VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Latinoamérica

20 de noviembre del 2003

Bolivia
Mesa-Sánchez de Lozada: las distancias se acortan

Andrés Soliz Rada
Econoticiasbolivia.com


Carlos Mesa y Gonzalo Sánchez de Lozada (GSL) han caminado juntos, ideológicamente, durante varios lustros. GSL político-empresario, siempre tuvo en Mesa, periodista- empresario, un sólido respaldo a sus concepciones neoliberales desde la televisión y columnas periodísticas. (Ver la nota: "Los Gonistas": "La Epoca", 7-09-03, y mi polémica con el hoy Presidente de la República en su libro "La Espada en la Palabra". Editorial "Santillana". La Paz-Bolivia. Octubre de 2000. Páginas 463 a 519).

Sin embargo, el 19 de octubre pasado, Mesa, en su primer discurso como Jefe de Estado, abrió una enorme brecha con su predecesor al plantear la asamblea constituyente, el referéndum vinculante y la modificación a la Ley de Hidrocarburos, tres objetivos a los que GSL se había opuesto de manera radical.

La brecha se redujo cuando Mesa designó a Alvaro Rejas en el cargo de Ministro de Minería e Hidrocarburos, quien, en su primera declaración pública, dijo que se exportaría gas a EEUU, probablemente, por y, además, para Chile. Si eso es así, ¿para qué el referéndum? Tal posición fue asumida sin pronunciarse sobre los temas previos que preocupan a la ciudadanía: La propiedad del gas y del petróleo entregada a las compañías por el DS 24806, de 4-8-97, la elaboración de una estrategia energética nacional, la refundación de YPFB y las modificaciones a la ley del sector.

Mesa volvió a coincidir con GSL al no promulgar la Ley de Transparencia Informativa, vetada por el ex presidente, con prepotencia e irracionalidad, durante 14 meses, a fin de impedir que el país conozca los negocios del Estado. El prefecto de Santa Cruz, Carlos Hugo Molina, ha dispuesto que todo el movimiento económico de su despacho sea público. ¿Por qué no imitar su ejemplo?

El Ministro de Hacienda, Javier Cuevas, muy cercano al "gonismo" (fue estrecho colaborador de la ex alcaldesa Gaby Candia), aliado al Superintendente de Pensiones, Valores y Seguros y ex director de Transredes, Guillermo Aponte, se empeña en fusionar el Fondos de Capitalización Colectiva (FCC) y el Fondos de Capitalización Individual (FCI), con lo cual se hará desaparecer, con el pretexto de seguir pagando el bonosol, los 1.600 millones de dólares que teóricamente valían las acciones de las empresas estratégicas antes de la "capitalización", las que debían beneficiar a los bolivianos. Las capitalizadas presionan para que esas acciones se vendan lo antes posible, sin ninguna transparencia, como ha ocurrido con todo el proceso de liquidación del patrimonio público.

Mesa no ha movido un dedo, como lo hizo con el ex Defensor del Pueblo, Iván Zegada, para lograr la renuncia de los nuevos magistrados del Tribunal Constitucional, apadrinados por Carlos Sánchez Berzaín. La composición de ese Tribunal hizo que GSL adelantara su disposición de afrontar un juicio de responsabilidades pues sabe que esos magistrados aseguran su impunidad. Es posible detener la violencia en el Chapare autorizando a los cocaleros a tener medio cato de coca, a cambio de su compromiso de luchar contra el narcotráfico. Si los campesinos incumplen esta condición perderían su área de cultivo. Esta solución desagrada a David Greenlee, pero más importante que el humor del Embajador norteamericano es derrotar a los traficantes de droga y pacificar al país.

El nuevo Presidente ha demostrado buenos reflejos al presentarse en concentraciones populares en la Plaza San Francisco y en El Alto de La Paz, así como al dialogar con empresarios de Santa Cruz. Necesita, a partir de allí, suprimir los sobresueldos de los altos funcionarios y terminar con el festín de los gastos reservados. Así podrá negociar con autoridad moral frente a la COB y Felipe Quispe. Pero las hábiles movidas tienen patas cortas, ya que más temprano que tarde Mesa deberá definir si sigue o no las huellas del "gonismo". Y lo anterior se definirá por su valentía o cobardía frente a la necesidad de abrogar el DS 24806. Si no lo hace, tendrá un final parecido al del Presidente expulsado, a quien ni el respaldo de Washington pudo salvar.

*Andrés Soliz Rada es periodista y ex diputado nacional