Reciba un saludo bolivariano y revolucionario. La patria reclama y el pueblo organizado responde, en miras a consolidar procesos que permitan profundizar la transformación social, en lo que tiene que ver con la participación ciudadana y su conexión con el desarrollo político/cultural. Por ello, en la búsqueda de constituir espacios articuladores del protagonismo de base y la acción de gobierno se organizó en el país una cruzada cultural para la conformación, formación, discusión y reflexión de los diferentes sectores socioculturales que hacen vida en nuestras comunidades y que tienen como estrategia organizativa las Redes Socioculturales..
Este proceso se inició con un encuentro realizado el 18 de enero de 2002, en el CELARG de Caracas, de la cual se derivaron una serie de jornadas regionales e interregionales para facilitar la construcción y articulación de una red de redes socioculturales, orientadas a definir sus rasgos propios en el marco del genérico, conocido como redes sociales, donde confluyen otras fórmulas de participación y asociación, según los objetivos de sus campos de acción. Así, las redes culturales son variantes de organización social, en sus específicos:.
culturales, artísticos y artesanales, que más allá de sus autonomías, impulsan el cambio en sincronía con las realidades locales, regionales y nacionales del pueblo venezolano para devenir sus voceros..
Los encuentros regionales y locales, celebrados en formas sucesivas fueron mecanismos de consulta permanente con las bases sociales de la Venezuela del cambio que traspasaron las barreras de la exclusión impuesta por una democracia supuestamente representativa, y lograron mantener, en medio de conflictos internos y externos, con vicios o no, sus anclajes organizativos, para intentar hoy a la luz de una Nueva Constitución, el establecimiento de un diálogo transparente con el Estado en el marco de una democracia Protagónica y Participativa..
La concreción de estos espacios de participación concluyó con La Asamblea Nacional de Redes Socioculturales, realizada en el Cuartel San Carlos el 24 de Agosto del 2002, donde participaron aproximadamente 2.000 personas representantes de la geografía nacional, luego de un largo recorrido y de producción de un fecundo diálogo, sostenido en el tiempo, con los actores territoriales que proponen un cambio de la vida nacional, desde, en y por la cultura, lo cual constituye un ejercicio permanente por construir el país al cual se aspira: democrático, participativo, plural, pacífico, en libertad e incluyente, que se reconozca multiétnico, pluricultural, en la diversidad y respeto por el otro. Este evento marcó la primera etapa para la construcción de la democracia cultural participativa y protagónica, a través del componente básico para edificar un nuevo orden en calidad de tejido social articulado en redes interactivas, desde las realidades locales..
Ello hace de las actividades cumplidas hasta la fecha, un movimiento cultural de transformación política en profundidad, democrático e inédito, que permita establecer las bases para construcción del cambio sociocultural y el desarrollo de un proceso de ciudadanía cultural que apenas comienza. Las redes socioculturales se constituyen así, en un componente de participación fundamental del Sistema Nacional de Cultura (SNC Venezuela) y la construcción de los Consejos Comunales de Cultura que permita su incorporación en los Consejos Locales de Planificación Publica..
El resultado de esta gran Asamblea fue la presentación, lectura y posterior suscripción por todos los asistentes de una declaración que se postuló en DEFENSA DE LA CONSTITUCIÓN, LA PARTICIPACIÓN Y LOS DERECHOS CULTURALES y expresa:.
Nosotros y nosotras, agrupaciones culturales, pensadores, cultores, artesanos, articulados en diferentes modalidades organizativas, tejedores de sueños por un país mejor, reunidos en el Museo Histórico Cuartel San Carlos, en la ciudad de Caracas, procedentes de todos los rincones del país, preocupados sensiblemente por el sector cultura venezolano hacemos la siguiente declaración:.
CONSIDERANDO .
Que a partir del año 1999, con la aprobación de la Nueva Constitución Bolivariana de Venezuela, el sector cultura logró un status constitucional sin precedentes en la historia venezolana, destacando en su preámbulo la necesidad de "refundar la República para establecer una sociedad democrática, participativa y protagónica, multiétnica y pluricultural en un Estado de justicia federal y descentralizado, que consolide los valores de la libertad...(y..que)...asegure el derecho a la vida, al trabajo..a la cultura.." .
CONSIDERANDO .
Que la Constitución Bolivariana de Venezuela en sus artículos 98, 99, 100 y 101 refirma el reconocimiento a la diversidad cultural haciendo énfasis que..
"…las culturas populares constitutivas de la venezolanidad gozan de atención especial, reconociéndose y respetándose la interculturalidad bajo el principio de igualdad de las culturas…" .
CONSIDERANDO .
Que a pesar de los avances en el marco constitucional del Estado el sector cultura quedó relegado a una desactualizada Ley de Cultura de 1975 que no recoge la nueva dinámica social, política y cultural que vive el país a partir de 1999..
CONSIDERANDO .
Que el sector cultura a lo largo de estos tres años no ha logrado la JERARQUIA INSTITUCIONAL como estrategia de Estado de acuerdo a los equilibrios diseñados en la visión de país en proceso de refundación..
CONSIDERANDO .
Que el presupuesto cultural del Estado se ha desmejorado en los últimos años, donde se desatienden los acuerdos internacionales firmado por Venezuela ante Naciones Unidas que recomienda que el presupuesto de la cultura debe alcanzar el 3 por ciento del PIB..
CONSIDERANDO .
Que en los últimos tiempos se han redimensionado las políticas culturales, desde el Estado, para buscar mecanismos de participación efectiva comunitaria expresadas en las políticas de cogestión, tomando en cuenta los intereses de los actores culturales en las diferentes regiones del país .
CONSIDERANDO .
Que las agrupaciones culturales y los actores emergentes del sector, han logrado introyectar su papel como sujetos históricos e institucionales más allá de la limosna del subsidio, y que con o sin el paternalismo estatal han logrado sobrevivir y mantener dignamente sus acciones y defensa autónoma de sus expresiones culturales contextualizadas en sectores urbanos, suburbanos, rurales, fronterizos y étnicos..
CONSIDERANDO .
Que la articulación de las diferentes organizaciones culturales en Redes con ejes de coincidencias de interés, sobre la base del pluralismo y la diversidad de opiniones, ha permitido avanzar hacia la construcción de un modelo de gestión cultural protagónico, colectivo y participativo, superando el modelo cultural rentista y estatista que privilegió determinadas áreas del quehacer cultural expresado en el individualismo, el clientelismo partidista, provocando prácticas excluyentes que aún se manifiestan en el aparato cultural en proceso de reestructuración y donde todavía persisten contradicciones en la totalidad del sector..
ACORDAMOS .
1. Exigir a la Asamblea Nacional la discusión y promulgación de una Nueva Ley Orgánica de Cultura que le de estatus jurídico al sector..
2. Sugerir al Estado Venezolano la dignificación del Presupuesto Cultural al 3 por ciento del PIB como sugiere la UNESCO..
3. Sugerir al presidente de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Chávez Frías, la creación del Ministerio de la Cultura para darle jerarquía institucional al sector y profundizar la revolución cultural..
4. Poner en práctica la Ley de los Consejos Locales de Planificación Pública en materia cultural para dinamizar la construcción de un nuevo modelo de gestión cultural que parte de lo local..
5. Proceder a la construcción inmediata del Sistema Nacional de Cultura, en calidad de instrumento que garantice la normalidad estratégica incluyente de las autonomías: nacionales, estadales y municipales, para consolidar la jerarquía de la cultura y la acción cultural del Estado como finalidad de todo desarrollo integral de la nación..
6. Solicitar la declaratoria del Árbol Samán de la Trinidad, ubicado en las cercanías del Cuartel San Carlos y el Panteón Nacional, como emblemático de historia viviente patrimonial de Caracas, por ser el Árbol que le dio sombra al Libertador Simón Bolívar, a Don Andrés Bello y fue admirado por Alejandro de Humbolt..
7. Solicitar la declaratoria de patrimonio cultural del Tamunangue o Son de Negros.