Promueven ocho organizaciones sociales cubanas volver "intocable" el régimen político
Nos movilizamos para que el mundo tome conciencia de lo que está pasando, señala el líder

GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL

La Habana, 10 de junio. Cuba inició hoy un mecanismo legal para volver "intocable" su régimen político de partido único y propiedad estatal y para anular las vías constitucionales que permitieran modificarlo, en lo que el presidente Fidel Castro indicó que era una respuesta a la política de "estilo nazi" del mandatario estadunidense George W. Bush.
El endurecimiento cubano también responde tácitamente a demandas de apertura, planteadas el mes pasado aquí por el ex presidente Jimmy Carter, y en la práctica descarta una iniciativa opositora, conocida como Proyecto Varela, para someter a referéndum una eventual reforma.
"Nos estamos movilizando con energía suficiente, entre otras cosas para ayudar a que el mundo tome conciencia de lo que está pasando", manifestó Castro, quien refrendó tramos de su discurso del sábado pasado en Santiago de Cuba, en el que acusó a Bush de imponer un gobierno de corte "nazi" en el mundo. Ahora "hay más gentes asustadas de los que estaban asustados ante Hitler", agregó el mandatario, insistiendo en una idea que también expresó hace dos días.
Los líderes de ocho organizaciones sociales hicieron pública una propuesta a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP, parlamento unicamaral), para "consignar expresamente la voluntad del pueblo de que el régimen económico, político y social consagrado en la Constitución es intocable".
Entre las bases que definen al régimen cubano están la declaración de Estado socialista, la definición del Partido Comunista de Cuba (PCC) como "vanguardia organizada de la nación cubana" y "fuerza dirigente superior de la sociedad y del Estado" y el sistema de economía socialista sobre los medios fundamentales de producción.
El breve texto fue leído por uno de los firmantes, el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), Pedro Ross, en una reunión especial de los órganos directivos de las ocho agrupaciones en pleno, a la que además de Castro asistieron los vicepresidentes Raúl Castro y Carlos Lage y otros altos funcionarios del gobierno y el PCC.
"Descaradas y desvergonzadas amenazas" de George W. Bush
Al concluir la asamblea, el mandatario cubano convocó a una "marcha gigante" de toda la población en todos los municipios del país, para respaldar la propuesta, que formalmente aún debe ser conocida y aprobada por la ANPP, cuya primera sesión anual podría celebrarse este mes. Castro pidió que cada pequeña población hasta de cien habitantes salga a manifestar apoyo y que se registre gráficamente cómo "millones en las ciudades van a hacer suya esta iniciativa".
"Hemos estado respondiendo a las más descaradas y desvergonzadas amenazas contra nuestro país", señaló Castro en alusión a los discursos de Bush del 20 de mayo en Washington y Miami y de la semana pasada en la academia militar de West Point.
"Hubiéramos podido portarnos con cierta elegancia si fueran cuerdos, si no fueran torpes, si no fueran perdonavidas, si no hubieran utilizado contra nosotros un lenguaje de matones", añadió el mandatario. "Y me refiero al caballero", subrayó Castro, aludiendo a Bush. "Hitler no llegó a usar un lenguaje semejante".
Disposiciones constitucionales aludidas
Según la Constitución, las dirigencias de las organizaciones firmantes tienen capacidad para promover leyes ante la ANPP. La reunión de hoy, constituida en asamblea extroardinaria de esas agrupaciones, se efectuó por primera ocasión.
La propuesta pide que tenga rango constitucional la decisión de volver "intocable" el régimen político y se derogue "cuanta disposición anterior se le oponga o contradiga".
El artículo tercero constitucional establece que "la soberanía reside en el pueblo, del cual dimana todo el poder del Estado" y reconoce a todos los ciudadanos el "derecho de combatir por todos los medios, incluyendo la lucha armada, cuando no fuera posible otro recurso, contra cualquiera que intente derribar el orden político, social y económico establecido por esta Constitución".
La propuesta impone límites al artículo 88-g de la Constitución, por la cual cuando menos 10 mil electores pueden someter un proyecto a la ANPP. En este resquicio legal se apoyaba el Proyecto Varela, que el mes pasado entregó al parlamento su demanda, respaldada con más de 11 mil firmas. También sería un candado para el artículo 137, por el cual esa norma puede ser reformada "total o parcialmente".
Intervención del presidente
Al final de la sesión de tres horas, que fue transmitida íntegramente en cadena nacional de radio y televisión, Castro habló durante casi una hora. Explicó que la política de Bush no es producto de un error: "Aquí hay filosofía, aquí hay pensamiento dominante, aquí hay propósito de establecer el orden imperial en el mundo". El líder cubano destacó la ofensiva política reciente de Estados Unidos contra su país, incluyendo la desmentida acusación de que la isla fabrica armas biológicas. En la réplica, "nosotros somos duros... no con adjetivos, somos duros con los argumentos y con las razones", añadió.
Además de Pedro Ross firmaron la propuesta Juan Almeida, presidente de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana; Orlando Lugo, presidente de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños; Vilma Espín, presidenta de la Federación de Mujeres Cubanas; Juan Contino, coordinador nacional de los Comités de Defensa de la Revolución; Hassán Pérez, presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios; Miriam Janet Marín, presidenta de la Organización de Pioneros José Martí, y Claudia Felipe Torres, presidenta de la Federación de Estudiantes de Enseñanza Media, todos miembros del PCC o de su rama juvenil, y que presidieron la reunión, en el auditorio principal del Palacio de las Convenciones.