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Latinoamérica

El caso del guerrillero extraditable.

La persona equivocada Tener el mismo apodo de un guerrillero y la misma amante de un argentino le puede costar la inminente extradición a los Estados Unidos. Nelson sabe que ha sido calavera y que ha transgredido algunos códigos y normas. Pero ninguna de sus infidelidades, mentiras, trampas, chicanearías y embustes ameritan los tres años que lleva tras las rejas. Y muchísimo menos la extradición.
Guerrillero extraditable - La persona equivocada.
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Por Juan Cendales

E-Mail:
paco@col1.telecom.com.co
Web:
www.pcomunistacolombiano.org.
Nelson Vargas Rueda puede sentirse con toda razón la persona mas de malas del mundo, después de que hace unos tres años un clandestino amor lo hacía sentirse la mas feliz y afortunada. Su vida transcurría normalmente en la polvorienta Saravena, en el departamento de Arauca. Allí estudió unos pocos años de primaria y luego se dedicó a "oficios varios" muy común en el rebusque nacional que hace que todo el mundo sepa de todo y haga de todo. Fue finquero, vendedor de cachivaches y comerciante de plátano. Tuvo alguna ligera participación en las actividades de la Unión Patriótica, sin llegar a destacarse como dirigente o cuadro político..
Y desde esa época ya lo apodaban "El marrano"..
Un día conoció a Yolanda con quien iniciara un tormentoso romance, que debían vivir a las escondidas pues ella era la novia oficial de un argentino que desde Bogotá se había ido tras de ella, y él mismo andaba por el segundo arrejunte. Pero era uno de esos amores secretos que la chismografía popular conoce al dedillo y al que le seguía todas las peripecias y aventuras. Para esta época nuestro amigo había desarrollado una especial cualidad de chicanero, estimulada por la aureola de tener de cachudo nada menos que a un churrasco, proeza pública en un pueblo tan machista como Saravena y seguidores, como él, de las aventuras de Pedro el escamoso, que también se batía en lides amorosas con un hombre de la misma patria de Gardel..
Por estos días se había producido en la frontera con Venezuela el asesinato de los tres indigenistas norteamericanos y salió a la luz pública la participación en él de un guerrillero apodado "El marrano".
En el pueblo empezaron a mamarle gallo y nuestro amigo creyó que esto le deba mas cayé y empezó a ufanarse de su nada elegante apodo. Se dice que en sus frecuentes borracheras alardeaba de su apodo y supuestas hazañas ilegales. Y que similares alardes hacia ante su clandestino amor..
Pero compartir el apodo y el amor y ser tan lenguisuelto le trajeron la desgracia. Dicen en el pueblo que en un arranque de celos el argentino lo delató ante las autoridades como si se tratara verdaderamente de "El marrano". Lo detuvieron y condujeron a la capital en medio de un impresionante despliegue militar. Y a pesar de que casi todo el pueblo ha testimoniado que es el marrano equivocado, la justicia ha seguido inmutable su camino..
Y para aumentar sus desgracias el 15 de septiembre del 2001 un recluso le pegó un tiro en una pierna , que tuvieron que amputarle. La familia demandó al INPEC administrativamente, y estos para librarse del pago de la indemnización y para estar de moda con el cuento de los autoatentados alegan ahora que el mismo se disparó para facilitar una supuesta fuga..
Esta es la verdadera historia del supuesto primer guerrillero colombiano que se extraditaría a los Estados Unidos..
Nelson sabe que ha sido calavera y que ha transgredido algunos códigos y normas. Pero ninguna de sus infidelidades, mentiras, trampas, chicanearías y embustes ameritan los tres años que lleva tras las rejas. Y muchísimo menos la extradición..
Ni siquiera la culpa de tener en completo abandono a sus cinco pequeños hijos..
Y espera que alguna autoridad caiga en cuenta que van a extraditar a la persona equivocada..