RUBEN CESPEDES - ASUNCION, ANSA
La decisión, que deberá pasar al Senado, fue aprobada en medio de rumores que involucran a diversos sectores políticos en maniobras referidas a las próximas elecciones presidenciales, el 27 de abril de 2003.
El presidente del Congreso, senador Juan Carlos Galaverna, atribuyó la sorpresiva decisión a "una maniobra líbero-oviedista" que apunta a lograr el indulto del ex general golpista Lino Oviedo, refugiado en Brasil, para ser candidato presidencial en los próximos comicios.
La idea, que la prensa debate desde hace días, consiste en elegir un vicepresidente funcional a los oviedistas en reemplazo del renunciante Julio Franco. Ese reemplazante, tras el eventual desplazamiento de González Macchi, asumiría como presidente para indultar al ex militar.
Oviedo está condenado a 10 años de cárcel por una intentona golpista en 1996 y tiene procesos judiciales abiertos como presunto autor intelectual del asesinato del vicepresidente Luis Argaña y de siete manifestantes en 1999, causas que por ahora le impiden legalmente integrar una fórmula.
Otras versiones parlamentarias consideran que detrás del alejamiento de González Macchi están los intereses personales de Galaverna, en la actualidad ubicado en primer lugar en la línea de sucesión presidencial mientras siga vacante la vicepresidencia. El diputado Rafael Filizzola, designado como uno de los fiscales que deben sostener la acusación contra González Macchi, dijo ayer que "ante la posibilidad real de destitución del presidente, es absolutamente imprescindible designar a un vicepresidente que pueda reemplazarlo".
"No voy a renunciar", replicó hoy González Macchi desde Brasilia, donde participa de la Cumbre del Mercosur.
La propuesta fue presentada por el diputado Blas Llano, del opositor Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y logró 50 votos a favor, ninguno en contra y once abstenciones.
Llano enumeró entre los motivos de su pedido la presunta participación del presidente en el desvío de 16 millones de dólares de bancos privados en liquidación a cuentas particulares en Estados Unidos, el encubrimiento de un funcionario acusado de corrupción y la tenencia de un auto robado en Brasil.
El diputado fundamentó que el mal desempeño de González Macchi implica "toda una gama de nula política económica, la agudización de la crisis social, falta absoluta de combate a la corrupción que afecta a todo el aparato estatal, impunidad, inseguridad, nula política de salud y educación". Ahora la Cámara de Diputados debe formular la acusación contra González Macchi y luego el Senado, convertido en Tribunal, deberá adoptar una decisión por mayoría absoluta de dos tercios de sus 45 miembros. En caso de hallar culpable al presidente, éste será separado de su cargo y el caso pasará a la justicia. *