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La vieja Europa

21 de junio del 2003

En el año 2002 el gobierno español rechazó el 95% de las solicitudes de asilo. Este año vamos a más
Un país sin refugiados

La Corriente Alterna

La presentación de solicitudes de asilo en España descendieron el año pasado un 34%. En 2002 se presentaron un total de 6.203 solicitudes, frente a las 9.490 de 2001.

Según los últimos datos ofrecidos ante el Día Mundial del Refugiado que se celebra hoy, nuestro país se ha convertido en el antepenúltimo de la UE en concesión de protección a refugiados. El Gobierno rechazó en 2002 el 95% de las solicitudes. La Comisión Española de Ayuda al Refugiado denuncia que la espectacular bajada de peticiones se debe a la reciente imposición de visados a ciudadanos colombianos y cubanos.

Durante 2002 el Ministerio del Interior sólo concedió el estatuto de refugiado a 175 personas, el 2,8% del total de solicitudes, lo que ha convertido a nuestro país en uno de los más cicateros de Europa a la hora de aplicar la Convención de Ginebra.

La imposición de visado es fuertemente criticada por las ONG teniendo en cuenta que ocupan el tercer y cuarto lugar dentro de los peticionarios: los cubanos

presentaron el año pasado 1.164 solicitudes y los colombianos, 1.065. Sólo se encuentran por delante de éstos los nigerianos, que presentaron 1.445 peticiones.

Al proceso final, la obtención del Estatuto de Refugiado, sólo llegaron el pasado año 175 personas, a las que se unen otras 150 que obtuvieron estatutos devaluados (razones humanitarias, desplazados y "otras formas de protección). En definitiva, sólo el 5 por ciento de los solicitantes reciben protección, lo que sitúa a España en el antepenúltimo país de la UE en concesión de protección a refugiados.

Una vez obtenida la protección, aún queda otro calvario: las autoridades consulares tardan hasta un año en conceder el visado a los familiares del refugiado, a pesar de ser un derecho plenamente reconocido en la Convención de Ginebra.

Lo que ocurre con el 95 por ciento restante es, según CEAR, su condena a la residencia irregular en España.