En Marcha

Pachakutik no logra unificarse respecto de qué postura adoptar frente al gobierno. Varios de sus dirigentes han pasado de la crítica a la conciliación mientras en las bases crece el descontente por la derechización que experimenta la gestión de Lucio Gutiérrez.

La alianza de gobierno PSP-Pachakutik atraviesa por un momento crítico. La destitución de la Ministra de Educación Rosa María Torres, por disentir públicamente con Lucio Gutiérrez, ha alimentado la corriente existente al interior de Pachakutik y en las bases del movimiento indio, que pugna por abandonar el cogobierno. Pero esta no es la única razón de la crisis; de hecho, la decisión del MPD -adoptada hace un mes- de separarse de la gestión gubernamental por el evidente proceso de derechización que muestra, no sólo lo debilitó y afectó la imagen del mismo sino que influyó en aquellos sectores de la alianza que piensan de la misma manera.

En estos seis meses, Pachakutik ha evidenciado algunas debilidades. La principal, la existencia de tendencias, de grupos con sus propias valoraciones y opiniones políticas, que le impide actuar unificadamente. Ahora mismo, hay quienes manifiestan la necesidad de dejar los cargos en el gobierno y, otros que opinan que se debe continuar en ellos. Hay quienes critican el sometimiento al FMI y otros que buscan la forma de justificarlo. Pero en una cosa parece que todos coinciden, en dejar de lado la movilización de las masas para presionar a Gutiérrez el cumplimiento del Programa de Gobierno presentado en la campaña electoral, a pesar de que en las bases crece el deseo de mostrar su descontento en las calles.

Una imagen muy mala proyecta Pachakutik. El reclamo por la destitución de Rosa M. Torres, no ha tenido la fuerza que se esperaba y debía tener. Bien se puede decir que se lo hizo para cumplir con la formalidad. Esto está en correspondencia con el tipo de discurso que sus dirigentes manejan los últimos meses. Lluco e Iza, para citar dos casos, han bajado el tono de sus críticas, si se recuerda los reclamos de los primeros meses de gestión, han pasado de la crítica a la conciliación.

Pachakutik ha anunciado que el 8 de agosto adoptará un postura definitiva, en una nueva reunión evaluativa de la gestión gubernamental, una de las tantas que no han hecho más que dilatar la adopción de una línea coherente con las necesidades políticas del momento. Si en esta ocasión, la dirección de PK no atiende el sentimiento de sus bases, las dificultades políticas internas serán muy graves y de ello sacará provecho Lucio Gutiérrez, en su decisión de transitar por los caminos de la derecha.

PCMLE