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Latinoamérica

Condenan envío de tropas de EEUU a Bolivia

La Paz, 17 oct (PL)

El envío de una fuerza militar nortamericana a Bolivia fue condenado hoy por el líder opositor, Evo Morales, quien lo calificó de ilegal y provocador, además de injustificado.
En declaraciones a Prensa Latina, el jefe del Movimiento al Socialismo (MAS) comentó así el anuncio estadounidense sobre la partida a Bolivia de un "pequeño" contingente militar con el supuesto fin de reforzar la seguridad de la Embajada del país del norte y de sus nacionales radicados aquí.
Morales señaló que, según la Constitución de Bolivia, ninguna fuerza extranjera puede entrar al país sin autorización expresa del Congreso, y dijo que la intromisión no se justifica.
Calificó de pretexto la misión de cuidar la seguridad de los norteamericanos residentes en Bolivia -que hoy condenaron la injerencia de Washington en este país- y subrayó que la lucha social que obligó hoy a renunciar al presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, ha sido pacífica y democrática.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la Confederación de Trabajadores de la Prensa de Bolivia, Freddy Morales, dijo que el envío de tropas por Washington es una provocación absolutamente injustificada que asume el alegato del renunciante, de que el pueblo está formado por delincuentes.
Subrayó que no hay riesgos en Bolivia, pues su pueblo no es agresivo y sólo ha protestado con decisión contra la imposición dictatorial y la sangrienta represión del régimen saliente.
Evo Morales, por otra parte, exhortó a la nueva administración del hasta hoy vicepresidente Carlos Mesa, a dejar atrás la política de sumisión a Washington, mantenida por Sánchez de Lozada.
Planteó que el naciente gobierno debe mantener relaciones con Estados Unidos en un plano de dignidad y defensa de la soberanía, para lo que contará con el respaldo de los movimientos sociales.
Tras iniciarse la represión que cobró más de 70 vidas, Estados Unidos respaldó totalmente a Sánchez de Lozada y su embajador aquí, David Greenlee, reunió a los directores de los diarios para advertirles que Washington no reconocería a ningún otro presidente.
Durante las grandes protestas que obligaron a renunciar al gobernante, el secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Jaime Solares, demandó que Greenlee abandone el país por su intromisión en asuntos soberanos.
Solares, el diputado Paulo Bravo y el semanario Pulso denunciaron que Estados Unidos suministró municiones y otros medios usados en la sangrienta represión de las protestas sociales.
El citado periódico afirmó que militares nortamericanos participan directamente en la dirección castrense de las operaciones represivas, y supuestos agentes gubernamentales secuestraron la edición de Pulso que hacía la denuncia.
mgt/mrs