el traslado por barco. Ana María González, funcionaria de Digesa, dijo a la AFP que el problema en esos barrios "es muy complejo porque las familias se oponen a vivir en otro lugar".
En el ministerio de Transportes y Vivienda, un vocero informó que no existe un programa para esas familias.
Los pobladores dicen que no se van porque trabajan en las fábricas de la zona industrial, otros son pescadores cuyo centro de labor está a unos metros, en el puerto.
En medio de ese drama, "los niños afectados sólo conseguirán ser tratados para disminuirle el plomo de la sangre pero no su eliminación.
El mineral está impregnada al interior de las casa, en las paredes, en las calles terrosas, en la ropa, el cuerpo y cada metro por donde caminan", dijo González.
"Si se elimina la fuente de emisión o se controla esa fuente a cero, los problemas para los pobladores continuarán porque el sedimento del mineral está en el suelo y con sólo removerlo para instalar servicios básicos --de los que carecen esos barrios-- se agravaría el problema de salud de los niños", agregó.