VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Latinoamérica

24 de diciembre del 2003

Dos vidas paralelas o cómo las "democracias" de Chile y Uruguay premian a los represores

Germán F. Westphal

El capitán de navío uruguayo Juan Craigdallie, acusado de torturador por un fotógrafo naval y nombrado -en principio- Agregado Naval en Buenos Aires. Como Argentina avisara que no lo quería, el Presidente Batlle debe enviarlo a otro sitio. Una buena posibilidad sería la ONU.

El coronel del ejército chileno Pedro Pablo Bustos Valderrama, acusado por una investigación periodística de ser el autor intelectual de por lo menos dos asesinatos durante la dictadura en su papel de agente de la CNI, la policía secreta de Pinochet. Además, como guinda del pastel, Bustos ostenta un nutrido prontuario judicial de haber abusado física y sicológicamente de su ex-mujer. El Presidente Lagos lo mantiene como Agregado Militar Adjunto en la ONU.