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Internacional

20 de febrero del 2002
El filósofo Gustavo Bueno define el programa
'Operación Triunfo' como 'basura fabricada'


El mundo

El filósofo Gustavo Bueno analiza en el libro 'Telebasura y democracia' (Ediciones B) las razones por las que espacios como 'Operación Triunfo' o 'Gran Hermano' son capaces de congregar ante la pequeña pantalla a millones de espectadores, además de desvelar la relación entre televisión y democracia, y repasar la programación de la televisión española de las últimas décadas.
Bueno se refiere en su libro a los éxitos de 'Gran Hermano' y 'Operación Triunfo' por ser "referencias universales", y recuerda al lector que en una sociedad democrática "la audiencia siempre debe tener la última palabra", dijo ayer en rueda de prensa.
"La audiencia en la sociedad democrática es la que manda, y la televisión basura tiene que obedecer a esta demanda", señaló, a la vez que, partiendo de la premisa de que "sin basura no podríamos vivir", afirmó que "la basura muchas veces está en el que ve la televisión" y no en el propio medio.
Así, el también autor de 'Televisión: Apariencia y verdad' se refirió a 'Gran Hermano' como un espacio televisivo "obsceno", y a 'Operación Triunfo' como "basura fabricada" o "basura ética" porque el planteamiento del espacio de la cadena pública, según sus propias palabras, "es deleznable".

Los valores de Operación Triunfo

"Operación Triunfo' propone valores abstractos y expectativas de igualdad de oportunidades", aseveró el filósofo, que también recordó que muchos profesores de conservatorio "están indignados" con este programa. "Ya lo dijo Platón: 'La corrupción del Estado empieza por la música'", agregó el que fuera catedrático en la Universidad de Oviedo hasta 1998.
Así, hizo una clara diferenciación entre "basura fabricada", que se hace deliberadamente para conseguir más audiencia, y basura "desvelada, como los documentales pornográficos de animales de La 2", bromeó Bueno, quien recriminó la postura de ciertos políticos al negar haber visto alguna vez 'Gran Hermano' y cambiar de chaqueta ahora con 'O.T.'.
"Con 'Gran hermano', los políticos dieron la espalda al programa, sorprendentemente no se interesaban por ello. Ahora han meditado sobre el ridículo de decir que lo veían y ese sentimiento de culpabilidad les ha hecho volcarse con 'Oparación Triunfo'", afirmó Bueno, quien recriminó esta acción argumentando que "los políticos se veían reflejados en 'Gran Hermano', al ver que gente que no sabe hacer nada puede llegar a la fama".
Finalmente, indicó que "la televisión rompe la intimidad y altera la democracia; es un invento en donde, a merced del descubrimiento, se ha logrado perforar los elementos opacos". La relación entre televisión y democracia es "esencial" para Bueno, porque "está ligada al estado de bienestar". "La televisión es imprescindible para la sociedad de mercado. Televisión y democracia son instituciones ligadas", concluyó.