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Internacional

4 de marzo de 2003

Gore Vidal confirma hipótesis del libro "Bush &ben Laden S.A."

Silvia Maldonado
La otra aldea

Bush fue el terrorista que provocó los atentados del 11-S. El nuevo libro del norteamericano Gore Vidal confirma la línea de trabajo inaugurada en diciembre del 2001 por el periodista y escritor argentino Víctor Ego Ducrot, en su libro "Bush & ben Laden S.A.

Por La reciente aparición en Estados Unidos del libro "Dreaming War, Blood for Oil and the Cheney-Bush Junta", del prestigioso escritor norteamericano Gore Vidal, significa un aporte de especial calificación a la línea investigativa inaugurada por el periodista y escritor argentino Víctor Ego Ducrot, quien en diciembre del 2001, pocas semanas después de los atentados del 11-S, publicó su libro "Bush & ben Laden S.A. (Grupo Editorial Norma, Buenos Aires). .
Con nuevos y significativos datos, Vidal confirma la hipótesis principal de Ego Ducrot, quien, basado en fuentes inapelables, explicó que esos atentados surgieron del riñón más agresivo del sistema corporativo financiero norteamericano, cuyo mascarón de proa político es la administración de George W. Bush. A partir del análisis movimientos bursátiles e informaciones de otro tipo, muchas veces cruzadas, el libro "Bush & bel Laden S.A" fue el primero en afirmar que dentro del stablishment norteamericano alguien sabía que los atentados del 11 de septiembre iban a ocurrir. .
El escritor argentino calificó a esos atentados de batalla en "la primera guerra global de las corporaciones financieras" y a partir de una categoría de trabajo que él denomina Imperio Global Privatizado (IGP) se introduce en la descripción e interpretación de la actual etapa imperialista, caracterizada, según el autor, por la hiperconcentración financiera y por la privatización de la gestión política y militar de la facción dominante del sistema, Estados Unidos. .
Asimismo describe los registros, puestos en evidencia el 11-S, en los que se dirime la actual puja interimperialista, que tiene a Estados Unidos y a la Unión Europea (UE) como principales protagonistas. Los acontecimientos actuales en torno a la política agresiva de Washington contra Iraq, vienen a confirmar la hipótesis de "Bush & Ben laden S.A.", sobre todo cuando Francia y Alemania opusieron a la unilateralidad de la administración Bush, conmoviendo el andamiaje político de la UE. .
Si a priori se puede hablar de alguna diferencia interpretativa entre los trabajos de Vidal y Ego Ducrot, ésta se demuestra en que el autor argentino pone el acento en el entramado económico de fenómeno analizado, especialmente en la estrategia del IGP destinada al control de los yacimiento fundamentales de la economía real globalizada: los recursos petroleros, energéticos y naturales en general. Una lectura atenta de ese entramado abre las puertas a la comprensión primaria de la actual coyuntura bélica desarrollada por Estados Unidos contra Iraq y a la forma en queda dibujado el tablero de pujas interimperialistas. .
Esta línea de trabajo reforzada por la notable obra de Gore Vidal también se extenderá gracias a la anunciada aparición del libro ¿"Justicia infinita" o genocidio sin límites?, del argentino Carlos Suárez. .
En una reciente entrevista distribuida por ALAI, Suárez habla de su obra y se suma a los investigadores que señalan a la administración Bush como responsable de los atentados del 11-S..
Por último resulta interesante destacar algunos conceptos vertidos por Gore Vidal en el marco de una entrevista publicada en periódicos de varios países (en Buenos Aires fue recogida por el diario "Clarín"): Así nos gobiernan en la actualidad. Obtuve mucha información a través de los distintos diarios del mundo, a los que cualquiera puede tener acceso. Pasaron dos cosas, y las cuento en detalle basándome en información oficial. Durante una hora y media supieron que los aviones que habían despegado de Boston habían sido secuestrados. La Dirección Federal de Aeronáutica (FAA en sus siglas en inglés) los siguió en el radar y vio que se dirigían a Washington. En la FAA existe una ley que exige (mi padre fue alguna vez director del organismo y creo que fue él quien impuso esa ley) que, en casos de secuestros de cualquier tipo, la Fuerza Aérea debe intervenir en cuestión de cuatro o cinco minutos. No lo hizo. Eso me llamó la atención. No llegaría al extremo de calificar la situación de conspiración. ¿Conspiración de quién? ¿Por qué no intervinieron? Hay algo que realmente me asusta. Lo publicó el periódico "Times of India" unos días después. El diario informaba que el director del servicio secreto paquistaní (agencia que venía trabajando estrechamente con la CIA) se reunió con Tenet, su par norteamericano, en Washington. Hasta ahí se trataba de una de las habituales reuniones entre ambos servicios secretos. Pero en ese momento (y tomo esto del diario conservador "The Wall Street Journa"l) el paquistaní dispuso que Islamabad girara a EE.UU. 100.000 dólares para Mohammed Atta, uno de los atacantes de las Torres Gemelas. ¿No merece eso una investigación? ¿Es antinorteamericano proponer una cosa así? Todo eso quedó atrás, y nunca sabremos qué paso a menos que haya algún tipo de juicio donde podamos hacer preguntas. Pero tenemos un gobierno que se maneja con un grado de secretismo tal, que no nos dice nada de nada. No sabemos quién está detenido en calidad de prisionero de guerra, si se trata de un prisionero de guerra o de alguien que perdió el subte y fue enviado a la isla de Guam. Acá están pasando cosas muy locas. Como usted sabe se suspendieron nuestras libertades civiles a partir de la Ley Patriótica. Yo lo único que quiero es saber por qué pasan esas cosas en mi país, sobre todo cuando hay ciertos poderes que, cuando uno quiere averiguar empiezan a gritar "traición", "teoría conspirativa" para evitar que se investigue. Esto es lo más grave que ha pasado en EE.UU. en los 77 años que tengo de vida. Pasé tres años en el Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial y nunca vi nada tan grave. La gente parece estar descerebrada. Se limita a flotar a la deriva y permite que un presidente diga, "Soy yo el que decide sobre la guerra".